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Era la cuarta vez...

La cuarta vez que tenía que reprimir el deseo de gruñir a todo aquel que se le acercaba a Izuku.

No es que fuera posesivo o algo así, el problema es que a Midoriya le caían bubis del cielo al parecer.

Mei Hatsume no paraba de seguir a su mejor amigo y eso era una patada en la entrepierna para Todoroki Shoto.

¿Por qué?

Porque estaba perdidamente enamorado de su mejor amigo.

¿El problema?

Eso, exactamente, además que este tiene tantos admiradores que parece una estrella de cine.

Apenas llevaban una semana en el colegio y ya todos le miraban.

En esos momentos quería ser como Katsuki Bakugo para properir insultos a diestra y siniestra.

—¿Todoroki-kun? —esa voz...

Era del causante de sus desgracias si.

Estúpido Midoriya Izuku revienta ovarios.

—¿Si? —su amigo le veía con sus grandes ojos verdosos, con brillos de estrellas en su pupila tintada de leves retazos turquesa que se combinaban con verde.

En resumen, unos ojos para derretirse.

Todoroki hubiese querido que en ese mismo momento, Midoriya le hubiese hecho un kabedon.

Y si, eso que se hacía en los animes Shoujo que sólo se encontraba por casualidad.

Por simple y mera casualidad.

Izuku mordió su labio inferior haciendo que a Shoto el corazón le diera fuertes golpes en el pecho.

—Solo es que tu mirada se veía lejana ¿Estás bien? —preguntó el de pecas acercando su rostro al bicolor.

Cuando él otro iba a responder...

—Bro!!!

Genial.

—Kirishima —en un instante Midoriya dejó de prestarle atención.

Ahora estaba demasiado concentrado hablando de quien sabe que con Eijiro Kirishima.

Últimamente eran muy unidos.. Muy... Amigos...

Ja, créanlo.

Todoroki Shoto sabía que la mayoría de sus amigos le bateaban al otro lado.

Si bueno, con pito es más rico...

—Todobro, Hola ¿Qué tal?

Todoroki sonrió sin despegar sus labios.

Le hubiera gustado que en el mundo hubiese algo así como poderes y que el tuviese un poder de hielo para congelar esa cara de sol que tenía Kirishima.

El no, el era una eterna cara de poker sub normal que no sabía comunicarse con otros seres humanos.

—Midoriya es genial, ayer hicimos —Eijiro seguía hablando sin parar ante la supuesta atenta mirada del bicolor que en realidad había dejado de escuchar desde que dijo:Midoriya es genial, ayer hicimos...

Y si Midoriya tenía una especie de fetiche sexual por los chicos Bara como el pelirrojo.

Se miró a si mismo, no se veía mal, nada mal.

Miro a Eijiro, joder.

¿Qué comía ese tipo que parecía el ganador de un concurso de Bara?

Debería hacer más ejercio, tal vez Izuku aún que sea lo quiera como esclavo sexual, es decir no le molestaría ser follado por Izuku pero, también quería amor, comprensión y ternura.

No En Mi Guardia ~Tododeku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora