Pelirrojo/yaoi/ Nekos

Especial 1k

V

Desde la primera vez que escuché el sonido del piano, me enamoré.

Creo que tenia unos cinco años cuando comencé las clases de piano. Le rogué a mis padres que me incribieran en unas y casi no lo logro por miedo de ellos a que me dejara de gustar después de dos clases. Pero fue todo lo contrario.

Mi familia no es adinerada, pero hemos estado bien económicamente y como soy hijo único nos ahorramos muchas cosas. Yo estuve ahorrando desde pequeño, con ayuda de ventas de dibujos que hacía y esfuerzo (además de mis padres) pudimos comprar un muy buen piano electrónico. La pasaba más allí que jugando afuera.

Los amigos que hacía eran pocos, no me considero tímido pero el piano me tenía demasiado ocupado, hasta que entré a la universidad. De repente me hice amigos de la mayoría, por lo menos de mi facultad. Pero había alguien a quien jamás hablé.

Su nombre es Shun Nakamoto, y puedo contar con los dedos de mis manos las veces en las que lo he visto en clase. No necesito mucho para saber que es todo un vago pero el misterio es que aun así le vaya realmente excelente en las clases, es una competencia para mi además de Yuri, pero a comparación de Shun es realmente puntual, se le nota el esfuerzo.

Jamás pasó por mi mente entablar alguna conversación con Shun y tampoco pensaba hacerlo, hasta cierto día.

-¡Ahhhhhh! ¡Tonto, pisas mi cola!

Me levanto de un respingo y pido disculpas sin cesar a quien sea que haya lastimado. Es una de los problemas de estar al rededor de tantas personas con cola, hay que estar muy pendiente por donde andes.

-Lo-lo siento, no la ví.

-¡Ten mas cuidado! - grita con fuerza y haciéndome sentir aún más culpable.

-¡En serio lo siento! - le gritó de vuelta sintiendo mi cara arder de la pena. Cuando veo bien de quién se trata, me alejo aún más. ¿Por qué a mí?

Esta es una de las raras veces en las que veo a Shun en la facultad. Creo que el viene 3 veces a la semana como mucho.

Shun es mitad gato. Sus cabellos y ojos son de un increíble color castaño que parecen brillar con luz propia. Su cola es tan esponjosa y larga que dan ganas de acariciarlo.

A primera vista, luce muy despreocupado, incluso bastante frío sobre todo por sus actitudes hacia todo el mundo. Las chicas están tras de él casi igual que con Yuri. Pero solo lo veo andar con una chica, parece que no le interesa mucho socializar, aunque bueno tampoco es que venga mucho a clases.

-¿Eres V?

-Ehhh, si.

¿Realmente sabe quién soy? Se le nota a leguas que solo piensa en él mismo, ah, y en Daila, la chica que siempre pasa con él. Noto como se acerca a mi, demasiado diría yo por lo que me inclino hacia atrás.

-¿Serías mi pareja?

-¿Qué? ¿Qué cosa?

Eso, definitivamente no lo veía venir. ¿Por qué demonios me está pidiendo eso? Ni siquiera me conoce para lanzar de una vez esa pregunta. Es un tipo sinvergüenza alguna. Cuando vuelve a hablar, mi tranquilidad regresa a mi cuerpo.

-¿Serías mi pareja en el proyecto de música?

-Ahhh - suspiro empujándolo de vuelta a su lugar para tener más espacio. Lo que faltaba, que este tonto me pidiera tal cosa pero no pasara, es un vago en toda su significado - no lo creo.

-¿Eh?

-Sé quien eres Shun. Apenas y vas s clases y no sé como es que tienes un buen promedio, pero eres muy vago.

-¡No es cierto!

Levanto una ceja y cruzo los brazos. ¿En serio no le da nada de pena?

-O bueno tal vez si. Pero en serio te necesito, podría perder el semestre y eres mi única salvación.

-No es mi problema - concluyo levantadonme para irme a mi casa. La lluvia ya ha parado, solo un pequeño sereno cae. Mejor me voy antes de que me continúe rogando e impida irme.

-¡Vamos V! - escucho su grito pero lo ignoro al igual que las demás personas mirando la situación. Dios, esto a mi si me da vergüenza. Menos mal no nota mi sonrojo - ¡Haré que seas mi pareja sí o sí.

¡Maldición! Todos lo van a mal interpretar. Las chicas que camina frente a mi se ríen y cuchichean.

Debo tener cuidado son shun.

Tal vez haga otros capítulos desde el punto de vista de V.

Buena suerte en sus estudios y/o trabajo y gracias por leer, espero que les guste esta historia.

Bye.