Amigos con muchos derechos [Rubegetta] ❤️

- 11- [lemmon]

Al fin las paredes entre ambos se habían derrumbado, Rubén por fin sabía lo que su querido héroe sentía por él y podía decir que al después de todo y profundizando en todo lo que había pasado estos días, el sentimiento de protección hacia el pelinegro era por otros motivos.

Era extraño, siempre fue una persona despistada pero nunca le fue un problema el entenderse a sí mismo, samuel provocaba en el cosas que nunca nadie había hecho y admitamoslo, el traje de lobo nocturno lo hacía verse aún más sexy de lo que ya era.

Camino hacia la casa de vege, hubo tonteo entre ambos, podían ser ellos mismos en su totalidad, la timidez de samuel hacia el castaño había desaparecido y los besos no se detuvieron por nada del mundo.

La falta de aire se hizo presente nuevamente, una sonrisa de dibujo en los labios del castaño seguido de un suave - samu, te quiero- su voz grabe y cálida hizo estremecer al pelinegro juntando sus rostros otra vez, el calor del momento les provocaba cada vez más, hasta el punto de hacer notar sierto detalle en la parte inferior de cada uno.

La provocación que se generaban les ganó en esta ocasión, rubius empujando suavemente a vegetta sobre el sofá que estaba en el centro de la sala, comenzó a darle pequeñas mordidas en el cuello provocando algunos gemidos leves.

Rubén estaba dominando por completo la situación, le deseaba, necesitaba probar su sabor, bajó su mano acariciando el abdomen del pelinegro llegando al borde del traje.

- está noche seré yo quien te coma, lobo - le dijo en el oído provocando un escalofrío en samuel.

- Soy completamente tuyo, osito-  respondió tomando al castaño por el cuello para besarle nuevamente, la ropa iba sobrando tras caga nuevo suspiro.

Boca abajo, aferrado con fuerza al borde del sofá, resivia cada embestida del castaño, los apretones de las manos de este en sus caderas le tentaban a gemir cada vez más fuerte.

- Rubén- grito, rubius se estaba apoderando de cada centímetro de su cuerpo y le encantaba.

-vege... Estoy por... - dijo entre suspiros doblas.

-hazlo-  respondió jadeante.

Llegando al clímax, los gemidos de Rubén se hacían cada vez más grabe. Tenía una sonrisa en su rostro, cayendo rendido junto al pelinegro, se quedaron dormidos.

...

Los rayos del sol entraban por el ventanal en el centro del salón, samuel despertó buscando a Rubén, tomó la manta que le cubría y bajó a buscarle. Rubius se encontraba preparando algo para comer.

-despertaste - dijo el castaño sacando un par de tostadas.

-mis ojos ya me pedían verte, mon ciel- respondió robándole una tostada del plato. - aún no se que haremos para disimular tu fuga de prisión.

-me tendré que ocultar siempre entre tus sábanas, ahí nadie se entera - respondió el de ojos verdes con una mirada coqueta.

-que eres tontito, cabezón-- respondió samuel con un poco de vergüenza.

-ya pensaremos en ello luego, mientras dejame consentirte. - cosa que era más difícil de encontrar que los diamantes era a Rubén en su faceta romántica.

El timbre sonó, samuel corrió a vestirse, tenía que ver quien era - quedate aquí y si son los policías, por favor escondete- le indico al más alto mientras salía, por suerte no era lo que pensaban, Borja había ido de visita, asumía que su amigo no estaría bien después de que se llevarán a rubius el día anterior.

Samuel evitando que la entrará estuviera abierta más del tiempo necesario tomo a luzu del brazo y le arrastró por las escaleras.

-tío, pero calmate, porque tanta agresividad? - preguntó el castaño con algo de risa.

-Rubén está aquí. - respondió samuel.

-QUE?! Pero como?

-le ayude a escapar, bueno más bien lobo lo hizo, luzu por favor no le digas a nadie aun no sabemos que hacer. - suplico samuel.

-no saben que hacer? A mi se me hace que si sabían--dijo señalando una marca en el cuello de vegetta - al parecer el lobo salió de fiesta. Soltó una pequeña risa mientras samuel sonrojado tapaba su cuello.

-callate cabezón que no es tu asunto--dijo vegetta mientras le daba un golpe a Borja. - cómo sigue auron?

-estable y asqueado, está odiando su nueva apariencia - respondío con pena - piensa que lo dejaré por verse así y no logro hacerle entender que es a quien mas amo en este mundo.

-solo es cosa de tiempo cabezón, ya verás que saldrán de esta, saldremos de esta como siempre lo hacemos.

...

Luzu volvió a casa, debía seguir cuidando de su pareja, darle la fuerza que había perdido.

-auron? - no había respuesta, lo busco por todos lados y no había respuesta del mayor.

Sobre la cama había una nota, Borja la tomó y comenzó a leer...

<<luzu lo lamento, pero no quiero volverme un problema para ti. Buscaré una cura para esto por mi cuenta, por favor no me busques, no me encontrarás. Volveré a por ti cuando vuelca a ser la persona de la que te enamoraste. >>

Una lagrima comenzó a correr por la mejilla del castaño, solo fueron 40 minutos... 40 minutos en los que le dejó solo, perdiendo la mitad de su vida.

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Hey chicos! ^^. que tal va su noche?.
Se que quizá ni sea el mejor capitulo lemmon que hayan leído, pero siendo sincera esta es la primera vez que escribí algo así para público. Espero disfruten el capitulo de hoy. Hasta la próxima 🖤.