Respuesta II

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En el capítulo anterior...

-Yo te puedo ayudar a hacerlo Prusia.- El rostro de sorpresa no se hizo esperar e Imperio Español continuó con su plan que sabía que sería el mejor. -Viaja conmigo, conquistemos tierras y vuélvete fuerte para destruir a SIRG-

En el capítulo actual:

Las palabras que le había dicho el español quedaron grabadas en su mente como si tuviera a alguien que las repitiera constantemente.

Levantó la mirada desorientado para solo encontrarse con la sonrisa del Imperio Español que al ver que no tenía una respuesta tan solo negó con su cabeza.

-Vuestra decisión es solamente suya pero le he de recordar que vos puede realizar mejores acciones que sus hermanos. Prusia, es alguien que tiene valor y eso, es muy importante para las campañas militares.-

Una de las mejores virtudes -si se le podía llamar asi- del Imperio Español era su excelente labia. Su impresionante manera de hablar que en la mayoría de veces lograba convencer a sus compañeros e incluso adversarios.

Sus palabras ingresaban a la mente y sobretodo corazón de la persona. En cualquiera de los dos, como un extraño veneno comenzaba a expandirse lenta y sutilmente en donde el mismo verdugo volvía a abrir su boca para adelantar los efectos.

-Por ejemplo, no sabes lo mucho que desearía que fueras mi hijo. A España solo le importa vivir una vida de lujos y conocimiento, fuera de la misma realidad que se nos presenta.-

Tal como lo hacía con el fuerte pero a su vez, lamentable e ingenuo Prusia.

-Sea cual sea vuestra decisión tendrá que ser rápida. En una semana partimos de Sevilla, España hacía Madeira, Portugal.- Ante sus propias palabras el español frunció su ceño. -Coño tío, en realidad lo mejor sería partir por Cabo de San Vicente pero el gilipollas de Francia me está jodiendo los cojones.- El pobre alemán cuyo español era neutro solo miró a su contrario con extrañeza logrando que este soltara una risa.

-Bueno Prusia. Como le dije, falta poco para partir y si vos deseais ser mejor de lo que ya es unirse a nosotros pero si no es asi.- Dándose una vuelta para posteriormente dar el primer paso sonrío ante lo que sabía iba a venir.

-¡Iré!-

((¡JA! Que fácil)) Fue su primer pensamiento para extender su mano hacia el estado de uno de sus amigos-enemigos -Entonces Prusia, ¿tenemos un trato?

Y de esa manera, aquel veneno cargado de mentiras y verdades terminó por vencer a su víctima y darle un sueño que parecía hermoso pero a la vez, sin conocimiento de su infectado, casi imposible de realizarse.

-Trato-

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<<~[Sanlúcar de Barrameda, Sevilla España 30 de mayo de 1498]~>>

No sabía cuántas veces había suspirado, bebido agua y limpiado la cara pero lo que si sabía es que se estaba muriendo por el calor.

Le era sorprendente el como el clima cambiaba en cada dirección. En su tierra existía el calor pero no tanto como lo era en España.

Tocandose la cabeza debido a lo que parecía ser un golpe de calor observó a Imperio Español junto a un joven de su edad, unos aproximadamente 18 años. Este, a diferencia de su padre - que solo llevaba un pantalón doblado a las rodillas, una camisa blanca mal abotonada y un gran pañuelo rojo en la cabeza- llevaba una gran corona de oro, cubierta de exuberantes perlas y diamantes. Prusia ante ello levantó la mirada a su propia corona, una  pequeña de oro que solo llevaba rubíes a su alrededor.

De igual forma siguió observando al muchacho. Por obviedad, claramente, la corona de su propia persona, era la mejor.

Como iba describiendo el alemán, el muchacho aparte de llevar la corona portaba un cetro de oro mientras que su vestimenta era la típica de la época que a su parecer era la más fea que existía. Irónico ya que el llevaba una casi parecida salvo que a diferencia suya, el español menor poseía una capa dorada y a su vez roja.

Iba a seguir observando si no fuera porque el español le vio y levantó la mano a su saludo. Ante ello, no le quedó mas opción que ir.

-Guten tag- Saludó cordialmente a los dos para solo ver como su contemporáneo se marchaba sin devolverle el habla. Sin duda, un golpe más para el orgullo del germánico.

-¿Vos se acordais cuando dije que lo quería como hijo?- Imperio Español preguntó y al ver el asentimiento de cabeza continuó. -Pues ahora vuestros ojos veis el porqué-

Aquello fue un momento realmente incómodo para los dos. Hubieran seguido mirándose si no fuera porque uno de los humanos que los acompañaría en los viajes se acercó a ellos para hablar.

-Vuestra excelencia, el señor Colón dice que ya es hora de partir- El hombre observó al de cabello plateado junto a su señor y con todo el respeto de presentó. -Saludos a vuestra excelencia, mi nombre es Pedro Alonso Niño y ayudo en la navegación de la Santa María- Señaló con orgullo a la nao ubicada ya en aguas lista para zarpar.

El alemán asintió ante aquellas palabras y luego de ello, siguió en silencio al español que lo dejó subir a uno de los barcos en donde fue testigo de como el Imperio Hispano se abrazaba con un hombre un poco mayor.

-Colón- Así se llamaba aquel hombre. -Te presento a Prusia, es hijo de Sacro Imperio- Los ojos del humano se abrieron y como si no existiera el tal Prusia le preguntó a su señor si el SIRG no se molestaría en llevar a uno de sus hijos a tierras pocos navegables y con riesgo claro de muerte.

El hijo del nombrado Imperio no tardó en responder.

-Mein Vater kennt meine Reise perfekt und ich wünsche mir auch eine glückliche Rückkehr (Mi padre conoce perfectamente mi viaje y también me deseo un feliz regreso)-

Y aunque la respuesta fuera, quizás, un poco extraña, eso no quería decir que no fuera cierta.

Aquel mismo día que había hecho el trato con el hispano, cuando este se fue, le había dicho a su padre que viajaría con España en su próximo viaje.

Sin dudarlo, los gritos por parte del SIRG no tardaron obligando a que el prusiano no pudiera controlar su ira y sabiendo que ya estaba a punto de golpear a su padre no pensó que un austriaco saltaría en su defensa.

-Vater, Preußen hat recht, und bevor Sie mich um Schweigen bitten, denken Sie bitte über den großen Nutzen nach, den Sie erhalten, wenn einer von uns mit dem spanischen Reich reist. Sie werden in der Lage sein, die hispanischen Militärtechniken und -taktiken kennenzulernen, und die Erweiterung wird nicht mehr nur ein einfacher Traum sein. (Padre, Prusia tiene razón y antes de que me pida silencio por favor  piense en el gran beneficio que obtendrá si alguno de nosotros viaja con el Imperio español. Podrá conocer las técnicas y tácticas militares del hispano y la expansión ya no solo será un simple sueño.)-

Sin darse tiempo a un respiro, su hermano más odiado le había ayudado a recibir el permiso y al mismo tiempo, bendición de su padre.

Una sonrisa fue capaz de mostrar ante ese recuerdo y una risa se escapó de sus labios ante otro dado a que antes de partir tuvo que despedirse de sus hermanos y Austria, le había dicho que no lo tomará como ayuda sino como una táctica de su parte para no verlo nuevamente vivo.

Si, Austria era un hijo de puta.

-Ey chaval, estamos listos para partir- Imperio Español le quitó de sus pensamientos para solo observar el cielo despejado. El mediodía mostraba el máximo esplendor del sol pero ya no le importaba quemarse.

Tierra Nueva, la gran Prusia, ahí iba.

To be continued ===>

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