ESPECIAL BOUNPREM

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Boun había iniciado su práctica en el hospital, era su primer día fue con varios compañeros a la cafetería a la hora del almuerzo, el chico que lo atendió lo dejó cautivado. Pelo negro esponjosos y unos cachetes redondos Boun no pudo evitar sonreír y morder su labio interior mientras lo miraba con mucha picardía.

El otro chico no pudo evitar sonrojarse se puso muy nervioso, así que el café que le iba a pasar a Boun rebozo el vaso haciendo que el líquido lo quemara.

Boun vio lo que ocurrió y se ofreció a ayudarlo, pidió un botiquín de primeros auxilios y fueron a la parte de atrás de la cafetería.

- Bien gordito no te va a doler es solo yodo. - Aclaró el rubio.

- No me llamo gordito, no me digas así. Replicó el pelinegro haciendo un pequeño puchero.

Esto hizo que Boun se riera con mucha picardía, algo había en su sonrisa que la hacía ver malditamente sexi.

- Entonces dime ¿ cómo te llamas? Gordito.

El otro rodó los ojos - Prem, Prem Warut es mi nombre así que no me vuelvas a decir gordito.

- Mucho gusto gordito mi nombre es Boun Noppanut. Dijo con una amplia sonrisa.

Prem también sonrió no pudo evitarlo pues ver a Boun sonreír era contagioso.

Una semana después Boun le pidió una cita a prem. Quedaron de acuerdo en que en el día libre de prem, Boun hablaría con uno de sus compañeros para que lo cubra en el hospital.

En el restaurante, Boun y prem se contaron parte de sus vidas. Prem era un estudiante de economía y trabajaba medio tiempo para mantenerse, pues a pesar de que tenía una beca y vivía en un condominio de la universidad, la vida en Bangkok era muy costosa.

Boun era un estudiante de medicina que iba a especializarse en Ginecología Obstetricia con una maestría en donceles. Aún le quedaba mucho camino por recorrer, sus padres le cubrían todos los gastos pues su hijo le juró a su hermano muerto que iba a estudiar eso para ayudar a los donceles, algo que su hermano no encontró.

- ¿ por qué te quieres especializar en donceles?

- Mi hermano mayor era un doncel y murió en el parto, no son muchos los doctores que saben especializarse en el tema y yo le juré a mi hermano que yo lo haría.

- Yo lamento mucho lo de tu hermano Boun, no quería recordarte eso.

- No te preocupes gordito, a mi no me duele recordar a mi hermano, es lo que me hace seguir cada día hasta cumplir mi propósito. Pero no solo por eso estudio, si no también que es fascinante que un hombre pueda dar vida de esa manera.

Escuchar a Boun hablar así y ver como le brillan los ojos cuando lo hace, logró que el corazón de Prem se sintiera más enamorado.

- Me alegra que pienses así de los donceles, algunas personas nos ven como algo raro.

- ¿ Nos ven? Dijo Boun abriendo sus ojos como plato. -¿ eres un doncel Prem?

- Si. Solo eso dijo bajando la cabeza.

Boun lo agarró de su barbilla para que lo mirara. - No solo eres un doncel eres uno muy hermoso. Dijo y Prem sonrió.

Siguieron saliendo en muchas citas, luego de un mes Boun le pidió a Prem que fuera su novio. Este aceptó, no podía seguir negando que le gustaba el pelirubio.

Llegó el fin de semana y Boun le pidió a Prem que se quedara en su departamento, no quería que su gordito se quedara solo en el condominio, pues la mayoría de los estudiantes pasaban los fines de semana fuera.

Obsesionado con mi ídolo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora