capitulo 4

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 Correspondo a su abrazó y me sostengo fuertemente a su cuerpo, es un abrazo cálido. Y siento mis mejillas arder. Naruto dibuja una sonrisa en su rostro, y se le escapa una risita.  Me alejó cuando un escalofrío recorre mi cuerpo, y me hace recordar la actitud de Sasuke estos últimos días… 

Naruto se pasa una mano por su cabello alborotado, y ahora mete su mano derecha en su chaqueta de mezclilla. Y saca una pequeña cajita, color perla. 

Me extiende la mano para entregarmela.— Espero te guste Hinata. Cuando la ví, solo pude pensar en tí.— vuelve a sonreír, de esa manera. En la que solo él puede hacer latir mi corazón. 

Me sonrojó.— ¡Muchas gracias, Naruto!.— Con mis manos temblorosas, abro la cajita… está divina, es una fina cadenita, con un dije en forma de espiral, su color es rojo.— me vuelvo a sonrojar. Y le sonrió a Naruto.

—Me ha encantado Naruto. 

—Deja que ayude a ponerte la. 

Extiendo mi mano y él me coloca la pulsera. 

—Te queda muy bonita. 

—¡Gracias!.— me sonrojó una vez más. 

—Vayamos a cenar, bella dama.— suelta una risita y me pasa el casco. 

Me coloco el casco, me abrazó fuerte a su cuerpo y salimos directo a la plaza. 

                              ***

Estamos caminando y, me detengo, cuando veo que Sasuke está adelanté. Hablando con su amigo Jugo. Me doy la vuelta, camino lo más rápido que puedo, para que el no me vea. Y evitar alguna escena de celos. Naruto se percata de que ya no estoy a su lado y corre detrás de mí. 

—Oye Hinata, espera…

Evitó voltear. Pero parece que el llamado que me hizo Naruto alertó a Sasuke.Me detengo y Naruto al fin logra alcanzarme. 

—Hinata, ¿Qué pasó? 

—¡Hinata!.— la voz resulta familiar, es Sasuke.

—¡Sasuke!.—doy un respingo. 

—Se puede saber, ¿Que haces aquí? Y ¿Quien es este?.— dijo mientras señalaba a Naruto. 

—Oye, deberías de fijarte en el modo que le estás hablando.— 

—¿Y a ti? Que rayos te importa, como le hable.¡ Es mi mujer!

— Alguien debería enseñarte a respetar a las mujeres. ¡Dattebayo! 

—¿Y quién lo hará? ¿Tú? Idiota.— Sasuke suelta un risita.

Naruto está enfurecido. Debo calmar esto antes de que llegue a pasar algo más.

—¡Sasuke por favor!  Controlate.— sostengo a Sasuke de los hombros.

—¿Disculpa? Yo soy el que te encuentra aquí con este idiota, ¿Y soy yo, el que debe controlarse? 

¡Oh no!, Naruto le ha dado tremendo puñetazo a Sasuke, el solo se ríe y escupe sangre.

—¡Naruto! ¿Que te pasa? 

—Lo siento Hinata. Pero este tipo ya me cansó, no dejaré que te traté a así… 

Sasuke se le ha abalanzado a los golpes, solo me quedo viendo, cómo se pelean, por mi culpa, ambos están gritando y todo es mi culpa. Las lágrimas están a punto de salir… no… no  logro contenerlas. Naruto. Cae encima de él y le devuelve los golpes. Se están peleando y yo… lo único que puedo hacer es romper en llanto y gritar.

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