The crown of queen: Long live the queen

El milagro del templo Escarlata.

La noticia de la resurrección de la princesa, se supo por todo el reino, las personas del reino, llamaron a este suceso como el milagro del templo Escarlata, este suceso de resurrección a parte de impresionar a los habitante del reino, también asombro a los nobles que pretendía el trono, ellos veían frustrado sus demandas para ser el próximo rey, así que decidieron conversar, para decidir los nuevos pasos que deben seguir.

Dos encapuchados, se encontraban en la  mesa de un concurrido bar, ellos se encontraban en la parte más oscura del local, y sólo una vela los iluminaba.

—Pensé que tu asesino, se encargaría de matar a esa mocosa—Uno de los encapuchado le habló al otro.

—El asesino, me aseguró que había matado a la princesa, ni se como pudo sobrevivir—contestó el otro encapuchado y agrego—Ese idiota, me encargaré personalmente de él.

—Lo malo, es que causa de este extraño suceso, la gente piensa que la princesa, es una especie de protegida de Ark-Tórn y de Lo Ruh-La—Comentó el primer encapuchado que agregó, dándole un —Ya le ha dado un sobrenombre, “La joya de Ark-Tórn”.

El segundo conspirador, leyó la noticia del periódico, y lo dejó en la mesa, debían asesinar a la princesa, así que se estuvieron hablando sobre cómo y cuando, poder empezar su plan.

Una joven der armadura, caminaba por el palacio, su destino era el despacho de la princesa, ella, estaba preocupada por la condición de la futura mandataria.

La joven Ruby, que llevaba puesto un vestido azul, zapatos negros, y guantes blanco que le llegaba hasta los hombros, llevaba puesto unos tacones negros, ella no quería utilizar esa ropa, pero como estaba en otro cuerpo, debía actuar como la princesa. Ruby, ella estaba sentada en una silla que se encontraba arriba de una terraza, la chica, se encontraba pensativa, ella miraba su mano.

«Este cuerpo es frágil, no tuvo una preparación marcial», pensó Alexander, que volvió a pensar, «Hace unos momento atrás, probé la fuerza de este cuerpo, utilizando la pared de este cuarto, lastimosamente me lastime la mano»

La joven princesa, se observó la mano, tenía un poco de sangre en su nudillos, y despues de suspirar, observó que sus heridas se cerraban con rapidez y se limpio la sangre con un pañuelo que encontró en la habitación.

«Lo bueno, que aún conservo mis habilidades de post-humano, tanto las pasivas como las ofensivas», suspiro la joven princesa, y volvió a pensar, «Según tengo entendido, la corona del rey, se ha movido de gobernante ha gobernante, atreves de conspiraciones, y manipulaciones de la corte, y como heredera directa de la corona, soy propensa ha morir por asesinato, bueno no es diferente a mi mundo, por suerte tengo mis habilidades, pero no puedo contar siempre con esto»

En esos momento, alguien toca la puerta de la habitación, la joven princesa, observa la puerta desde la silla de la terraza, y pregunta quien era, en eso una voz que reconocía de sus recuerdo, le contesta, así que deja pasar a la dueña de la voz.

—Princesa—La joven de armadura, entra a la habitación, y inclino su cabeza para presentarse.

—No es necesario, tanta formalidad, querida amiga—Ruby, observó a la joven de armadura, en sus recuerdo aquella joven, dos años mayor que la princesa, era una de sus amiga de la infancia, ha pesar de que aquella muchacha era descendiente de un cortesano, que se había ganado sus méritos, como experto militar y como héroe de guerra, ellas habían entablado una amistad duradera y cercana, eran como si fuesen hermanas, la princesa, miró a la chica y sonriendo, le dijo—No estamos en un evento protocolar, o algo así.

—Lo se princesa, pero tanta conmoción por su resurrección, han hecho que me olvidase de eso—La guardia real, le contestó a su amiga y agrego —De toda manera, me alegra que estés bien, y creo que el pueblo también se alegra de esto.