Mensaje de auxilio.

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(Flash back)

Leona —No tan rápido Bellum, mama no se siente bien— Sostiene de la mano al niño que corre por un camino de terracería.

Bellum —¿Qué sorpresa tienes para mí y la tía Lily? —Preguntaba apresurando el paso.

Leona —Espera— Suelta la mano del pequeño pelinegro y este acelera el paso hasta una carpa.

Mientras tanto dentro de la carpa Lily está machacando unas hiervas mientras habla con un holograma de León.

León —¿Segura que quieres pasar hoy sola? — Se escucha la pregunta desde un holograma pequeño donde se proyecta de cuerpo entero el maestro recostado.

Lily —Si, estoy atareada con un montón de trabajo, ser herborista en estos tiempos de guerra te absorbe todo el tiempo aun en tu cumpleaños— Respondía moliendo algunas hiervas con un mortero.

León —Aun como ayudante me gustaría ir a visitarte o de perdida a mi sobrino.

Lily —No hace falta, ¿Qué ocurre si pierdes la pista del muchacho que persigues?

León —No lo creo, tiene planeado robar el banco central, tomara tiempo— Suena una campana y evocaciones detrás. —Quizá no, debo irme, con permiso— Corta la comunicación.

Lily —No me hace falta tu lastima, solo quiero estar sola— Se estira un poco bostezando mientras siente un tirón de su ropa.

Bellum —Disculpe, estoy buscando a alguien— Hablaba soltando a Lily de la playera.

Lily *¿Un niño? No parece estar asustado* —¿Estás perdido niño? — Preguntaba mientras se colocaba en canclillas para hablar con él.

Bellum negaba con la cabeza. —No— Respondía.

Lily —¿Cuál es tu nombre? — Le preguntaba más confundida por la respuesta a su otra pregunta.

Bellum —Bellum Xenón Xeno.

Leona —Te dije que esperaras— Toma la mano del niño y al elevar la mirada se encuentra con el rostro de Lily con una enorme expresión de sorpresa.

Lily —¿Qué hacen aquí?

Bellum —¡Feliz cumpleaños!

Leona —¡Feliz cumpleaños!

(Fin del flashback)

Despertándose con lágrimas en los ojos Lily abre de lentamente los parpados, su visión es un poco borrosa, al tallarse los ojos logra enfocar a Gaia colocándole un trapo húmedo sobre la cabeza.

Gaia —Me alegra ver que se encuentra bien maestra Lily, pero no se levante, aun no logro bajar su fiebre— Le cambiaba el trapo de la frente

Lily —Si mezclas algo de agua, choco-vainilla y azúcar podría sentirme mejor— Comentaba tapándose hasta la barbilla

Gaia comienza a reír levemente por el comentario de la maestra.

Lily —No encuentro la gracia— Le comenta seriamente.

Gaia —Perdóneme, pero usualmente se prepara un choco-vainilla a los niños para hacerlos sentir mejor.

Lily —Yo inventé el choco-vainilla y fui quien lo uso por primera vez de forma medicinal, mi hijo Bellum se enfermaba con gusto por ello, ¿Aquí hay niños ahora? —Preguntaba cambiando su posición para ver mejor a la peli roja.

Gaia —No, su madre no lo permitirá, yo lo sé por mi hija, cuando se enfermaba era como si fuera una medicina milagrosa, no mejoraba su salud, pero le daba ánimos— Serbia algo de agua en un vaso para luego beberla.

Grimorio 1: Katharo. La luz sumergida en la obscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora