Color Rosa ❦ ; Kookmin

𝑺𝒂𝒍𝒊𝒅𝒂.

Jimin

De nuevo en su linda casa, pero esta vez teniendo otra crisis existencial...

- ¿Y si a Jungkook no le gustan los hombres? - Repetía una y otra vez, rompiendo aún más su roto corazón.

El día anterior, viernes, se le había pasado fenomenal con Hoseok, era su único amigo, aparte de Jungkook, en la secundaria, pero nada lo aliviaba de su dolor.

Le llegó un mensaje, Jimin pensó que sería su madre, pues era la única que siempre solía hacerlo, pero esta vez parecía ser Jungkook.

Se congeló. Ahora no tenía ganas de hablar con nadie pero tal vez mensajear un poco con su crush, también causante de su dolor, aliviaría un poco el dolor:

Jungkook:
Jimin, ¿y si salimos hoy a comer?

Jimin:
Yo también quiero verte... ¿No te molesta si invito a alguien? Es que tengo muchas ganas de que se conozcan ♥

Jungkook:
No, no me molesta en absoluto...

Jimin:
¡Genial! Espero que se lleven bien...

Jungkook:
Bien... Entonces los espero a las 3 p.m. enfrente de la biblioteca...

Jimin:
Okay, ahí estaremos.

Definitivamente eso es lo que Jimin necesitaba, ahora su corazón se sentía lleno y necesitado de estar con aquél chico. Con toda la emoción del mundo llamó a Hoseok para avisarle de la salida.

- ¿Hola Jimin-si?

Hola Hobi Hyung -

- ¿Ocurrió algo?

Nada en especial... Solo que saldremos con Jungkookie-

-¿Saldremos? ¿En plural?

¡Si Hobi, nosotros dos! -

- No me quejo... Quiero conocer a tu futuro novio...

Hyung... Ya hablamos sobre eso... -

- ¿Ya pensaste si él hablaba de ti?

No... -

- Bueno, no importa, voy para allá... ¡Adiós!

A... -

Hoseok no lo dejó terminar de despedirse, pues estaba ideando un plan...

Jimin se quedó pensando cuando Hoseok dijo "¿Ya pensaste si él hablaba de ti?".
El autoestima de Jimin no era bajo, pero se negaba a que el pudiera ser guapo, simplemente no creía poder gustarle a Jungkook.

Dejando todo de lado Jimin se levantó de su cómoda cama y se vistió con el siguiente atuendo.

A Jimin le encantaba vestirse de rosa, su único color visible por lo tanto su favorito.

Claro que no olvidaba su bolisita.

Jimin siempre se ha caracterizado por ser "femenino", y lo acepta, acepta que le gusta maquillarse y pintarse las uñas, que se pasa horas arreglándose el pelo y vistiéndose a la moda, también de pequeño disfrutaba jugar a las muñecas con sus amigas, pero él no era una niña, su manera de caminar era un poco delicada pero no tan exagerada, no usaba tacones ni faldas y tampoco llevaba el pelo largo.

Jimin estaba arreglando su pelo rosa en el baño, rizándolo un poco hasta que escuchó el timbre.

- Wow... ¿Tanto te gusta ese chico? - Dijo Hoseok, asombrado por lo bien que se veía Jimin.

- Soñé muchas veces en una vida a su lado... ¿En serio me veo bien? - Jimin se sentía orgulloso de su trabajo.

- Claro que sí... Supongo que seguirás arreglándote, porque te falta rizarte la mitad del pelo. - Y Hoseok sacó su celular para tomarle una repentina foto a Jimin.

- ¡Oye! - Frunció en ceño, viéndose adorable. - Bien... Sí, seguiré arreglándome. - Dijo Jimin y volvió al baño mientras Hoseok esperaba en la pequeña sala de su casa. Tenía suerte de que sus padres y su hermano no estuvieran, si no lo hubieran puesto a limpiar su desastre, haciendo que llegase tarde.