23 años después de los sucesos de su adolescencia, nuestros jóvenes basquetbolistas se han convertido en todos unos adultos, quienes han formado sus propias familias con todo e hijos, llevando una vida de lo mas plena y feliz, teniendo las típicas v...
- Nosotros los dejamos -caminaba hacia sus padres yendo tras sus hermanos, volteándose a ver al escenario- Pero están en buenas manos
- Ahora nos toca cierto? -entro en escena un peliazul hablando con desinterés moviendo a la vez los hombros-
- Anímate un poco más -apareció tras suyo otro peliazul dándole un golpe suave en la espalda-
- Chicos esperenme! -tras ellos llego un castaño quien hacia un puchero algo molesto-
El trio de jóvenes camino hasta donde estaban sus padres abrazándolos con emoción, desde todos los ángulos se podía ver lo feliz que estaba, por otro lado 3 jóvenes con apariencia singular se centraban en el escenario llamando la atención de todos.
Con solo aparecer, todo el sitio se sumió en un silencio a su vez que todos dirigían su mirada hacia cierto personaje, del que no tenían duda alguna, que tenía que ver con los chicos del escenario, muchos estaban incrédulos sobre la situación.
- Espera -se quedó mirando incrédulo, mirando a su amigo y aquellos chicos, riendo burlonamente- Son tus hijos, Ahomine!
- No hay duda son tus hijos -alzo la ceja hacia su ex-compañero, moviendo la cabeza ante lo dicho por el pelirrojo suspirando- Idénticos a ti, Aomine
- Bájenle a su alboroto -comento con desinterés el peliazul haciendo una mueca por el escándalo frente suyo- No es para tanto
- Ah?! Que es esto?! -incrédulo miraba hacia el escenario sin poder creer lo que estaba viendo y oyendo- Padre yo!?
- Aniki, esto es una gran noticia -paso su brazo por los hombros de su hermano mayor sonriendo-
- Chicos! -reprocho un castaño a su lado para voltearse hacia los demás inclinando en disculpa la cabeza- Disculpen a los tontos de mis hermanos
- Esto debe ser una maldita broma no?! -se encontraba exaltado, se levantó de su lugar señalando a sus hijos riendo con sarcasmo- Yo no puedo ser padre
- A-aomine-san... Por favor tranquilícese -miro al mencionado con una expresión de miedo en su rostro jalando de su brazo- N-no puedes negar... Son idénticos a ti....
- Viejo por favor! -rodo los ojos con fastidio, al ver como se ponía su padre, llevando su mano a la cintura- Tu mismo lo estás viendo
- No mentimos -contesto sin más moviendo los hombros, sonriendo de manera confiada al lado de su hermano- Somos tus hijos
- No puede ser! -volvió a negar sin tragarse aquello, aunque viendo con más atención, se sentía derrotado a la vez que un extraño sentimiento lo invadía- No es cierto...
- Sin duda no mienten... Aomine-san -se mordió el labio bajando la mirada apretando su agarre al contrario- Realmente son tus hijos
- No puedes seguir negando la verdad -negó con la cabeza dando un paso más al frente- Y te lo demostraremos viejo
- Tendrás que escucharnos -apoyo al peliazul dándole un suave golpe en la espalda dándole un empujón- Hazlo aniki
- Ah?! Y que van a decir? Solo se parecen a mí -frunció los labios en una mueca mirando de reojo al castaño, suspirando- Tengo de otra?
- Bien, comienzo yo -sonrió con confianza dando un paso más al frente- Me llamo Takeshi y tengo 17 años! Soy el mejor en baloncesto y nadie me gana -alzo la mano en puño con orgullo- Nadie puede con mis tiros
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
