Amor de alquiler [H.S]

23

"Relación a distancia"

Heather.

No podía creer que una vez más estábamos pasando por esto. Nuestra relación quebrándose mientras tratábamos de llegar a una conversación justa, donde ambos estuviéramos de acuerdo con la decisión. Sin embargo, ninguno de los dos deseaba terminar, lo que producía que cayéramos en la frustración.

—No sé qué hacer —me dijo a la vez que apoyaba sus manos en la cabeza mientras mantenía los codos en sus rodillas—. Heath... no quiero que pienses que no te quiero conmigo, pero no es así —repitió una vez más.

Lo observé.

—Volveré a Inglaterra como me lo has pedido —encogí mis hombros—. Jeff ya dio su ultimátum. No podemos hacer más que eso.

Harry se colocó de pie. Tomó de mi mano y la colocó sobre su pecho mientras enfocaba su vista en mis ojos.

—Perdón —murmuró.

Bajé mi mano con suavidad para separarme de él. Y, con un gran peso sobre mis hombros, le pregunté de nuevo.

—¿No crees que sea mejor terminar?

Negó.

—Tengamos paciencia. Esto acabará... —me dijo casi con suavidad, esperando a que comprendiera aquello.

—Harry —nombré con cansancio—. Estando en esta situación, no tendremos una relación normal. Realmente creo que es mejor terminar esto... —tragué saliva con dificultad—. Cuando acabe, tal vez podamos volver a intentar.

Lo vi fruncir su ceño.

—¿Tal vez? —interrogó—. ¿No crees que volvamos?

La verdad, dudaba que una tercera vez funcionara lo que fuese que tuviésemos. No era un noviazgo normal, no era algo que yo deseaba. Olivia y Jeff se interponían cada vez que podían y, eso... no funcionaba para mí.

—Bien —sonrió con dolor—. Si es lo que deseas... —dio unos pasos hacia atrás, dirigiéndose a la puerta cerrada de su cuarto. Me dio la espalda quedándose unos segundos en el lugar y, antes de salir, me miró—. Lo has querido así desde hace un tiempo ¿no?, habías querido terminar conmigo en Inglaterra...

Suspiré frustrada. Me causaba dolor ver a Harry de esa manera, pero él no comprendía el mío.

—Tienes un contrato Harry. No podemos estar juntos aunque queramos. Olivia nos jode la vida, y tampoco me crees las cosas que te digo... No son celos —le aclaré al notar como movía su cabeza por lo último dicho.

—¿No lo son? —enarcó una ceja—. Siempre dices algo malo de ella Heather.

—¡Porque no es una santa! —chillé exagerando con mis manos de manera frustrada—. Olivia fue la que me sacó del set de grabación. Tenía un auto listo para mí. Y ella es la que te pide que me vaya de aquí. Jeff solo sigue sus ordenes porque te joderian si no cumples con el contrato.

—Tus celos te están cegando —me dice.

Di un resoplido. Caminé hasta su closet y saqué la maleta que llevaba guardada hace días. Y, al colocarla sobre la cama, Harry se acercó sosteniendo mi antebrazo.

—¿Te irás ahora?

—¡Qué más da! —bufé.

Lo vi fruncir su entrecejo.

—Tenemos un almuerzo con mi madre.