Eren no apartaba la mirada de Levi, quien en esos momentos estaba preparando la cena. Desde hace casi tres meses han estado saliendo, hace un mes han comenzado a vivir en el mismo lugar pero había algo que inquietaba a Eren desde que comenzó a vivir con Levi. Jamás habían dormido en la misma cama.
-¿Cuándo podré dormir contigo?- preguntó el castaño desde el comedor.
Levi en ese momento paró de cortar la verdura, se quedó en silencio y respondió- No será hoy.
Eren hizo una mueca, estaba cansado de escuchar la misma respuesta cada vez, pero ahora que lo pensaba jamás había sabido la razón, temía preguntar y poner de mal humor a Levi, porque no se pondría bonita la cosa cuando el pelinegro está fastidiado. Pero, el castaño quería saber el motivo así que se levantó de su asiento y se dirigió a Levi.
- ¿Por qué?-preguntó Eren abrazando al pelinegro por detrás.
-¿De qué me hablas ahora?-cuestionó el pelinegro dejando a un lado lo que hacía para escuchar lo que tenía que decir el mocoso.
-.....dormir juntos- respondió uniéndo su cabeza a la de Levi- dime porqué no puedo.
- Aun no es tiempo- apartó los brazos de Eren de él y dio la vuelta para verlo de frente- eres un mocoso, debes saber que los adultos debemos tomar decisiones maduras para no afectar, en este caso, a los que queremos.
Eren tomó la mano del pelinegro- Dormir juntos no me lastimará- siguió insistiendo para ver si podía persuadirlo.
- Eres un mocoso aún, esta es mi departamento así que no me contradigas en lo que te digo- dio media vuelta para continuar con la cena pero, el castaño tomó su brazo de manera impulsiva lo cual fastidió a Levi- ¡Para de una vez!- exclamó.
- Al dime la razón, sé que soy un mocoso que no entiende las cosas a veces pero......por favor dime la razón- suplicó el castaño.
Levi lo miró por unos momentos, observó que sus ojos estaban cristalinos, no podía verlo así y cuando abrió la boca para responder, la olla con agua comenzó a burbujear así que tuvo que apagar el gas.
- Iré a comprar algo para beber- dijo Eren en seco.
Levi pasó su mano por el cuello- ¿Por qué tenía que ser un mocoso?
El castaño fue a la tienda de conveniencia más cercana a comprar unas bebidas, sentía que debía disculparse por haberse puesto muy insistente con Levi pero no sabía como le haría para oder verlo a la cara, se sentía muy avergonzado de lo que había hecho. Una vez que salió de la tienda pasó por un parque en donde vio como unos hombres acosaban a una mujer joven que traía con ella a su niño.
-¡Vayánse de aquí!- gritó el niño con valentía.
Uno de los hombres lo tomó por el cuello de la camisa apuntando con una navaja al pequeño indefenso, la madre suplicó que no le hicieran daño. Eren llegó por detrás de uno dándole una patada en la espalda, el hombre gimió maldiciendo. El sujeto que traía al niño fue a ayudar a su compañero soltándo bruscamente al pequeño, el castaño comenzó a ver que estrategia podía funcionar para acabar con ambos hombres pero no tenía el tiempo suficiente, no era Armin como para planear las cosas en poco tiempo. Uno de ellos corrió hacia Eren con la navaja en la mano, el castaño no pudo esquivarlo del todo porque su brazo terminó con una profunda cortada.
Observó a la mujer y al niño temblando de miedo, ellos dependían de él así que no se podía dar por vencido, después de un rato llegó un policía que había sido llamado y vino a acabar con las cosas. Los hombres estaban muy cansados que no tenían energía para salir corriendo, por poco arrestaban a Eren pero la mujer fue a su decirle al oficial que él había ayudado a ella y su hijo.
- Esta bien, pero a la otra ve y llama a un policía para arreglar las cosas - comentó el oficial.
El castaño asintió.
- Muchas gracias, joven- dijo la mujer. Ésta vio que sangraba por el brazo- ¡Dios santo! déjame llevarte a mi casa para desinfectar esa herida.
- No, pero muchas gracias. Vivo aquí cerca, no se preocupe.
La mujer no estaba segura pero decidió no decir más y agradeció de nuevo al igual que el niño. Eren había dejado sus cosas frente a la tienda de conveniencia, era una suerte que nadie las había tomado así que cogió las cosas y se marchó a casa.
Una vez que entró a ella, entró al comedor con calma. Había olvidado por completo lo que había sucedido antes. Observó que la cena estaba servida y a Levi sentado comiendo mientras leía el periódico.
-¿Por que tardaste tanto?- el pelinegro alzó su vista y en su rostro denotó un gesto de preocupación cuando vio el brazo sangrando- ¡¿Qué te ha pasado?!
- ¿Eh?- el castaño no entendió hasta que vio su brazo- No es nada, solo....
Levi interrumpió su explicación dirigiéndose a él.
-Maldito mocoso, ven acá- lo tomó de la oreja y se lo llevó a baño. Estando ahí, Levi sacó un kit de primeros auxilios que se encontraba en el compartimiento debajo del lavamanos. - ¿Qué sucedió?-volvió a cuestionar.
- Vi a unos hombres molestando a una mujer y a un niño y fui a defenderlos- dijó con temor al ver el desinfectante en la mano del pelinegro, iba a doler y así fue. Mientras Levi vendaba el brazo del catsaño, éste dijo: Lo siento, por todo lo que ha pasado.
- Tenías que ser un mocoso- comentó el pelinegro terminando de vendar el brazo, Eren no resistió y lo abrazo con fuerza- La comida se va a enfriar así que suéltame.
- Espera un poco más, por favor- mencionó Eren percibiendo un olor agradable proveniente del cabello del pelinegro- Te amo.
- Ya lo sé, ahora suéltame o la comida se enfriará.- pero el castaño no le hizo caso- No voy a calentar tu comida, eh.
La comida estuvo deliciosa, Eren se sentó en el sofá viendo como se iba a acomodar para dormir y miró a Levi entrar a su habitación, sería otra noche sin poder dormir juntos. En medio de la noche, el castaño se despertó al sentir un peso sobre su torso, se levantó lo suficiente para ver que se trataba de Levi, quién parecía estar dormido.
- ¿Te he despertado?- preguntó de repente el pelinegro abriendo los ojos.
- Esta bien, ¿Pero, qué haces aquí?
- Eso no te incumbe- respondió Levi ocultar volviendo a cerrar los ojos.
- ¿Pesadillas?- cuestionó Eren viendo si podía acertar el motivo del pelinegro de estar ahí.
-¿Cómo crees que.....?- miró fijamente a Eren a los ojos- Eres un idiota-mencionó mientras se ponía de pie, se dirigió a su habitación sin decir nada pero se detuvo antes de entrar en ella- Ven.
- Mande- dijo Eren con una sonrisa nerviosa al no entender lo que pasaba.
-Esta noche dormirás conmigo- dijo finalmente Levi manteniendo en su rostro la seriedad de siempre. El castaño no podía creer lo que decía, se levantó del sofá y se abalanzó al pelinegro mostrando lo feliz que era- No te emociones tanto, mocoso. Solo será esta noche.
- Esta bien, no voy a exigir nada más- comentó el castaño.
- Más te vale o te echaré de aquí.