𝑨𝒌𝒂𝒏𝒆; kny x oc

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𝓕𝓮𝓵𝓲𝔃

Es aburrido caminar siempre de noche... quisiera ver la luz del sol, no recuerdo como se sentía y eso me frustra bastante.

Por qué me converti en esto? No lo sé... ya intentaron matarme múltiples veces y solo logro escapar... ellos serían buenas personas si solo me escucharan, pero no lo hacen, no lo intentan... los entiendo perfectamente. Ellos lo hacen porque fueron lastimados por los de mi especie y los comprendo. No negaré que comí y sigo comiendo humanos, pero solamente a los malos y desagradables. A esos que lastiman a otros. Tienen un sabor extraño, uno se acostumbra al saber que si no los comiera seguirían haciendo lo que hacen.
Recuerdo sus caras, sus súplicas o simplemente cuando quedaban en shock al mirarme. Mi piel es negra como el carbón, tiene símbolos color celestes y mis ojos y cabello son grises. Tengo cuerpo de hombre, pero se que soy mujer. Eso asusta a todos, incluso a mi la primera vez que me vi en un cristal... me siento sola...

Me gusta observar desde los árboles altos, ahí me camuflan las ramas y el cielo oscuro y las estrellas camuflan mis ojos. Los animales por alguna razón no se asustan de mi y eso me pone feliz. Hay tantos de ellos que es fascinante, son hermosas criaturas y la nieve a algunos les sienta perfecto.
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?: Que son esos gritos?... que sucede? -piensa-

A lo lejos la demonio ve como un hombre con una antorcha está amenazando a una mujer con su niño, salta por los árboles hasta llegar a un árbol muy cerca de las personas y baja despacio cerrando sus ojos. Se acerca cuidadosamente hasta quedar detrás de la mujer y el niño, el hombre no se dio cuenta de ella y estaba por lanzar la antorcha a la mujer, pero la demonio se lo impidió tomando rápidamente el brazo del hombre y abriendo sus ojos.

Hombre: Q-que mierda eres!? A-alejate MONSTRUO! -grito el hombre asustado-

La mujer abrazaba a su hijo mientras lloraban, el niño no le quitó los ojos de encima a la demonio apreciando sus ojos grises que parecían estrellas.

?: lamento asustarte, pero no permitiré que lastimes a estas personas. -dijo para luego apretar la mano del hombre tirando a la nieve la antorcha, haciendo que sus huesos se rompan y apagando la antorcha-

Hombre: AAGGHH! -grito-

Ahora la única luz que los alumbraba era la de la luna, hermosa y brillante.

?: señorita, no les haré daño pero, pido que su hijo y usted miren hacia otro lado por favor. -dijo amable la demonio-

La mujer y el niño dieron un saltito del susto y miraron hacia otro lado. La demonio con su otra mano agarró el cuello del hombre y lo apretó hasta quebrarlo, matando así al hombre manchando la nieve con sangre. La demonio dejó al hombre tirado y cavó un pozo en la nieve para después enterrar al hombre en ella. Miro hacia atrás y noto como la mujer y el niño mantenían sus miradas hacia atrás mientras temblaban.

?: Ya está, el hombre no los molestará más. No se asusten de mí por favor. -dijo la demonio arrodillándose en la nieve-