El Refugio. (II)

12 2 0
                                    

... la cabeza del monstruo ya no estaba, solo era una masa roja y negra de putrefacción, empecé a reír al sentir la desesperación, las lagrimas empezaron a brotar mis ojos, Hoshi a mi lado gemía de dolor y tristeza al verme en ese estado, se recostó en mi brazo y en un momento levantó sus orejas en señal de alerta y comenzó a gruñir, yo vi un arma, algo borrosa por las lagrimas y luego escuché a alguien hablar

—¿Que le pasa a este tipo...?

***

-En un movimiento rápido golpee el arma que me apuntaba con mi mano derecha y giré para tomar mi cuchillo con la otra, un disparó salió del arma, mientras preparaba el arma para volver a apuntarme, me voltee tomé un impulso con mis piernas y la mano que tenía libre, me abalancé sobre la persona, nunca me había movido tan rápido, la adrenalina recorría mi cuerpo mientras gritaba:

—¡SUELTA EL ARMA! ¡AHORA!

—Primero tu—Dijo una voz temblorosa a mi lado, al voltear había una chica apuntándome con un arma

—(Tengo dos opciones, me rindo y tratamos la situación con calma o doy la orden y Hoshi atacará a la chica, aún no le han prestado atención)—Pensé—Ok, nadie tiene por qué salir herido, baja tu arma y yo soltaré a tu compañero

***

-Ya todos estábamos en calma y debía decir algo, la situación era muy tensa y él aún estaba preparado para disparar a matar

—¿Cómo llegaron aquí?—Dije mientras observaba a mi alrededor—No veo ningún vehículo

—Llegamos aquí al escuchar la gran conmoción, esperábamos ayudar, pero al llegar solo te vimos en el suelo riendo manchado de sangre—Dijo la chica

—Lamento eso...

—Puedo ver que has estado ocupado—Dijo un hombre con una voz intimidante—Hay muchos muertos por todos lados, también vimos que tienes una cerca y una moto en buen estado—Una sonrisa de envidia se formo en su boca

—Claro, llevo varios días preparando este lugar para quedarme un tiempo tranquilo—Sentí un mal presentimiento al hablar con esta persona—Creí que ya no quedaba nadie más

—¿Qué no has visto los carteles que había por toda la ciudad?—Dijo la chica como burlándose de mi

—¿Quién creíste que los escribía?—Le dijo el hombre mientras hacía un ademan con su cabeza para que la chica volteara a verme

-Yo sonreí, voltee al suelo y dije—Mucho gusto, soy el tipo de los carteles :D

—Lo siento, no lo sabía, hemos estado viajando siguiendo los carteles para encontrarte

—Hhmm, pensé que eran una perdida de tiempo, pero bueno, por ahora, ¿por que no pasan a la casa?, no tengo mucho pero al menos no estaremos bajo el sol y la lluvia

*Mientras caminábamos la chica trataba de hacer conversación conmigo*

—¿Cuál es tu nombre?—preguntó ella

—Mi nombre... hace tanto que nadie me lo preguntaba, ya no recuerdo cuando fue la última vez que alguien lo dijo, dejé de usarlo desde que ella...—Mis ojos se llenaron de lagrimas y mi voz de tristeza—Lo siento, no tengo uno, no creo necesitarlo ahora

—Mi nombre es...—Estaba a punto de decir su nombre cuando el tipo la interrumpió

—Eso no es importante ahora, quiero que me hables de la moto que tienes en el granero—Dijo el hombre mientras ponía su arma sobre la mesa con fuerza para hacer notar su furia—La quiero, ¿Qué quieres a cambió de ella?

—No está a la venta—Le dije con un tono serio y seco, al clavar mi cuchillo en la mesa

—No te molestes niño, solo era una pregunta—Dijo como burlándose de mi

—Claro, lo siento, ustedes hacen muchas preguntas

—Es algo obvio cuando conoces a alguien o ¿no lo crees así?—Dijo la chica al tomar al tipo de los hombros y sentarlo en una de las sillas

—Si, es solo que estoy muy cansado, hoy ha sido un día muy largo, estuve todo el día trabajando y luego fui atacado por los monstruos, ahora me doy cuenta que no estoy solo—Me levanté de la silla—Pueden quedarse, será un placer tener compañía humana

—¿Humana?—Preguntó la chica

—Supongo que no lo han notado—Di un silbido—¡Ven aquí amigo!—Hoshi llegó corriendo, el tipo tomó su arma y le apuntó—¿Qué nunca habías visto un perro?—Dije en tono de burla

—Nunca uno como este

—Bueno, el no hace daño, y ya que lo conocen me retiro, pueden tomar cualquier habitación, aún no están limpias, lo siento por eso pero me preocupaba más la seguridad que la limpieza, yo dormiré en el granero, estarán seguros aquí

Me retiré de la casa y entre al granero, Hoshi venía conmigo, subí y me preparé para dormir


-Ok diario, ¿Qué puedo decir de hoy?, reparé la cerca, limpié la zona, casi muero, el cadaver en la bañera es algo que veré en mis sueños toda la vida, casi me vuelvo loco, no se como explicar todo lo que me pasó y todo fue en un solo día.

Empecé a  preparar una zona de cultivo al mismo tiempo que reparaba la cerca, en la tarde después de estar limpiando la casa fui atacado por un grupo de monstruos, golpeado, incluso Hoshi trató de hacer lo posible por defenderme, creo que puedo confiarle mi seguridad, se ha vuelto un compañero muy confiable en poco tiempo, con todo el daño que recibí debería pensar en preparar un arma más larga que mi cuchillo, ¿quizás una lanza?, me encantaría usar un bat de baseball como en las películas, pero sería mucha casualidad poder encontrar uno.

No tengo mucha comida y ahora hay dos personas más aquí, supongo que eso también debí mencionarlo, después de acabar con el ultimo monstruo de los que me atacó (aunque no recuerdo lo que pasó después de que me abalancé sobre el), dos personas llegaron a la granja, un hombre, grande y robusto, aunque eso no evitó que lo derribara, supongo que fue la oportunidad, no creo que pudiera derrotarlo en una pelea mano a mano, venía con un chica, parecía tímida aunque empezó a hablarme tan pronto tuvo la oportunidad, claro... después de quitar su arma de mi cara jaja ja, hm, aun no confío en ese tipo, no dejaba de observarme y de mirar mi moto, no puedo permitirme confiar en nadie, puede que los haya dejado quedarse pero luego de lo que pasó hoy, no creo que quiera a nadie aquí...

Fin de nota del superviviente #53.


—Debo salir a buscar comida, tengo hambre, usé mucha energía en la pelea, no se lo que me pasa, es la segunda vez que pasa esto, la última vez fue cuando ella... odio esto, no puedo dejar de pensar en ese día—Saqué la foto semi-quemada—lo siento... perdóname por no poder protegerte, perdóname... Por favor...

Agobiante existir.Where stories live. Discover now