Esta noche viajariamos
Entré a la oficina de mi tío Adonis y le toqué el hombro
-Tío-levantó la cabeza de la mesa y se pasó las manos por los ojos
-¿Qué hora es?-preguntó
-Las dos de la tarde-bufó
-Vete-negué
-¿Estuviste fumando?-negó-¿Estás drogado, cierto?-no dijo nada-Vete a dar una ducha apestas. Tenemos una idea de donde puede estar Nes-tosió y tiró del cuello de mi remera
-¿Dónde?-me solté y retrocedí un paso
-Duchate y arréglate primero ¿Crees que Nes querría verte así?-no dijo nada
-Dime donde está-pidió
-No, te espero a bajo. Y si no bajas te haré bajar a rastras-lo amenacé
-Como si pudieras-murmuró
-En tu desastroso estado si que puedo
Se levantó del sillón y caminó hacia la puerta
-Apenas puedes caminar-me mostró su dedo medio y salió como un zombie
-¡Papi!-salí de la oficina y Jacobo y Princesa estaban abrazando a su padre
-Hola hijos-besó la frente de ambos y volvió a abrazarlos-Vayan con su hermano, yo ya bajo-asintieron y corrieron hacia mí
Tomé las manitos de mis hermanos y los tres bajamos las escaleras
Media hora después Adonis todavía no había bajado y ya casi era la hora
-¡Tío!-grité por tercera vez
Miré a mí papá y él volvió a rodar los ojos como la última vez
Reí por su gesto y subí los escalones hasta llegar a la habitación de mi tío. Entré sin tocar y me quedé parado en el marco de la puerta sin saber que hacer ni decír
-¿Por qué estás vestido así?-parecía que se iba a volver a casar, hasta traje y corbata tenía puesta
-Voy a reenamorar a Amnesia cueste lo que cueste-sonreí al saber que no se iba a rendír tan fácil pero también reí porque no estaba vestido acorde a la situación
-Vamos a Brasil, el viaje dura horas y talvez nos maten, así que cámbiate, si estás muerto no la podrás reenamorar-bufó. Se quitó la corbata y la arrojó sobre la cama
-Usé gel al maldito cohete-reí y salí de allí
A los cinco minutos bajó con su típica ropa de jeans y chaqueta de cuero
-¿Vamos?-preguntó y negué
-Falta alguien-les dije
Se miraron entre ellos sin entender
-Junior ¿Dónde la quieres?-sonreí y miré a mi familia que me miraron como si estuviera loco
-Al coche. Tú y los demás guardias irán con ella-asintió y se retiró llevándose consigo a una Irina medio desmayada medio drogada
-¿Por qué ella irá con nosotros?-preguntó mi tío Xavier
Sonreí
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Junior
ContoNo está de más decír que soy el príncipe de la casa Pero a diferencia de los príncipes de las películas, yo soy pura ternura. Soy todo un encantador, en especial a la hora de conquistar chicas y amenazar con quitar algún órgano si te metes con mi ma...