Yukiko es una de las doce lunas demoniacas servidora de Muzan, ella fue adoptada por aquel demonio cuando era recién una bebé, por lo que ha pasado toda su vida con él y se ha convertido en una demonio fuerte capaz de asesinar pilares.
Tras un pecul...
*Unos minutos antes de que Yukiko volviera a la vida*
Seguí observando el silencioso bosque que se encontraba frente a mí, el aroma de ella comenzó a desvanecerse, pensé que ya se habían alejado lo suficiente.
La lloré en silencio por unos momentos más, finalmente decidí ponerme de pie con la intención de volver a la residencia.
Pero un aroma llegó a mi nariz como un huracan, incrédulo me adentré en el bosque siendo guiado por aquel olor.
— No es posible—susurré entre dientes a medida que sentía más cercano su aroma.
Mis pasos comenzaron a apresurarse, avancé rápido solo haciendo caso a mis sentidos. Mis manos temblaban por la ansiedad, al igual que los latidos de mi corazón, los cuales comenzaron a acelerarse sin control.
Tras haberme profundizado lo suficiente en el oscuro bosque, logré llegar a un camino más estrecho de tierra. Unos metros más allá del mismo camino se desprendía otro que ofrecía un destino distinto.
Sentí unos pasos acercarse, sin dudarlo avancé un poco más curioso de ver a la criatura que estaría pronto a salir de entre los arboles. Allí, su cabello casi plata y largo se movía con el ritmo de sus pasos. Su piel pálida, iluminada por la luna y sus particulares ojos brillantes terminaron por paralizar mis sentidos.
— ¿Yukiko?—susurré con los ojos abiertos a más no poder debido a la imagen tan real que había aparecido en mi camino.
Ella se detuvo a secas apenas escuchó mi voz, nuestras miradas se cruzaron y sin pensarlo más dio un paso retrocediendo.
— ¡No!—dijo alzando sus manos—. Por favor, Tanjirou...Sé que me odias, y lo merezco. Pero, no me mates, al menos no aún.
Estaba mudo, no podía creer lo que mis ojos ven.
— Douma me salvó—murmuró con su rostro tenso—. Ese idiota se sacrificó por mí, asi que por favor, dame una oportunidad para escapar. Después puedes cazarme todo lo que quieras sí eso calma tu sed de venganza, yo realmente entiendo tus sentimientos.
Agaché la mirada para que ella no viera la satisfacción que iluminaba mi rostro al verla viva. Comencé a caminar para acercarme a ella, sentí que daba pasos en falso hacia atras queriendo alejarse aún más de mí. Pero al hacerlo de esa forma, no pudo evitar tropezar y caer de espalda.
— Maldición—murmuró entre dientes—, aún estoy débil.
Lo que sea que haya hecho Douma para salvarla ha sido una total sorpresa. Seguí avanzando hasta llegar a su lado, me detuve a secas aún sin dejarle ver mi rostro.
Yukiko
¿Qué más podría hacer o decir?, al parecer la vida quería desde un principio que esta noche fuese la última de todas para mí.
— Tanjirou—susurré ahogando un grito—, lo siento mucho.
Vi sus manos extenderse hacía mí, me matará no tengo dudas de eso. Cerré mis ojos con fuerza para luego apartar el rostro. Me estrangulara; estoy segura.
Pero, ante todo pronostico lo que llegó a mí fueron sus brazos rodeando mi cuerpo. Escondió su rostro en mi cuello, pude sentir sus lágrimas bajar por mi piel.
— Tuve miedo—susurró con la voz quebrada—, cuando te vi desvanecer mi mundo se vino abajo por completo...le pedí a Douma que te sacara de allí, los otros pilares querían acabar con mi vida por haberlos dejado escapar. Pero, Oyakata-sama salió en mi ayuda. Él ya sabía de tu existencia y aún así te dejó estar con nosotros...por eso, yo no tengo nada que perdonarte, Yukiko. Cargas con tus pecados y eso es algo que nadie puede cambiar, ni siquiera yo..,pero te ayudaré a cargar con ellos. Es algo que quiero hacer, puedo hacer cualquier cosa, soportar lo que sea sí es mientras que esté a tu lado.
Mis mejillas se ruborizaron por sus palabras, estaba tan feliz que mis ojos se cristalizaron sin demora. Ahogué el llanto para corresponder a su abrazo, sentir la calidez de su cuerpo en comparación al frío del mío es una sensación tan nueva como ideal.
Nos quedamos allí en silencio disfrutando de nuestro encuentro por unos minutos más, mi cuerpo se negaba a soltarlo aunque mi sentido aún alerta gritaba que siguiera huyendo, pues con Tanjirou a mi lado me siento segura, en paz..,en casa.
— Yukiko, no puedes volver a la residencia. Al menos no por ahora—dijo ya una vez más calmado—. El ambiente allí no está del todo bien, y sí los pilares te ven por ese lugar lo más seguro es que quieran asesinarte.
— No los culpo—respondí despacio.
Él separó nuestro abrazo para mirarme de frente, nunca podría olvidar el calor que siente mi pecho al sumergirse en esos ojos color rojo oscuro, una sonrisa suave se dibujó en sus finos labios.
— Ellos no saben lo que se pierden—dijo acariciando mi rostro con suavidad—. Estoy seguro que sí te conocieran podrían entender mejor todo. Pero por ahora, tengo un plan.
Observé curiosa su rostro entusiasmado, él comenzaba a volver a ser aquel chico radiante de cabello rojo.
— Nos escaparemos—sentenció.
— ¿Así de fácil?—murmuré—, ¿qué sucederá con tu vida de cazador cuando se enteren que escapaste conmigo?.
Él sonrió con aún más entusiasmo, su natural optimismo comenzaba a llegar incluso a mi inquieto corazón.
— Antes de irnos hablaré con Oyakata-sama para que entienda mi ausencia—susurró—. Estoy seguro de que querrá ayudarnos. Sé que Nezuko no reacciona bien cuando estás cerca, asi que podría decirle a Zenitsu que cuide de ella mientras estemos escondidos. Mi plan es que podemos demostrarles a los pilares que tú mereces una oportunidad, que puedes iniciar una nueva vida lejos de Muzan.
Es un plan bastante sencillo, pero sus ojos brillantes y su sonrisa contagiosa terminaron por convencerme.
— Está bien—dije imitando su sonrisa—, es un buen plan.
Él sonrió con aún más ganas, sus mejillas se sonrojaron suave cuando lo observé con ternura.
Poco a poco su sonrisa fue desapareciendo, sus ojos clavados en los míos comenzaron a bajar para dar a parar sobre mis labios. No pude evitar sentirme nerviosa por la forma en que me observaba. Su cuerpo se acercaba despacio al mío, nuestras respiraciones se empezaban a mezclar, sentía mi pecho llenarse de un calor extraño y nuevo en mí.
— No me dejes—susurré sobre sus labios.
— Nunca—respondió para luego cerrar sus ojos despacio. Imité su acción y tras ello, nuestras bocas se encontraron deseosas de compartir nuestros sentimientos a través de un beso dulce y cálido.
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¡Habemus capitulus!
Espero lo hayan disfrutado♡ amé muchito como quedó ese beso entre ambos, era justo y necesario.
Además, quiero dejarlos a todos muy invitados a que lean mis nuevos fanfics;
- "Sumergidos" de Douma finalmente vio la luz *.* yyyyy....!!!
¡Sorpresa!
Tengo un libro de one-shots con personajes de KnY♡.
Asi que, espero puedan ir a leer cuando quieran *-*♡
