Tanjikana One-shots [Pedidos Cerrados]

MI DEMONIO FAVORITO

Odia a los demonios, los detesta, ellos le arrebataron a su hermana kanae ¿como no iba a estar enojada con ellos? Sabía disimular su enojo de una manera excelente al igual que su hermana shinobu, sin quitar el hecho de que no le gusta expresarse con la gente y de tomar sus propias decisiones, anhelaba con toda el alma la extinción de esas alimañas pero.....su forma de ver los demonios cambio al conocerlos, Kamado Nezuko, era la primera cazadora que llevaba consigo un demonio y aún recuerda con gracia la noche que le rompió la mandíbula y persiguió a su hermano que había sido convertido en una criatura nocturna, Kamado Tanjiro, al principio deseo la muerte de ellos dos, pero cuando nezuko llegó a la finca con tanjiro, las cosas cambiaron.... Durante su estadía formo una estrecha relación con los hermanos...sobre todo con el chico, a pesar de no hablar y no poder salir al sol, tenían sus momentos íntimos al caer la noche, el es tierno, amable, comprensivo y de pocas palabras, igual que ella, así que a shinobu y nezuko no les extraño ver que ellos se hicieran buenos amigos....aunque ella quería algo más, observo algo embobada la mariposa que se paró en su dedo, pero algo le llamó la atención al oír un murmulló, pudo divisar una silueta masculina parada que la observaba bajo la sombra que le brindaba el techo de la finca ¿que estaba haciendo a esas horas cuando el sol esta en lo mas alto y su luz es intensa? ¿Queria morir acaso? ¿Porque mejor no se esperó hasta la noche? Soltó un largo suspiro para comenzar a caminar a esa dirección, por un momento tuvo la tentación de sacar su moneda y lanzarla para ver si hablaba con el oh no, pero decidió no hacerlo, se sentó acomodando su espalda en una pared junto al joven del bambú, algo que ellos no sabían que los espiaban, un grupo de chicas que querían saber si la relación de ellos había pasado de amigos a novios

-ara ara, veo que kanao-san esta vez no uso la moneda- hablo por lo bajo una chica de mechones morados -¿que le habrá hecho ese chico para que no use la moneda?-

-nii-san...- susurro una ojirosa con una gran sonrisa -hacen linda pareja ¿no lo crees aoi-san?-

-si- respondió distante una ojiazul, ella no quería estar ahí espiándolos, parecía una acosadora, pero fue obligada por su sempai y las tres hermanas ¿que mas se podía hacer?-

-¡la pareja necesita un nombre!- exclamaron al unido tres niñas -¡tanjinao!-

-nada mal-

Dejando de lado a las acosadoras, kanao hablaba felizmente con el de cabellos burdeos que le prestaba atención, era hermosa, muy bella, cuanto deseaba ser de nuevo humano y poder llevarla a todos lados para que conozca, darle su amor y caminar junto a ella bajo el sol, por ahora se acostumbraría a hablar con ella en la sombra

-eres un buen escuchador....- apoyo su cabeza en el hombro del chico que la abrazó por la espalda -jeje...tu me entiendes ¿verdad?-