El secreto de Alicia

¿conseguiré verte de nuevo?

Despierto un día más teniendo la misma rutina, me levanto, hago mi cuarto, desayuno intentando evitar a mi madre para que no me moleste o me chille cosas que no quiero escuchar.

me visto y voy a ver  a Luis para que deje de molestarme al menos durante una parte del día, voy a su casa, estamos besándonos durante un rato y me marcho antes de que quiera pasar al siguiente paso, cosa que no quiero que ocurra. Aunque el insista para pasar a ese paso, yo no quiero porque no quiero equivocarme. Rompería con Luis, pero sufrió de bulimia y cada vez que no le respondo me viene llorando, y después pasa a estar cabreado; entonces no quiero imaginarme que haría si le dejo.

El camino desde mi casa hasta la suya dura 40 minutos si voy a paso ligero, pero como lo último que quiero hacer es volver a mi casa, voy a un ritmo lento caminando por la orilla mientras observo cómo se mueven las olas.

A lo lejos vi una silueta que me resultaba algo familiar, pero no le dí mucha importancia hasta que pasé por delante de esa persona y varios chicos. Era él, el extraño del parque, quería acercarme a él pero había más chicos y no quería que se rieran de mi. Entonces pasé de largo rezando para volver a encontrármelo.

No llevaba ni 20 minutos y Luis ya me estaba llamando para preguntarme dónde estaba y con quien, únicamente le dije "quiero estar  solas con mis pensamientos" y le colgué. Quería respirar, sentirme sola de verdad.

Llegué a mi casa y qué extraño, mi madre no me comentó nada sobre lo que acababa de pasar, que le había colgado a Luis. Ella estaba en la cocina mirando el móvil.

Mamá,¿ha pasado algo? te veo muy seria - le pregunté asomando la cabeza por el marco de la puerta.

Alicia, tú vete con Luis y no te metas en lo que no te incumbe- dijo sin apartar la vista de su móvil.

Yo no te he hecho nada...-digo mientras voy a mi habitación.

volví a ponerme música y seguía sin contestarle a Luis, cuando quise darme cuenta era por la tarde, quería llevarme de nuevo al parque para volver a encontrarme con el extraño del parque.
Me senté en mi mesa de picnic y comencé de nuevo a dibujar, pasaron las horas, la gente iba y venían, los niños pequeños correteaban por el parque pero el extraño del parque no aparecía.
Se empezó a hacer de noche así que decidí volver a mi casa esquivando a mi madre sin saber aún que la tenía tan extraña.
Llegué a mi habitación, me puse música y me dormí.