KHAILBAH: Tierra de la Ilusión

CAPITULO I: Origen

Año 584, Zuctra 16, Seunim.

Siempre escuchaba las historias de mi abuelo cuando era pequeño, de aquellas batallas épicas donde el bien triunfaba sobre el mal y donde todas tenían un final feliz, pero en la realidad nada de eso existe, somos dominados por criaturas feroces y despiadadas que acaban con todo a su paso.  Estas criaturas son los Baggerls, una de las tres grandes razas junto con los Tehxos y los Humanos, mientras que los Liptus, Lefkans, Quilkurs y nosotros los Hyukals somos las razas inferiores, pisoteadas y humilladas por estas desde tiempos inmemorables.  Con la Batalla de Kessam (Batalla de los Poderosos) fuimos obligados a pelear unos contra otros apoyando a uno u otro bando, siendo mutilados y aniquilados sin piedad alguna, pero ellos seguían luchando sin importar lo que nos pasara a nosotros. Luego de dos años de continuas batallas, los Baggerls se alzaron con la victoria.  Los Humanos y los Tehxos, ya en la miseria absoluta fueron sometidos por estos, al igual que el resto de nosotros.

Hoy, doscientos años después de dicha batalla, todavía se pueden escuchar los estrepitosos gritos de dolor y piedad de nuestros antepasados, nuestra vida se reduce a lo que el desierto nos pueda brindar y esperando que nos alcance para seguir sobreviviendo.  El odio entre Baggerls, Tehxos y Humanos parece de nunca acabar, y los perjudicados por eso somos nosotros, "La Juu'dre", que tenemos que recibir el constante atropello y desprecio de estos, ¿es que acaso nunca habrá paz en Khailbah?  Pareciera ser que la única manera posible de acabar con esto es derrocando a los Baggerls del poder, pero ¿existe esa posibilidad?, yo creo que sí. Según la historia estas "Razas Superiores" se enfrentaron entre ellas por la ambición y deseo incontrolable de dominar los territorios del otro.  El ambiente era tenso, y a la más mínima provocación de uno o de otro, desencadenaría lo que tanto se había temido, la guerra.  Aun sabiendo que cualquiera de ellos podía ganar, se desató de todas formas, sin importarles las repercusiones que traería a futuro. ¿Pero qué pasaría si los Humanos y Tehxos unieran sus fuerzas junto con las demás razas?, ¿sería posible destronar a los Baggerls definitivamente del poder?  Si bien, todo esto suena bastante lógico, la verdad es que no lo es tanto, como dije antes, las grandes razas se odian y dudo mucho que los Humanos y los Tehxos se alíen, y mucho menos que se alíen con "La Juu'dre"; aunque cabe la posibilidad, es que con tal de acabar con esta miserable vida que llevamos, todo es posible.  Es cierto, para lograr esto se necesitaría solo la voluntad de luchar otra vez, pero también es cierto que se derramaría sangre nuevamente, y por mucho que ahora el motivo fuera diferente, la verdad, es que ya no se quiere volver a perder más vidas.

Durante un par de años, le estuve dando vueltas a esta hipotética situación, y por más que lo pienso, siempre llego a la misma conclusión, Nadie da el primer paso.  Y es que quizás nadie en Khailbah piensa esto, después de tantos años viviendo así, no tendría sentido hacer algo al respecto a estas alturas, pero si existe una mínima posibilidad de llevar a cabo este escenario, me gustaría intentarlo.  Con el paso del tiempo mis ganas de querer hacerlo fueron incrementando, tanto así que era en lo único en lo que podía pensar, volviéndose algo más que un simple sueño, si no que una ideología.

Esto me llevó a pensar en abandonar Barckat (Nación de los Hyukals) para buscar suerte en Saphiran y sus alrededores, ya que, necesitaba a criaturas que pensaran igual que yo, criaturas sin miedo a luchar contra la tiranía Baggerl y hasta perder la vida si fuese necesario para defender lo que por naturaleza es nuestro.  Pero esas criaturas no las encontraría aquí, no, solo estoy rodeado de un montón de cobardes sin iniciativa, sin determinación y por sobretodo, sin alma.

Bueno, tampoco es que sean tan así, después de todo han sido muy buenos conmigo y con mi madre, nos ayudan así como nosotros los ayudamos a ellos, es casi como si todos fuéramos una sola gran familia, pero toda esta comunión pasa a segundo plano cuando llegan los Baggerls, es en ese momento que aflora todo el egoísmo e instinto de supervivencia que llevan dentro y no importa quien sea, le pasan por encima y huyen, facilitándole la tarea a estas bestias que solo vienen a dos cosas: saquearnos las provisiones que con mucho esfuerzo conseguimos y llevarse a uno de los adultos-jóvenes hombres de la aldea.