My eyes (Ross Lynch)

¡Mi celular¡¿Enserio no me vez?

Ross

Esto es lo que pasa cuando una persona sabe improvisar y las cosas le salen bien, si bien al menos no hice el ridículo frente a todos los populares de la escuela y cabe mencionar que espero haber impresionado a la chica que saque a bailar de la cual a un no sé su nombre  creo que en realidad estaba alterado por hacerle la propuesta cuando termino la pista todos en ella se dispersaron para ir a sus respectivos lugares, pensé que la chica venia tras de mí pero no fue así cuando di la vuelta ella estaba por gritar algo y no daba ni un solo paso no lo entendí pero acelere el paso hacia en donde se encontraba.

-¿Por qué ibas a gritar hace un rato?- Le dije y me di cuenta de que estaba pensando en su respuesta, no quería contestarme.

-Mira es algo difícil de explicar y vas a decir ‘’Que loca baila sabiendo que no puede’’...-Dijo y espero, no dije nada deje que continuara.

Pero no lo hizo comenzó a ser arrastrada por un muchacho de cabello negro y ondulado parecido al mío, alto y de cuerpo torneado y delgado no pude distinguir el color de sus ojos y mucho menos sus facciones del rostro por las luces de colores y oscuridad, llegue a pensar que la estaba lastimando pero no dijo nada solo a ya unos cuantos metros lejos de mí, grito.

-Adiós, lo siento otro día te explicaré espero volver a charlar contigo.-Fue lo último que escuche de ella.

Cuando me acerque a la mesa en donde ella estaba logre ver un celular a estas alturas era demasiado raro que no lo hubieran robado, estuvo solo y cualquiera pudo tomarlo. Lo tome y encendí la pantalla e intente desbloquearlo y lo logre con éxito no tenia clave. Supuse y estaba seguro que era de la chica.

Kiara

Cuando desperté el sábado lo primero que hice fue verificar la hora pero me encontré con una grata sorpresa ¡Mi celular no estaba!, lo busque por todas partes más bien fue Jake porque obviamente yo no puedo, aun así no lo encontró y yo no tenía idea de en donde lo pude haber dejado el miedo y el coraje me invadieron era mi segundo celular a mis 18 años y lo perdí, papá y mamá me matarían, lo peor fue que ya no podía hacer nada para evitarlo solo me resigne y espere mi castigo.

Tuve el milagro más grande de mi vida, no me castigaron y ya era lunes eso implicaba ‘’Busca nuevos amigos, escuela y burlas’’. Las personas no asimilaban que no me sentía mal por estar así yo no lo pedi pero quizás las personas tienen que aprender a vivir como la persona que está en el cielo quiere y nadie lo puede cambiar. Fue difícil al principio pero aprendí muchas cosas estando así.

-Ya estas lista.- Me pregunto Jake entrando a mi habitación.

-Sí, ¿podrías pintarme?- Le pregunte mientras me sentaba en la cama y le daba el rímel que ya hacía en mi mano hace un rato esperando a que el viniera.

Ya estaba vestida y mi mochila un poco desgastada ya contenía una libreta y algunos lapiceros, los libros que utilizaría aun no llegaban mi papá los mando para que los cambiaran a sistema Braille y me fuera más fácil leerlos y entender los temas, sabía que los necesitaría hoy porque ya la escuela había comenzado 3 meses atrás, pero era necesario cambiar vidas y mudarnos.

-Te ves linda.- Me dijo mi hermano mientras reía un poco.

-Eso lo sé pero gracias, por eso necesito que me pintes.- Le conteste.

El siempre desde que perdí la vista me ha maquillado, claro tuvo que aprender, pero me quería mucho o al menos es lo que repetía cada hora y yo lo quería demasiado era como mi mejor amigo.

-Ya vámonos señorita porque llegaremos tarde y tenemos que conseguirte un amigo.-Me dijo colgando la mochila en mis hombros y tomando mi mano para colocarla en su brazo.