capítulo 6

2.2K 138 1
                                    

Llevaba como 15 minutos caminando, y no paraba de pensar en ése chico, diablos.

-Es tierno...

Inesperadamente escuché un ruido detrás mío, como si una rama se rompiese.

Narra Paul.

Sam me había enviado a "probar" a la imprenta de Seth, que a la vez era miembro de otra manada. No estaba muy seguro ya qué sí Jacob, Seth o milagrosamente para chica, su madre apareciera, terminaríamos mal, terminaría yo mal.

Sam quería ver que tipo de Lobo es, ya que cuando fuímos a su casa detectamos ciertas cosas poco común en un lobo, no las hemos visto transformadas por lo qué no sabemos si serán pequeñas como una hembra normal o grandes como su esencia deja ver.

Me acerqué sigilosamente a la muchacha pelinegra que se encontraba inmóvil, poco a poco fui saliendo de entre los arbustos.

Narra Tasha.

Leves refunfuños, gruñidos y pisadas comencé a escuchar a mis espaldas, no se que era, pero de algo estaba segura, era muchísimo mas grande que yo, ya que la sombra se asemejaba a la de un oso..m mierda, mamá dijo que hay que quedarse quieta si es un oso.
Tenía miedo, ¿quien no lo tendría si algo anormal se te aparece en medio del bosque?

-Mierda.- murmuré anonadada al girarme.

Un lobo gigante se encontraba frente a mi, su pelaje era gris con un leve tono de marrón, era como el de mí sueño.

-Tranquilo perrito.- dije levantando mis manos en son de paz.

Pero éste empezó a gruñir como si estuviese a punto de atacarme, dejo ver sus enormes dientes con los qué tranquilamente podría comerme si quisiera, comencé a desesperarme.

Mis nervios comenzaron a aumentar juntó con algo dentro de mí, qué no sabía muy bien qué era. Repentinamente el gran lobo tiro un tarascón hacía mí, yo retrocedí a tiempo

Estaba más qué claro que si no corria ahora me comería, obvio que quería morir ¿Quién no? pero de esta manera no. Sin embargo mí cuerpo no me permitía moverme. De repente sentí un golpe de su parte, haciéndome literalmente volar hacia arriba.

Al sentir como mis pies se despegaban del suelo, el golpe del enorme hocico del animal mi cuerpo comenzó a temblar, mí mente se nublo por unos segundos, y mi cuerpo se calentó como nunca, de repente sentí como algo cambiaba, como si en mí se liberara algo, era acogedor y me sentía mas poderosa qué nunca.

Cuando aterrice bruscamente en el suelo note algo anormal, no estaba de pie o tirada, estaba sobre cuatro patas, me sentía descolocada y algo incomoda pero... era como si... todo tuviera sentido a la vez.

No debía pensarlo ni mencionarlo, era un lobo... Wouh... no lo puedo creer. Todo lo que vi esa noche no fue un sueño.

Al observar mis patas note que estas eran negras, como la noche misma.

Repentinamente volví a escuchar esos amenazantes gruñidos, pero mas llenos de prepotencia e intimidación.

Como si fuera lo mas normal del mundo comencé a gruñir, ciertamente no entendía mucho de lo que estaba pasado y menos de lo que pasaría pero.. me dejare llevar por el momento. Mis patas se enterraron con fuerza en la tierra, haciéndole saber qué no flaquearía y menos me rendiría.

Narra Paul.

Me sorprendí al ver el tamaño, la grandeza que soltaba, definitivamente es un alfa y si no lo es, lo será y allí habrán serios problemas sino se llega a un acuerdo.

No era tan grande como Sam, pero si como Jacob y los demas, sus dientes eran enormes, sus ojos eran tan oscuros que apenas podía diferenciarlo de la pupila. Iba a pelear pero recordé que solo debía ver como era, como reaccionaria al ataque, no dañarla, estaría rompiendo las reglas.

Si intento irme podría atacarme, pero si peleo Sam se enfadara y Seth podría enterarse..

Al notar que ella se me iba acercando casi imperceptible me frustre un poco, sus ojos oscuros se clavaron en mi. Esta iba a saltar encima mío pero antes la golpee con mi pata y garras, no parece tener experiencia, tome la oportunidad de escapar y corrí rápidamente a informarlo lo sucedido al alfa.

Narra Tasha.

Gruñí de dolor al sentir las largas y gruesas uñas del lobo enterarse en mí mejilla, creí qué me atacaría pero en vez de eso solo salió corriendo.

Me quedé unos segundos pensando... ¿Qué se supone que haga? se hará tarde y no se como volver a la normalidad ¡¿Siquiera volveré a la normalidad?!

-¡Por aquí escuche unos aullidos!- escuche no muy lejos.

-¿Estas seguro que esas bestias existen?.- oí una voz distinta.

-¡Por supuesto! Y cuando la encontremos la casaremos y con su piel hare una alfombra.-

¿Eh? no, no quiero ser una maldita alfombra.

Sin pensarlo dos veces salí corriendo hacía mí casa con mí mochila en la boca, estoy segura de que mi mama se asustará pero al menos no me colgará o usará de alfombra.

Amor inesperado (Seth Clarewart Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora