Capitulo 4.

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Richard me espera en el consultorio, y sonríe al verme sentado en la silla.

Me indica que me siente en la mesa que está al lado del escritorio, que contiene una pantalla, y al hacerlo levanto un poco mi remera.

Un escalofrío recorre por mi cuerpo, al sentir el gel frío en mi piel.

Me sonríe de nuevo y apoya el aparato en mi vientre.

-¿Esta todo bien? -pregunto con emoción.

-Si, Erick esta todo marchando bien.

Sonrió.

-¿Quieres saber el sexo del bebé?

No lo pienso dos veces y asiento.

-Bien, sera un lindo niño.

Mis ojos se llenan de lágrimas, y mi felicidad es extrema.

Richard me da una par de indicaciones cuando, ya bajo de la camilla y me sonríe antes de que me vaya.

Siempre sonríe y eso me hace un poco feliz.

Al llegar a mi casa, y al abrir la puerta de mi habitación me paro en ella al escuchar ruidos en la cama.

Mi puño golpea la puerta, haciéndola sonar y dos voces se escuchan.

-Estamos ocupados vuelve más tarde.

Cuando decido volver a golpear, me retengo y salgo de aquella casa.

Mi corazón vuelve a latir fuerte, y me duele más que hoy a la mañana.

Necesito hablar con alguien, y mi única opción es Richard.

Al enviarle un mensaje, me envíta a su casa.

Todo un respiro antes de tocar su puerta, y ahí se encuentra el sonriendo de nuevo.

Es raro verlo sin una bata blanca, y es raro verlo afuera del consultorio, pero apesar de las visitas y las charlas por la noches se ha vuelto un amigo más para mí.

Me saludo, y se hace a un lado para que pueda entrar.

Me siento en el sillón, y se va a la cocina.

-¿Deseas comer algo, Erick? Tengo galletitas, golosinas. Lo que quieras.

-Una galletita si no es molesta.

-No, claro que no.

Dice sentándose en el sillón.

-¿Estás bien?

Niego con la cabeza y sus ojos sigue los movimientos que hago con las manos.

-Tengo pensando terminar con Joel.

-¿Por qué, Erick? Si por lo visto son una pareja ejemplar.

Sonrió.

-Rich, tu no sabes o te haces el distraído pero Joel siempre me ha engañando, y estoy cansada de ser el tonto Erick.

-Erick, tú no eres tonto, tu eres una persona bonita y dulce. Pero si Joel, te hace mal, te recomiendo que sigas a tu corazón, y que pienses en tu bebé, muchos problemas le hará daño.

Asiento y después de unos par de consejos de Rich me voy de ahí.

Despedida. -Joerick. [Terminanda]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora