¿superpoder? Alterar Mi Corazón || TUA (Cinco Y Tú)

42 || CAPÍTULO CUARENTA Y DOS

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Cambios

Parte 2
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Narradora

Diego llevó a ____ a su habitación para que descansará, era esencial que recuperará energías. La colocó sobre la cama con mucho cuidado y delicadeza para no lastimar su reciente herida, mientras Cinco toma lugar a su lado tomando su mano y acariciando esta, viéndola con tristeza. Se supone que viaja en el tiempo y no pudo evitar que eso pasara.

Diego se apoyó en el marco de la puerta con los brazos cruzados sin decir nada y solo observando la desesperación interna que Cinco estaba pasando.

Las horas pasaron y Cinco se quedó dormido también, el fin del mundo agota a cualquiera y el castaño no era la excepción, y aun más cuando el había hecho la mayor parte del trabajo solo y sin ayuda de sus hermanos.

Aunque en parte fue su culpa, por no pedir ayuda, cuando obviamente era necesario. Una sola persona no podía detener un inminente fin.

Diego llevo a dormir a Cinco a su habitación, el también debía entender que ____ necesitaba tiempo a solas, para descansar y así poder contarle lo que paso en la cabaña con Vanya.

A la mañana ____ despertó como lo haría cualquier día pero únicamente que Diego la había estado cuidando, incluso le había llevado el desayuno a la cama y cambiado sus vendajes por unos nuevos.

—¿Te sientes mejor? —Preguntó, poniendo una bandeja con una taza de café caliente.

—Sí, eso supongo, duele, pero ya no tanto —Informó, soplando un poco el café para luego llevar la taza a la comisura de sus labios y sorber un poco del líquido.

—¿Quieres hablar sobre lo qué pasó? Se que apreciabas mucho a Vanya... ¿Qué les hizo?

—Es complicado de explicar —Suspiró dejando de lado la taza de café.

Dirigió la vista sus manos al mismo tiempo recordando lo que paso hace solo unas horas. Vanya no era Vanya, pero ____ tampoco era ____, su cuerpo se lleno de sensaciones extrañas cuando estaba en la cabaña.

—Te diría que tienes tiempo para explicarme... pero no es así —dijo mientras se levantaba de donde estaba—. Por cierto ve a ver a Luther, también estaba preocupado.

—Claro... —Asintió ___ —. Ah, ¿Él...? Cinco...

—Despertó hace un buen rato. Debe estar abajo —Dijo Diego.

Luego de que saliera, ____ se puso el uniforme que Diego le había dejado al lado, no le gustaban las pijamas blancas, y tampoco el uniforme, pero no tenía ropa y esa era su única opción. Salió de la habitación y se dirigió a la enfermería.

Abrió la puerta con cautela, aunque Luther noto esto al instante, volteando a ver a su hermana quien le sonreía.

—¡____! ¿estás bien? —Preguntó poniéndose de pie —. ¡Siéntate! así no mejorarás rápido —Regañó, ganándose unas risillas por parte de ____.

—Gracias por preocuparte por mí.

Luther asintió. Se sentía mal por haberse paralizado de un momento a otro, para él, ofrecerle lugar a ___ era lo mínimo que podía hacer.

Fue por un banco para que ____ tomara asiento junto a él. Debían hablar, si quiera era una opción el no hacerlo, pero también comprendía la preocupación por la que ____ estaba pasando al ver Allison de esa manera.