Neon Genesis Evangelion: Redención

Capítulo 3: El nuevo alumno

Acababa de anochecer cuando Misato y Shinji regresaron a su ahora compartido departamento. El viaje fue muy silencioso, Misato no sabía que decirle a su nuevo protegido para mejorar su estado de ánimo. Shinji estaba intranquilo, pensando en qué tanto había creído su padre en sus palabras. No tenía forma de saberlo, puesto que Gendo era más que un experto ocultando sus emociones tras un rostro imperturbable. Tan inmerso estuvo en sus pensamientos que no le tomó el más mínimo cuidado a la forma en la que Misato conducía por la ciudad, aunque por reflejo se había asegurado el cinturón y aferrado lo mejor que podía al asiento.

Trató de sacudir esos pensamientos centrándose en el hecho de que mañana asistiría al Instituto Marduk, y de ese modo podría reencontrarse con sus buenos amigos, Touji y Kensuke. Fue un buen consejo de parte del profesor Yagami el centrarse en cosas positivas para enviar lo malo al fondo de su mente; su viejo yo ya estaría ensimismado con su SDAT mientras veía por la ventana, y posiblemente toda la noche. Debía enfrentar sus problemas, pero también debía darse el tiempo para ser feliz.

Al bajarse del auto, Shinji se notaba más calmado, lo que alegró a Misato, decidiendo evitar todo lo que tuviera que ver con Gendo y NERV por al menos esta noche.

"Oye, Shinji-kun, ¿qué habrá para la cena?"

El castaño se rascó la barbilla mientras pensaba. "Realmente hay muy pocas cosas en el refrigerador. Creo que hay lo suficiente para preparar algunas Gyozas, con suerte y el jamón que vi está en buen estado para usarlo en lugar de carne."

"Eso suena genial, Shinji-kun." Misato tenía problemas para mantener la saliva dentro de su boca. "Mañana por la tarde saldremos a comprar comestibles de calidad, hay que aprovechar la tarjeta de crédito que te dio el comandante."

Shinji estuvo de acuerdo, después de todo, había visto en alguna ocasión una de las facturas por el costo de reparar un EVA, ni en dos vidas podría gastar tanto dinero.

"Espera... demonios, aún sigo de papeleo hasta el cuello." Misato se apretó la cabeza para combatir el dolor de cabeza que comenzaba a sentir.

"Está bien, Misato, buscaré una tienda de comestibles cuando regrese de la escuela."

"¿Escuela? Ah, sí, Ritsuko mencionó algo al respecto, pero no esperaba que fuera tan pronto. ¿Tienes los útiles escolares necesarios?" Misato miró su reloj de pulsera. "¡Mierda, ya es tarde! Todas las tiendas ya están cerradas." Misato revolvió su cabello con fuerza.

"Tranquila, pensé que tendría que asistir a la escuela aquí así que traje los útiles escolares que había comprado antes de que se me pidiera venir, también traje los uniformes." Dijo Shinji, colocando una mano sobre su hombro para detener su frenesí de pánico.

"Bien entonces, no hay problema." Misato agradecía que el sistema educativo de Japón estuviera tan homologado como lo estaba, básicamente uno podía transferirse de escuela sin miedo a tener que gastar en nuevos libros y uniformes. Ahora entendía cómo se sentía su madre cuando le pedía algo tarde por la noche, y no era algo agradable.

Ambos abandonaron el estacionamiento y se dirigieron al apartamento. Shinji se fue a la cocina a preparar la cena, mientras que Misato iba a cambiarse de ropa. La mujer de cabello morado se quedó en la sala, viendo televisión junto a PenPen en lo que Shinji tenía lista la cena. La espera fue una tortura para Misato, quien estaba acostumbrada a tener una «comida completa» en tan solo 5 minutos, pero el olor que venía desde la cocina le decía que el martirio valdría totalmente la pena.

"Está listo." Un instante después de que Shinji la llamara a comer, Misato ya se hallaba sentada en la mesa, con una mirada de anticipación. Shinji puso el plato de Misato frente a ella, teniendo que quitar rápidamente las manos antes de que la hambrienta mujer se las llevara a la boca por error; era como alimentar a una fiera salvaje. Sonrió ligeramente, estaba por sentarse cuando sintió un ligero picoteo en su pierna derecha, se trataba de PenPen. "Cierto, casi me olvido de ti, PenPen." Shinji tomó el pescado que había dejado descongelando junto a la estufa y lo puso sobre la mesa. PenPen se frotó contra su pierna y luego fue a comer.