Todo comenzó una tarde como cualquier otra, tu estabas en tu pupitre a unos 4 metros del mío, el día era bueno para salir al jardín y caminar, para ver las nubes en el cielo azul o para cualquier otra cosa, en cambio tú solo te quedabas ahí sentada viendo la vida pasar con gran lentitud y una fuerza vana.
Tu mirada despistada ignoraba mi presencia y mis ganas de querer acercarme a ti, de poder ver frente a frente, esos ojos ámbar, relucientes como un cuerpo celestial, y en un abrir y cerrar se llevan mi alma, inconsciente mi cuerpo reacción de manera involuntaria acercándome a ti poco a poco, acortando ese vacío que aunque muy pequeño nos separaba.
Ante los esfuerzos brutales de mi ser por querer tenerte y poder una sola vez sentir el amor de tu ser, jamás te alcanzo, no porque se diera por vencido, más bien porque ese abismo se volvió aún más grande, mi ser ignoraba algo que ya suponía yo sería cierto, tu ya tenías alguien a quien mirar, alguien que tenia la fortuna de tomarte de la mano y vivir el cuento que yo mismo diseñe para nosotros, para que fuéramos solo los dos, en nuestra vasta existencialidad y contemplación temporal. Yo loco ante tal situación, quedé silenciado, no existe palabra alguna para describir lo que pasó en mi al saber semejante cosa, el saber que jamás podrás estar a mi lado y ser mi compañera de órbita espacial.
Mi corazón,alma y mente quedaron destrozados, atónitos a tal acto, sin forma alguna de poder continuar sin terminar a la deriva en el basto espectro negro espacial que nos terminaba separando, que nos alejaba y acercaba a placer de diversión cósmica.
Buscando consuelo mi espíritu, te canto tratando de que su voz llegaré a ti atravesado la continuidad de la negra soledad existente y ausencia de tu calor, su cantico de corazón puro y sincero, dando como muestra de veracidad, mis fieles sentimientos para con vuestro ser existente, poco a poco se acercaba a ti el cantar que con fervor y pasión surgió de la nada, poco a poco te deseaba más y más, con tal fuerza que ni la luz podría iluminar y la oscuridad podria apagar, poco a poco mi cantico del corazón te llegó, te envolvió, te consumió, dejando las partículas de este fervor.
Te alcance!! Al fin después de tanto te toque.
Puede ver de frente a quien mi corazón pertenecía, la que sería mi compañera celestial, mi centro de gravedad, mi tierra y un poco más
