¿Por Qué? Charlastor. Hazbin Hotel.

☾Mi dulce Charlotte☽

- ¡Hola Alastor! ¿Podrías encargarte unas horas del hotel? Me han llamado unos altos cargos del infierno para una reunión de suma importancia para el infierno y por más que quiera no puedo faltar.
- Por su puesto querida, no es ningún problema.
- ¡Muchísimas gracias Al!
- Por cierto, la araña y la polilla te están buscando, tiene problemas o algo así con los demonios de rehabilitación.
- ¿Los nuevos?
- Creo que si.
- Oh mierda... Bueno, muchas gracias igual.
- De nada dulzura.

Vi a Charlie correr hacia las salas de terapia. Esta mujer cada vez me enamora más, y me pone de los nervios no estar cerca de ella. No sé dónde va por las mañanas, y ya estoy cansado. Necesito saber qué es lo que hace. Mandé a una de mis sombras para que siguiera a Charlie. Primero ella estuvo con Ángel Dust y Vaggie ayudándoles con las terapias. Luego se fue a su habitación y no entré. Salió varios minutos después cambiada de ropa. Llevaba puesto un vestido rojo. Después bajó a la recepción y se fue en limusina hacia su palacio. Cuando entró mi sombra quiso seguirla, pero no podía entrar al palacio.

- Malditos campos de fuerza de Lucifer.

Desistí en mi tarea de espiar a mi dulce Charlotte, ha que nadie es capaz de sobrepasar las barreras impuestas por Lucifer. Mi sombra esperó fuera del palacio, varias horas después Charlie salió de su antiguo lugar de residencia acompañada de Harold Von Eldrich. Le abrió la puerta de la limusina y la besó la mano.

- Mañana nos vemos querida.
- Adiós Harold.

A si que era eso... Se iba por las mañanas para estar con Harold Von Eldrich...
Rato después llegó Charlie más feliz que nunca.  Nos reunió a todos el la recepción del hotel.

- ¡CHICOS! ¡¡Mañana por fin os daré la sorpresa!! ¡Estoy súper emocionada!
- ¡Por fin! Rubia creía que todo esto de la sorpresa era una puta farsa.
- Sabes que yo no miento Ángel.
- ¿A no? ¿Y se puede saber que haces en esas reuniones importantes de tus padres?- la pregunté.

Ella me miró aterrada, creo que piensa que descubrí todo.

- Preparo la sorpresa obviamente. Y gracias Alastor, ya has revelado una parte. Si me disculpais, me gustaría hablar contigo a solas Alastor.

Ella con un movimiento ágil tomó mi mano y me llevo a su oficina. Estando allí, tomé asiento y ella cerró la puerta.

- ¿Me has estado espiando? ¿Qué carajos contigo?
- No te he espiado yo.
- ¿A no?
- Solo mandé a mi sombra seguirte, una pena que el campo de fuerza de tu padre sea demasiado potente para ella.

Ella pareció aliviada aunque seguía molesta.

- No sé que carajos pasa contigo y no sé por qué carajos me has querido seguir. Creo que merezco una explicación.
- Me entró curiosidad por lo que hacías y ahora la tengo por verte con Harold Von Eldrich.
- Creo que eso no te incumbe.
- La verdad tienes razón. No se ni si quiera por qué me interesa tu vida. - sonreí más que nunca, aunque por dentro estaba dolido- mis disculpas su majestad por la intromisión.

Ella suspiró pesadamente.

- Mira Al, ni estoy enfadada. Lo que pasa es que no quiero que me digáis, por favor.
- No volverá a pasar.
- ¿Seguro?
- Te doy mi palabra.
- Gracias. Ademas, tampoco vas a tener que esperar tanto, mañana veras la sorpresa. Estoy deseando ver vuestra reacción.
- ¿Nos va ha gustar?
- Eso espero, y yo estoy súper emocionada con eso.

Ella se masajeó las mejillas, acto que me pareció muy adorable por su parte.

- Por cierto, muchas gracias otra vez por cuidar del hotel en mi ausencia.
- No hay de que querida, es todo un placer.

No tuve que esperar mucho para el día siguiente. Por la mañana nos levantamos todos con normalidad, Charlie y yo preparamos nuestro desayuno cantando y bailando esperando a que los demás se levanten. Los chefs preparaban la comida de los huéspedes. Luego desayunamos todos juntos hablando sobre la sorpresa de Charlie. Ella se fue la primera de la cocina y volvió al rato vestida con un vestido negro y dorado, con los bordes rojos.

- Muy guapa Charls, estás muy guapa.
- Gracias Vaggie. Volveré en un rato, ¡¡os quiero a todos!!
- Adiós dulzura.
- Adiós rubia.

Ella se subió en la limusina y se fue al palacio de sus padres.

- Oye, ¿Que creéis que es la sorpresa?
- Yo creo que por fin nos va ha presentar a sus padres o algo así.- dijo la polilla.
- A mi me da igual- comentó Husk.
- ¡Yo creo que va ha traer más invitados! Espero que sean hombres jajajaja.
- Nifty, los modales querida.
- uy qué grosera, lo siento...
- Pues yo creo que la rubia nos va ha presentar al novio.

Me quedé sorprendido ante la opinión del actor porno, pero no me dio tiempo a contestar cuando la demonio polilla de mi derecha contraatacó enseguida.

- No digas gilipolleces Ángel, ella no tiene novio, y no creo que quiera tener nada ahora mismo. Ademas, yo lo hubiera sabido, soy su mejor amiga.
- Oye plana, solo era una idea, a lo mejor nos trae a más bombones. ¿Tú qué crees fresita?
- Creo que deberías ordenar tus prioridades Ángel. Si me disculpais, voy a hacer papeleo.
- Que humos.

Desaparecí de la vista de esos asquerosos pecadores y aparecí en la oficina de Charlie. Me quedé pensando en las palabras de Ángel. No era una idea tan descabellada, pero la descarté rápidamente de mi mente, Charlie iba a ser mia. La quería. Abrí una botella de whisky y me servía un vaso para beber mientras hacia el papeleo esperando la llegada de mi dulce Charlotte.