"¿Cómo una simple maraña de pelo rojo penetra en mis pensamientos?"
Es una historia sobre V y Shun pero con un trama diferente
Historia boy×boy, si no te gusta por favor no lo leas y no ofendas.
Los personajes son de mi autoría.
No se aceptan adapta...
Dejo el celular a mi lado y miro al techo. Realmente me da mucho fastidio hacer ese proyecto pero no puedo perder por culpa de esa materia.
Suspiro.
Definitivamente debo hacer algo productivo con mi vida, y tal vez V es quien me hará cambiar las cosas. Reviso el celular en busca de que V haya respondido o por lo menos que haya visto el mensaje pero no, aún nada. Ya que.
Para matar el tiempo esperando a V, mejor salgo a disparar algunas flechas. Puede que sea flojo pero amo el tiro al arco. Salgo de mi cuarto en busca todo el material con la mirada seria y casi sin vida del mayordomo que me ha cuidado durante toda mi vida pero, su cara sigue igual de muerta.
-¿Quiere que lo acompañe amo Shun? - me pregunta volviendo a tomar de su taza de té. Que elegante.
-No es necesario. Avisame cuando llegue V - le pido y lo escucho afirmar antes de yo salir al campo abierto que hay tras la casa. Tal vez cace algunas palomas o algún conejo que encuentre por allí.
Amo el silencio de este lugar, es una de las razones por las que no me gusta que me acompañen cuando salgo a tirar algunas flechas, siento que ya soy suficiente ruido y alguien más seria demasiado. Comienzo a bajar algunas frutas de los árboles y colocándolas dentro de mi mochila, entre más mejor, tal vez le pueden gustar a V, y se queda a cenar, haré que preparen un delicioso conejo para él. Creo que es lo menos que podría hacer ante mi casi acoso a él para que aceptara ser mi compañero de proyecto.
...
Regreso a casa, con dos conejos y muchísima fruta. Estoy todo sudado, con el cabello pegado en mi nuca y en la frente, por correr persiguiendo al conejo y regresando porque V ya está aquí.
-¿Eso son... conejos? - pregunta V sentado en un taburete observando a los conejos con cara de horror.
-¿Te gustan? Los cacé para ti - le guiño un ojo y veo como se rasca la nuca un poco nervioso - Lia, preparalos para la cena, gracias.
-A la orden amo Shun.
-Ven conmigo - lo tomo de la mano arrastrándolo conmigo arriba a la sala de música - sabes, por un momento creí que no vendrías.
Le soy sincero, refresando mi mirada a él durante un momento, pero V solo observa el lugar, aún parece un poco nervioso. Me gustaría calmarlo un poco.
-B-bueno, te dije que sería tu compañero - responde mirándome, rompiendo mi falso pensamiento de él. Le sonrío agradecido hasta que llegamos al lugar -. Tu casa es enorme, y para llegar aquí hay muchas vueltas.
-Si... tampoco me gusta del todo - contesto - puedes hacer lo que quieras, este lugar solo lo uso yo. Ah, iré a ducharme, no demoro.
V observa como el cabello está aún mojado y pegado a mi rostro, casi que no me deja ver bien pero puedo notar perfectamente como sus mejillas están un poco más rosadas, resaltando sus pecas.
-¿Estas bien? - le pregunto apartando mi cabello pero V solo asiente y aparta sus ojos de mi - vale, ya regreso. Si necesitas algo llama a Riyu.
-Si, claro.
Lo dejo y salgo corriendo a mi cuarto, no quiero dejarlo esperar por mucho tiempo, debo demostrarle que puedo hacer las cosas, y muy bien hechas. Me ducho rápido, me seco, me visto y regreso con V. Esta sentado frente al piano con una libreta abierto, y un bocadillo en una de sus manos. Se ve concentrado.
-¿Qué se te ocurre hacer?
-¡AHH!
Su grito me hace gritar a mi sorprendiendo me.
-¡Casi me da un infarto!
-¡Lo siento mucho V! - me acerco a él disculpándome, pero me mira con cara de querer ahorcarme con mi propia cola.
-Solo, no lo vuelvas a hacer.
-Esta bien, lo prometo.
Suspira y termina de comer el bocadillo aún con la cara de asesino en mi dirección. Que miedo da cuando está enojado. Tendré en cuenta eso. Me siento a su lado, y trato de leer lo que está en su libreta pero la aparta en seguida cuando me atrapa.
-Es... privado - guarda su cuaderno en su mochila - y gracias por los bocadillos.
-No es nada. Ahora dime - trato de posicionar me de tal manera que me mire a los ojos, no me gusta cuando las personas evaden mi mirada - ¿qué tienes en mente?
-Pues - estira un de sus brazos para apoyarse, pero termina pisando mi cola... otra vez. Lanzo un sonoros maullido de queja, lo que sobresalta a V - lo siento en serio. Pero es tu culpa por sentarte allí.
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¿Cómo... se... atreve?
-¿Pisas mi cola y luego es mi culpa? - me siento ofendido - ¿cómo no puedes ver semejante cola majestuosa?
Pone cara de poker ante mi pregunta, pero aún así no bajo la guardia. V es duro ante las discusiones. Me gusta.
-¿Quieres discutir o hacer el trabajo?
Me cruzo de brazos, haciendo que mi orgullo gane ante mi parte racional. V rueda los ojos y se vuelva a sentar. ¿En serio?
-Ya, lo siento, ¿si? Comencemos con crear ideas por lo menos - su sonrojo vuelve a aparecer.
Sonrío de medio lado.
-Aww, eres tan lindo - me acerco a él y lo abrazo desordenado sus cabellos, por lo que trata de apartarme de él pero no lo dejo. Es que es tan tierno.
-¡Shun!
-Ay, pero no me pegues. Que violento.
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Créditos a kaery en DevianArt
Disculpen si demoro mucho, las clases virtuales de la universidad por la cuarentena me tienen realmente mal, ya que se vuelve másdifícil de comprender y me desaniman.
