「𝐖𝐡𝐞𝐫𝐞 𝐝𝐨 𝐛𝐫𝐨𝐤𝐞𝐧 𝐡𝐞𝐚𝐫𝐭𝐬 𝐠𝐨? ; 𝐀𝐧𝐧𝐞 × 𝐆𝐢𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭」

7

-Rachel me comentó lo que le hiciste a Roy en la tarde de ayer -comenzó Marilla sin mirarla. Anne sentada en su puesto habitual se pasó la mano derecha por su cara con desesperación.

-¿Podemos no hablar de esto ahora? -preguntó ella con fastidio- No es un buen momento.

-¡Claro! -exclamó irónica- ¡Nunca es un buen momento! ¿Sabes el dolor que has causado en ese chico? Llegó a su casa con un llanto que superaba la barrera un hombre. ¡Y ni hablar de Gilbert Blythe! Se dice por el pueblo que discutieron nuevamente ayer ¿Que te ocurre, Anne? Son buenos muchachos. Tienes que disculparte con ellos.

-¡No! -alzó la voz- ¡Jamás lo haré! ¿En algún momento te preguntaste que podría estar sintiendo yo? No, claro que no. Me he sentido más miserable de lo que alguna vez me sentí en mi vida, y sabes muy bien lo miserable que he sido.

Anne puso ambas manos en su cabello y se levantó con desesperación, dio varias vueltas por el comedor hasta que finalmente respiró y tuvo el valor de mirar a Marilla a los ojos cuando estuvo frente a ella.

-Rechacé a Roy -tomó aire-. Eso lo sabes seguramente, nunca lo vi como algo más que un amigo... ¿sabes lo mucho que me detesto por haber perdido una amistad? ¿Por qué el amor tiene que doler tanto? Todo por estar esperando a...

Calló, se había dado cuenta del error que estaba a punto de cometer demasiado tarde.

-Gilbert Blythe -completó Marilla- Aún lo amas, ¿no?

-Si él se disculpara conmigo y me preguntara si quiero ser su novia nuevamente, seguramente aceptaría. Sé que no me engañó, ayer pude darme cuenta de la sinceridad en sus palabras. Yo solamente no pude controlar la ira en ese momento.

Entonces, más calmada subió a su habitación, la mujer mayor miró a una esquina por varios segundos dejándose llevar por sus pensamientos. Unos momentos más tarde la puerta sería tocada, no por una, si no por dos personas queriendo darle fin a una conversación que lastimosamente la noche anterior no habían podido terminar.