El sucesor de bandos opuestos

Caída Libre

Narra Izuku

La verdad no sabía que hacer, ahora Tzuyu sabe que pasa y la presidenta Yaoyorozu sigue con sospechas, pensé en descansar ya era noche, Tzuyu se había ido apenas, me sentía ciertamente mejor a como estaba antes pero seguía mal. Me desperté a la hora de siempre y salí a entrenar como siempre, me ayudo un poco a desahogarme pero no era suficiente, necesitaba gritar, golpear algo, ya no estaba tan triste como frustrado pero es curioso el funcionamiento del cerebro humano, sientes algo que no tiene que ver con otra sensación que se puede presentar y ¿qué hace? Pone un catalizador de confusión para combinarlas. Tenía un pequeño tic nervioso en el lado derecho de mi boca, hacía parecer que sonreía, estuve afuera más tiempo de lo normal y estaba cansado pero no paraba, seguía ahí entrenando, luego de que me diera cuenta que faltaba poco para mis clases volví a los dormitorios me vestí, me cepillé los dientes y me fui directo a mi salón, no me detuve a comer pues no tenía hambre, en todo el trayecto estuve viendo hacia abajo, cuándo pasé por la sala común sentí una presencia, de hecho dos, no preste importancia y seguí.
Ya faltaba poco para poder llegar a mi aula de clases, decidí escuchar música hasta que en cerio empezaran las clases, puse aleatorio y sonó.

Todo va estar bien, todo va a estar bien

Todo va a estar bien, todo va a estar bien

Todo va a estar bien, todo va a estar bien

Todo va a estar bien, todo va a estar bien

¿Por qué tendría que preguntarme quién soy?

Después de los treinta parece patético

No me basta cerciorar leyendo la credencial

A esta edad tendría to’ bajo control, mas no

Como confiar en el espejo

Sé lo frágil del cristal, lo fácil que es romperlo

A lo lejos se ve lo cerca que estoy de colapsar

Me esfuerzo en sonreír no se vallan a preocupar

Por mí. No, no, estoy bien gracias

El carrusel no se detiene no le importan tus náuseas

Aprieta el caballo, siéntete afortunado

Hay gente en fila y otra que no juntó ni para su entrada

Un par de nudos en la espalda y fuera escombros

¿Quieres el mundo? No soportas el peso sobre tus hombros

No eres un hombre, eres un niño

Y uno tonto pronto, pronto, afronto, soy solo un estorbo

Otro día que me siento perdido y

Nadie en el mundo lo parece notar

Quisiera saber cual es mi cometido y si

(De casualidad, de casualidad)Hasta me alcance la felicidad