DOS

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 El recuerdo de esa foto con su mejor amigo siendo apenas unos adolescentes le hizo sonreír en demasía, recordar a Yoongi era como recordar a un pequeño gatito con pinta de amargado, cuando la verdad era distinta, el era la persona mas dulce que puedes conocer en todo el mundo, siempre preocupándose por los demás antes que nadie, el sin duda era la persona mas buena que en su vida conoció.

Últimamente el problema era que no veía a Yoongi desde hace tal vez unos dos o tres años, sus caminos se separaron un poco debido a los grandes sueños de su hyung, pero no podía culpar lo, gracias a las noticias se entero que ahora era uno de los mejores productores de la industria musical.

Su hyung a pesar de todo lo que pasaron, el cumplió su sueño, la vida le devolvió lo que alguna vez perdió.

Su amor por la música.

El estaba feliz, si su hyung era feliz el también lo era, porque así siempre había sido su amistad, donde a pesar de todo ellos seguían juntos.

La verdad también tenia un poco de envidia, su hyung pudo encontrar algo que Jungkook tal vez en lo que le reste de su vida no encontró o encontrara; El amor de su vida.

Junkook tenia envidia si, pero jamas lo admitiría porque a pesar de todo el era feliz con su ahora esposa y con sus dos hijos, con eso el estaba mas que bien, porque alguna vez le prometió a alguien que el estaría bien a pesar de todo.

Al ver la siguiente imagen sintió su corazón doler, recordar aquella hermosa sonrisa lo hacia sentirse feliz y miserable a la vez.

Recién llegaban al que seria el hotel, el pequeño chico de cabellos azabaches sentía que todo era muy grande, solo tenia diecisiete años, sentía que el mundo entero era gigante y el tenia unas enormes ganas de comérselo entero, porque así era Jung...

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Recién llegaban al que seria el hotel, el pequeño chico de cabellos azabaches sentía que todo era muy grande, solo tenia diecisiete años, sentía que el mundo entero era gigante y el tenia unas enormes ganas de comérselo entero, porque así era Jungkook un chiquillo pequeño con unas enormes ganas de dominar el mundo.

Al bajar de la camioneta vio a su hyung apartarse un poco para contestar su teléfono, el por lo tanto bajo sus maletas y las de su hyung para no tardar mas, el quería llegar lo mas rápido a su habitación para darse un baño y comer algo, el viaje lo había dejado algo agotado y con sus posaderas adoloridas.

Vio a su Hyung acercarse con un chico tal vez dos o tres centímetros mas bajo que el, tenia la cabellera rubia y unos labios un poco carnosos, siendo sincero era muy atractivo, tal vez ese era el famoso Jimin del que su amigo le había contado, llegaron frente a el y Yoongi se puso algo nervioso.

-Kook, te presento a Jimin y Jimin el es Kook mi pequeño dongsaeng- Sip, definitivamente era Jimin, Kook le mostró una de sus famosas sonrisas de conejo y le brindo una pequeña reverencia.

-Es un placer, Yoongi hyung se la pasa hablando de ti- Kook miro con una sonrisa burlona al mayor y este solo viro los ojos.

-El placer es mio, Yoongi hyung igual habla mucho sobre ti- Jimin sonrió y Kook supo el por que su hyung quería estar con el, su sonrisa era preciosa, siendo sincero Jungkook era muy bueno leyendo a las personas y Jimin tenia todo lo que alguna vez su hyung busco, era tierno, lindo y muy educado, definitivamente su hyung tenia buenos gustos.

Entonces un chico de piel canela empezó a acercarse a ellos y Jungkook sintió que le faltaba el aire, era un chico al que las palabras atractivo, precioso o hermoso le quedaban cortas, parecía hecho por los mismísimos dioses, su mandíbula marcada, ese cabello rizado color negro azabache y unos ojos color cafés que contrastaban excelente con todo su rostro y lo hacían perderse en ellos, era alto y con una buena figura, y solo pudo salir de su pequeña ensoñación por la culpa de su hyung que parecía tener un rato hablándole.

-¿Entonces Kook?- el castaño solo pudo asentir confundido.

-¿Mande?- su hyung resoplo y escucho una pequeña risita por parte de Jimin.

-Te decía, el es Taehyung y el es con el que te quedarías en vez de conmigo, entonces ¿aceptas?- Kook volvió a escanear rápidamente al hermoso chico de hebras negras, decir que no quería seria decir una de las peores mentiras del mundo.

-Si, si, por mi esta bien- dijo sonriendo bobamente al ver que Tae le regalaba una sonrisa cuadrada, Dios!! podría jurar que era la sonrisa mas hermosa que vio en toda su vida.

-Entonces vamos, hay que bañarse y luego comer- Dijo Jimin y empezaron a caminar hacia el hotel, un joven se acerco antes y se llevo la camioneta de Yoongi a lo que parecía ser el estacionamiento de este, el se burlo un poco al ver como el chico se asustaba de la mirada fría de su hyung y la advertencia que le daba si le llegaba a pasar algo a su bebe como el solía llamarle.

Ya en el elevador Jimin rompió el pequeño silencio cómodo que se había formado.

-Entonces Kook, con que acabas de terminar la preparatoria ¿No?- El pequeño castaño sonrió orgulloso de ese pequeño logro en su vida.

-Sip, de hecho fui de los mejores- dijo con un tono un poco presumido y Yoongi solo resoplo -Ademas de que me dijeron que era muy probable que quedaría en cualquier universidad que yo quiera-

-Wow! eso suena genial- Escucho por primera vez la voz de Tae y su mente se bloqueo por completo, era una voz profunda y un poco gruesa, definitivamente ese hombre era perfecto -Entonces ¿piensas entrar a la universidad Kook?-

 -S-si...- escucho la pequeña risa burlesca de su hyung.

-Ja... Kookie~ Respira parece que se te acaba el oxigeno- le dijo y el pequeño castaño se sonrojo provocando unas leves risas por parte de los otros dos mayores que se morían de ternura al verlo.

-Tierno~- Tae no pudo evitar el impulso de acariciar su cabello, provocando unas ligeras mariposas en su estomago, definitivamente el castañito era la cosita mas tierna que había visto Tae en toda su vida.

-Tierno~- Tae no pudo evitar el impulso de acariciar su cabello, provocando unas ligeras mariposas en su estomago, definitivamente el castañito era la cosita mas tierna que había visto Tae en toda su vida

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Lee Yang Mi

The One That Got AwayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora