The crown of queen: Long live the queen

Rempezando las Clases.

La princesa, había paralizado al asesino que habían contratado para asesinarla, el tipo, estaba en el suelo y no se podía mover por la habilidad que la heredera al trono, había adquirido al tener adentro suyo el alma Alexander, un post – humano, que venía de otro mundo.

—No te diré nada—Le contesto el asesino a la princesa, y agrego—Es ética profesional, pequeña princesa.

—Entiendo tu ética, y la respeto—La joven princesa, utilizó su poder, para quitar la daga al asesino, y apuntar con la daga en su cuello—Tu como asesino, sabes que rasgar el cuello de alguien, es una de la forma mas eficiente de matar alguien, imagina, lo agonizante que debe ser una víctima de una fría daga como esta, primero siente el dolor, luego siente como tu sangre sale de tu cuello, si tiene mala suerte y lo más seguro que hoy es tu numero 13, tu tubo respiratorio, deje de funcionar, cuando dejas de respirar, tu cerebro, deja de funcionar, y buenos ya sabes en resto.

Llegó al lugar la chica de la armadura, y un tipo de tez blanca, cuerpo delgado, piel algo arrugada, pelo corto y canoso, un ojo azul y el otro lo tenía parchado, una barba canosa, y vestía con pantalón negro, botas negras, una camisa blanca y larga. El ruido también llamó la atención de los guardias del palacios, las sirvientes, y de los criados, que fueron al lugar, y miraron con asombro el escudo de la joven Ruby.

—¿Esta bien, mi señora? —la chica de la armadura, se acercó a la princesa, preocupada por la situación.

—Si, estoy bien, este tipo, trato de asesinarme, pero lo tengo controlado—La princesa, le contestó a la joven de la armadura.

Los presentes, observaron con sorpresa como Ruby, hacía que la daga flotas por el aire, como si el arma blanca, fuese controlada por una larga mano invisible.

—Entonces, ¿quién te envía?—Ruby, le volvió a preguntar al asesino, con una sonrisa que daba miedo, o eso sintió el hombre que estaba en una posición muy desfavorable.

—Esta… esta bien, el que me envió fue… —No alcanzo a completar la oración, ya que empezó a hecha espuma por la boca y después sus ojos se volvieron blanco.

El asesino, no respondió a la pregunta de la princesa, ya que en un principio quedó inconsciente. La princesa, viendo que su enemigo, no estaba consiente, suspiro y dejó la daga en el suelo, realmente no iba a matarlo, ella sabía que ese sujeto, sólo era un peón, y que aquella persona que había mandado al asesino, era el verdadero problema.

—Lleven al asesino al calabozo, y saquen toda la información posible—El hombre de cuerpo arrugado, le dijo los guardias.

—Si, señor—Dijeron los guardias, que tomaron al asesino y se lo llevaron al calabozo.

«Este tipo, es el regente de este reino, que gobierna por mí, hasta que me convierta en reina», pensó la princesa Ruby y volvió a pensar, «Me parece algo sospechoso, a pesar de que el era el mejor amigo del rey»

La joven princesa, hizo que su escudo desfragmentase, antes de desaparecer, el escudo se volvió a unir, y después por unos momentos, se convirtieron en alas de un color azul claro, que daba a Ruby, la apariencia de un ángel.

—Ella puede invocar las alas de los Ruh-La—Exclamaron los sirvientes y las criadas del palacio, sorprendida por lo que había visto y un a persona, le dio un nuevo sobrenombre a la joven Ruby—Usuaria de la magia sacra.

—Princesa, no sabía que usted conocía la magia sacra—El regente, se acercó a la la joven princesa.

—¿Magia sacra?—preguntó Ruby al regente.

La amiga de Ruby, se acercó a la princesa, y le explicó, que la magia sacra, era la que venía directamente de los divinos, nadie sabe que es realmente esa magia sacra, pero es las alas de color azul, que muestra que alguien tiene esa habilidad, y la princesa, se le aparecieron esas alas, así que es usuaria de la magia sacra.