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Estrella Erizada se hayaba sobre la Peña Alta con Estrella de Cuervo a su lado. Debajo de la gran roca, Zarpa Ortigada, Zarpa Nebulosa y Demacrado estaban sentados muy quietos. Mientras que los dos aprendices del Clan del Fuego estaban nerviosos, el gato del Clan del Espino se encontraba serio y mirando con inugualdad a su líder.

- Zarpa Ortigada y Zarpa Nebulosa - comenzó la gata blanca y naranja - vuestro entrenamiento ha finalizado y ya es hora de que os de vuestros nombres de guerreros. En nombre del Clan Estelar Zarpa Ortigada a partir de hoy serás conocido como Ojo Ortigado. Qué el Clan Estelar ilumine siempre tu camino.

El gato marrón moteado subió a la Peña Alta y chocó su hocico con el de la líder después volvió a bajar junto a los demás aprendices situándose cerca de su hermano.

- Y Zarpa Nebulosa a partir de hoy tú serás conocido como Manto Nebuloso. Qué el Clan Estelar ilumine siempre tu camino.

El guerrero copió a su hermano mayor y subió a la roca para entrechocar su hocico con el de Estrella Erizada mientras esta lamía su omóplato.

- Y Demacrado - dijo Estrella de Cuervo con una voz áspera - a partir de hoy tú serás conocido como Garra Demacrada. Qué el Clan Estelar ilumine tu camino.

El nuevo guerrero no hizo como los otros dos al ir a mostrarle su respeto a su líder. En lugar de eso se giró a los gatos del clan como Ojo Ortigado y Manto Nebuloso hicieron también.

Los gatos le vitorearon su nombre al igual que a los nuevos guerreros del Clan del Fuego. Esquinado se fijó en la mirada desgarradora de Estrella de Cuervo y de repente. Una vez más se puso a llover fuertemente y fue entonces cuando al guerrero le entró la duda de cuantas vidas le quedaban al joven atigrado.

Cuello Alado se refugió junto a él bajo una roca. El esponjoso pelaje blanco de la hija de Estrella Erizada hacia que Esquinado entrara en calor y al mismo tiempo se sintiera agusto. Nunca le habían gustado las tormentas.

Una enorme zarpa lo agarró de la cola y le tiró hacia atrás poniéndolo debajo de las zarpas de su atacante. Al recuperar la conciencia vio que su compañera se reía y que el gato que lo había arrinconado no era más que su antiguo amigo.

- ¿Y ya está? - bufó el guerrero blanco y negro - ¿No te vas a disculpar por lo que me has hecho sufrir?

- ¿De que hablas? Yo no te he hecho nada - respondió el gato rojizo sentándose cerca suyo y empezando a asearse.

- ¡Amenazaste a mis hijos e hiciste que me expulsaran! - el guerrero se puso en pie y volvió junto a Cuello Alado - no quiero que te acerques a mí. El Clan del Fuego re habrá aceptado y te habrá concedido hasta un aprendiz pero para mí y para mis hijos solo eres un asesino.

Parche entró con el pelo empapado a la guarida seguida de cerca por Zarpa Bermeja.

- Agh odio las tormentas - se quejó la aprendiza - ¿Cuando se va a pasar la temporada de lluvia?

La gatita se situó al lado de su padre y frotó su hocico contra el de este.

- Sé que los aprendices no pueden estar aquí - dijo Parche - pero te he hechado mucho de menos.

Esquinado le dio un lametón a sus dos hijos lleno de afecto pero entró Tinieblino tras la patrulla del atardecer y los echó de allí. Por lo menos había podido estar un poco con sus retoños. Los había echado mucho de menos y era lo único en lo que había pensado en su tiempo de proscrito.

Garra Oscura salió de la guarida de los veteranos junto con Garra Albina, el gato negro estaba débil y parecía que cada paso que daba le dolía más que el anterior. Se detuvo en medio del claro y cayó al suelo respirando agitadamente, incapaz de levantarse.

- ¡No! - chillaba la veterana - ¡Te dije que te quedarás en la guarida!

Corazón de Lince salió corriendo al encuentro de su padre, que llacía en el suelo.

- Ha... ¿Muerto? - dijo él gato multicolor temblando.

La veterana le arañó el ojo a su hijo de manera feroz y este no se defendió hasta que Estrella de Cuervo salió de la guarida por el escándalo que se estaba formando.

- ¡Hazlo! - bufaba - ¿O vas a dejar que un gato del Clan de la Llama te mate por qué le tienes miedo?

- Pero ella es mi madre...
- Exacto - replicó sin dejarlo terminar - ¿Y permites que te trate así?

El gato desenvainó las uñas y saltó sobre la gata color nieve para terminar con su vida rápidamente, no pareció costarle mucho.

- ¿¡Qué estás haciendo Estrella de Cuervo!? - era Estrella Erizada - ¡Encargate de dirigir a tu clan, que yo lo haré con el mío!

- Así es como han estado llendo las cosas hasta ahora y mira como hemos acabado - Acorraló a la gata dentro de la guarida y se dirigió a los gatos de los dos clanes - A partir de ahora mando yo sobre vosotros, no habrá lugartenientes, Estrella Erizada hará ese trabajo por vosotros.

- ¡Pero ella es la líder del Clan del Fuego! - dijo Esquinado tratando de trepar la Peña Alta para encararse al líder - ¿Vas a intervenir en nombre del Clan Estelar?

- El Clan Estelar nos dio la espalda a nosotros cuando nos envió al Clan de la Llama. Tengo derecho a cambiar su palabra.

- ¡Pues yo no quiero seguir tu palabra! - bufó el gato de ojos bicolores.

El líder atigrado erizó su pelo y golpeó al gato haciendo que se resbalara con la lluvia y se golpeara la cabeza impactando con el suelo.

- ¡¿Ha muerto?! - chilló Parche.

El líder del Clan volvió a alzar la voz tras unos segundos de silencio.

- A partir de ahora este Clan es el Clan del Cuervo y nada más. No me voy a permitir perder más guerreros que nos van a hacer falta en esta guerra, por eso me enorgullece deciros que... Va a haber nuevos cachorros en este Clan... Cachorros de verdad, ellos si van a seguir a rajatabla mis órdenes, no como los de la maternidad que se vuelven unos revoltosos y solo piensan en cuando se harán aprendices.

- ¿Quiénes son los padres? - maulló Corazón de Tigre, parecía ser el único que no estaba afectado por tanta masacre.

- Estrella Erizada y yo, somos los padres de los nuevos guerreros del Clan del Cuervo.


Sangre de Guerrero ~ Clan del Fuego ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora