—¿Sabes lo que realmente significaría vivir juntos?– cuestionó Jihoon
—Poder verte todo el día, pasar los fines de semana juntos, desvelarnos contando nuestros planes a futuro
—¿Realmente quieres vivir conmigo? Porque después no te puedes arrepentir– Soonyoung sonrió mientras abrazaba al más bajito–
—Se que es la mejor decisión que puedo estar tomando, no quiero compartir esto con nadie más, solo quiero que seamos nosotros
—¿Estoy soñando?– Soonyoung se imaginaba que Jihoon estaba sonriendo– yo solo había pedido un cambio en mi vida y llegaste tú, que eres lo mejor que he tenido
—No puedo esperar para empezar a vivir aquí contigo– él más alto se separó para ver a Jihoon– será el verdadero inicio de nuestro amor
Jihoon observó una vez más el lugar, realmente esperaba vivir mucho tiempo ahí, quizás se estaba adelantando mucho a los hechos pero quería poder vivir hasta ser viejito con Soonyoung porque sabía que nunca más encontraría a alguien como él.
—Debemos irnos o no llegaremos a tiempo a la fiesta
—Soonyoung– Jihoon sostuvo su mano– te amo
Soonyoung sonrió, conocía cómo era la personalidad de Jihoon y sabía que no era de los que demostraba o decía fácilmente lo que sentía y que le estuviera diciendo aquello le hacía enamorarse más.
—Yo también Hoonie, por ti puedo decir que la vida es hermosa– él le dio un pequeño beso en la frente– y todo se vuelve mejor con solo verte sonreír
Después de ese pequeño momento para expresar lo que sentían salieron de su futura casa, aún tenían que llegar a la casa de Jihoon para que este pudiera cambiarse e ir a la fiesta que Seungcheol había organizado.
—¿Le puedo presumir esto a Seungcheol?–pregunto Jihoon mientras sonreía– verá que realmente somos mejores que él y Jeonghan
—Le puedes decir a quien tú quieras Hoonie, puedes hasta gritarlo si deseas, todo con tal de que pueda seguir viendo tu sonrisa
—Tu eres el dueño de esta sonrisa– dijo Jihoon algo a penado–
Durante el camino hacia la casa de Jihoon, ellos hablaron sobre todo lo que tendrían que comprar para la casa, decidían si pintarían las paredes ellos mismos y dejarían que profesionales lo hicieran, se sentía la emoción por aquella etapa de sus vidas que pronto empezaría.
