* Capítulo 4 *

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Sonó una voz en sus nucas:

"Te lo digo siempre, Zeta,

al agua no vayas nunca,

si no quieres reprimenda".

Los cuatro la voz buscaron

y la cabeza volvieron

para mirar aliviados

a la pequeña que oyeron.

A la niña preguntaron

que hacía allí tan de noche

y los chicos observaron

su mirada de reproche.

No llegaba a los seis años,

la piel de un tono muy pálido

pelo de color castaño

ojos negros no muy cálidos.

Dos coletas en el pelo

un vestido de aire ajado

con zapatos azul cielo

y en sus sombras algo extraño.


* La penúltima jugada *Donde viven las historias. Descúbrelo ahora