-Narra Paula-
Estábamos terminando de desayunar viendo la televisión. Nadie hablaba, quizás no haya ningún tema que tratar, o simplemente las noticias eran buenas.
-Bueno -dijo Leeteuk, levantándose y recogiendo los platos- voy a ducharme.
Se dirigió a la cocina y dejó los platos, para después entrar en una habitación, no muy lejos del salón donde estabamos nosotros.
Sungmin miró a Donghae fijamente, hasta que él se dió cuenta.
-¿Qué? -preguntó- deja de mirarme así.
Sungmin acercó poco a poco una mano a su mejilla, hasta llenarla de mermelada de fresa y comenzó a reír.
-¡Oye! -se quejó Donghae.
Donghae planeó su venganza, llenando la frente de Sungmin.
-Dejad de jugar con la comida -se quejó Eunhyuk, todos reímos.
-No te pongas celoso -se burló Donghae- a ti también, mira.
Repitió el proceso de llenarle la frente, esta vez a Eunhyuk.
Cris suspiró y agarró un pañuelo, para empezar a limpiar la mermelada en la cara de Donghae.
-Hyukie tiene razón, no juguéis más -se quejó ella.
Todos la miramos riendo. Fuimos interrumpidos por el sonido de un pomo, todos nos dimos la vuelta para ver de que se trataba.
Vimos a Leeteuk saliendo del baño, en ropa interior blanca, mientras se secaba el pelo con una pequeña toalla. Todos le miramos boquiabiertos, al ver como las gotas de agua caían aún por sus perfectos abdominales.
-¡Hyung! -reaccionó Kyuhyun- ¡Hay chicas en casa!
-¿Y qué? -se defendió él- no estoy desnudo, ¿no?
-Pero Leeteuk -me quejé, a la vez que me sonrojaba un poco- ¡vístete!
-¿Por qué te sonrojas? -reía- si ya me has visto así.
Me tapé la cara con las manos, avergonzada.
-Park Jung-soo, ¡ve a vestirte! -le ordenó Eunhyuk.
-Pensaba que yo era el mayor -contestó.
Leeteuk cogió la toalla y se fue a su habitación sonriente.
...
Unls minutos después, Leeteuk volvió, vestido con una camiseta blanca y vaqueros negros. Nadie salvo yo parecía haberse dado cuenta, ya que los demás estaban hablando sobre un programa de televisión.
Se acercó a mí para darme un abrazo, yo me aparté. ¿Cómo podía haberme dicho eso antes? Que vergüenza...
-¿Estás enfadada conmigo? -me susurró, yo asentí, mientras él empezaba a reír- ¿Segura?
Leeteuk acarició mi espalda, bajando lentamente hacia mis muslos.
Yo arqueé un poco la espalda, intentando evitar su tacto, pero me abrazó, haciendo imposible que me apartara de él.
-Hm... no quiero que estes enfadada conmigo... -admitió- perdóname -siguió diciendo, mientras plantaba suaves besos en mi cuello.
-Para Leeteuk -susurré- estan todos delante...
-¿Acaso es un problema? -rió bajo, yo lo miré y asentí.
-¡¡Ah, no!! -gritó Kyuhyun, sacandonos de la burbuja que habíamos creado- ¡Hyung socorro!
