•Tanjiro Kamado•

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La luna empezaba a asomarse y aún seguía entrenando, ya no podía levantar la katana lo suficiente para dar un golpe certero, pero me negaba a parar.

-Tengo que ser más fuerte-me dije apretando mi espada.

°Flash back°

Corría y corría, aterrorizada en que aquella cosa me alcanzara, me dolía tanto el pecho, por suerte ya estaba llegando a mi hogar.
Mi padre salió a mi rescate, me imagino que tuvo que escuchar los gritos de auxilio por mi parte.

-¡Quédate detrás de mi, _____!-le hice caso y me aferré a su espalda, pude ver que en sus manos mantenía un cuchillo.

El demonio llegó en un pestañeo a nuestro lado, mi padre no dudó en clavarle el cuchillo en uno de sus ojos.

-¡Bastaardooo!-gruñó de dolor el ser.

-¡Corre _____! Yo lo detendré-con inseguridad traté de correr lo más rápido posible entre la oscuridad tropezando con todo en mi camino.

Mis lágrimas no dejaban de brotar al pensar que le podía suceder a mi padre.

Terminé adentrándome en una cueva, mi corazón seguía latiendo a mil por hora, traté respirar hondo y comencé a cantar.
Aquello me tranquilizaba desde que era una bebé... mamá, mamá me cantaba siempre, mi padre me dijo que lo hacía incluso antes de que naciera.

Sin darme cuenta empezaban a pesarme los ojos y sin más me quedé dormida.

Rayos de luz entraban y daban directo en mi cara

-¿Pero qué?..-dije mientras me resfregaba los ojos

Y recordé todo lo que pasó hace algunas horas atrás, me paré de un viaje y salí del lugar

Al llegar estaba todo tan tranquilo, caminé acercandome más a la entrada, casi tropiezo con una gran piedra que estaba en el suelo, sin dudar la agarré.

Abrí la puerta y dejé caer la piedra que sostenía, mis ojos estaban húmedos y mi pecho se apretó.

-¿P-papá?-dije sin creer que lo que presenciaba mi vista.

En el suelo se encontraba el cuerpo ya inerte de mi padre con un gran charco rojo cubriéndolo, tenía algunas mordeduras y partes de sus extremidades alejadas de él.

...

Tiré el último terrón de tierra antes de colocarme el morral en mi espalda y despedirme para siempre de mi querido papá.

-Espero que puedas reunirte con mamá, dale muchos abrazos de mi parte- dije limpiando las lágrimas que corrían sin cesar por mi cara-Te prometo que te vengaré- coloqué una pequeña flor en su tumba y emprendí mi viaje.

°Fin Flash back°

-Deberías de tomar un descanso, _____

No le coloqué atención a esa vocecita y seguí con lo mío.

-Ya es tarde, deberías entrar a la casa- insistió.

Una vez más no lo tomé en cuenta.

-No me ignores ____-dijo el proveniente de esa voz justo enfrente de mis ojos, por la sorpresa retrocedí, al ser tan torpe me enrede con mis propios pies y caí, bueno, casi.

-¡Cuidado!-dijo sujetándome rápidamente de la cintura el chico.

Me ruboricé ligeramente por su acción.

-G-gracias, Tanjiro-kun- me aparté lo más rápido posible de su lado-Lo siento, estaba concentrada con mi práctica-dije recogiendo mi katana y guardandola en su funda.

-Descuida, me sucede lo mismo, siento que debería entrenar día y noche para cumplir mi meta pero mi cuerpo no me lo permite y me obligo a detenerme. Tienes que prestar más atención en ti misma, esto no te hace bien-me dijo, luego observé que quedó viendo mis manos las cuales estaban llenas de magulladuras.

No tardó en tomarlas e inspeccionar cada pequeña herida. Otra vez apareció un fuerte calor en mi cara que traté de controlar.

-¿Todo esto lo haces por tu padre, cierto?-asentí sin verle-¡Esperame, ya vuelvo!-me dijo para irse corriendo y adentrarse a la casa.

Me senté en el suelo esperando a que regresara el chico de ojos color rojo oscuro.

-Siempre tan atento...

Al llegar traía consigo un pequeño frasco, algodón y unas vendas, se posicionó en frente de mí, dejando las cosas a su lado e hizo un gesto para que estirara mis brazos.

-Si que entrenas duro _____-bajé la mirada un poco apenada.

Sostuvo mis manos para luego colocar el líquido del frasco.

-Aguanta, no te dolerá mucho-empezó a rociar el líquido por toda mi palma

-Auch! Du-uele-me quejé, esa cosa ardía y mucho.

Al finalizar vendó cuidadosamente toda mi mano, realizó el mismo procedimiento con la otra.

-Ta-da!- me dedicó una tierna sonrisa.

-M-muchas g-gracias pero no había necesidad de que lo h-hicieras, Tanjiro-kun-lo miré, él solo se rascaba la cabeza y noté que empezó a notarse un cálido rosa en sus mejillas.

-Haría todo lo que estuviera a mi alcance con el fin de verte bien _____-me revolvió el pelo.

Mi corazón se detuvo por un segundo.

Desde que conocí a Tanjiro me envolvió con su amabilidad y su notable preocupación por nosotros.

Entendió por todo lo que pasé este último tiempo y me dijo que me uniera con ellos, dude un poco pero con el pasar de los días me sentí por fin incluida en su grupo.

Su dulce voz me sacó de mis pensamientos.

-Vamos, ahora si que si entremos, está empezando a hacer frío-se sacó su haori y me lo colocó en los hombros.

Nos levantamos y fuimos camino al lugar donde nos estábamos hospedando.

Paré en seco, me coloqué en frente de él, sostuve sus mejillas y le di un fugaz beso en los labios.
Me fui corriendo por la vergüenza, no sé por qué lo hice pero no me arrepentía de nada.

Se quedó estático y escuché un leve "¿Eh?" salir de su boca.

No le volveré a verle la cara por un laaargo tiempo.

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Wow, mi primer capítulo, estoy ansiosa en seguir con los otros bebés ewe
Que es intensa esta niñiaaa, mencanta!♡

Kimetsu no Yaiba x______•One Shots• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora