En algún punto el corazón ya no dolía,
y al mirar mis manos
un atisbo de esperanza entreveía,
como una luz al final del túnel
el sentido de la vida tímido sonreía.Había cruzado el desierto,
había navegado los mares,
en la tormenta sospeche ver un muerto,
trozo de infierno creí al condenado.En algún punto se acabó la fe,
me dolía la vida y me ganaba el desdén.Vaya vuelta que dio mi día
sin querer, la suerte entrometida.Cordura discúlpame, te fallé.
Lo inesperado sucedió, y en algún punto...
En algún punto te encontré.