Capítulo 1

6.2K 247 64
                                    

Y ahí estaba. Hermoso como nadie más.

Visualicé su rostro pequeñito con lágrimas corriendo por sus coloradas mejillas. Simplemente un ángel caído del cielo, castigado y rodeado de personas asquerosas. Pobre bebé.

Me acerqué a aquella vitrina donde se encontraba, con su onessie de ositos y un chupón en su diminuta boquita. Tenía el cabello revuelto, como si acabase de despertar de una larga siesta. Sostenía una mantita azul pastel y un gorila de peluche, ambos fuertemente presionados contra su pecho como si fueran a escapar de él. Quise morir al verlo.

Sus ojos grandes me observaban con atención, analizándome con mucha atención, reteniendo sus sollozos. Yo solo lo miré y le regalé una suave sonrisa con hoyuelos que la acompañaban. Él sonrió también, como si le agradara.

Se acercó a la orilla de la cuna en donde estaba, lo más cercano al vidrio que nos separaba y me observó más, con un movimiento constante de su chupón.

Escuché un ruido que provenía de los barrotes de la cuna producto del movimiento del niño al acercarse, bajé mi vista y leí el pequeño letrero que colgaba.

Louis (18)

cod: tpwk26

El hermoso ángel se llamaba Louis. Precioso, como él.

Tomé mi teléfono y anoté aquel código en las notas, debajo de otros tres códigos más de otros posibles bebés que me gustaría escoger.

Sentí que algo moverse frente a mí, miré y vi su pequeña manita apoyada en el vidrio mientras me observaba. Era tan pequeña, delgada y un poco pálida. Golpeteó con ella el vidrio, como si quisiera llamar mi atención. Sonreí y puse mi mano sobre el vidrio, quedando sobre la de él, tapándola completamente. Él rió por la diferencia de tamaño, provocando unas arruguitas en la comisura de sus ojos que adoré al instante. Sorbió su naricita de botón varias veces mientras yo lo contemplaba. Él es una obra de arte.

Bajé mi mano luego de que él lo hizo, nos observamos un poco más y di un paso atrás, alejándome para seguir mirando al resto de los bebés que tenían en exhibición.

--

Me encontraba en la recepción, esperando mi turno para ser atendido y que los papeles del niño al que escogiera me fueran entregados, para poder llevarlo a mi hogar. Aún me encontraba indeciso respecto a mi elección. Tenía dos preferencias, pero no podía decidirme por una, ya que el resto fue descartado. Primero estaba una niña de cabellos oscuros y ojos color miel, ella me llamaba mucho la atención por su belleza, pero tenía algo que no me hacía sentir seguro respecto a ella, quizás era por el aura que ella tenía. No soy creyente de ese tipo de cosas, pero no me daba buena espina la chica. Y por otro lado, estaba el adorable bebé de ojos azules y bellas arruguitas en sus ojos, pero lo veía muy pequeño mentalmente como para hacerme cargo de él, es decir, quiero una compañía, no una carga. Además, no tengo mucha paciencia como para lidiar con niños o personas "más pequeñas".

Escuché que una de las secretarias que estaba detrás del mostrador llamó mi nombre, me acerqué y ella me recibió con una amable sonrisa, a lo que yo solo respondí con una mirada.

"Hola, señor Styles, ¿ya tomó una decisión?" Dijo amablemente.

"Aún no me he podido decidir. Quería saber si está la posibilidad de que usted me asesore un poco con esto."

"¡Por supuesto! ¿Me permite los códigos de los bebés que usted escogió? Ella me entregó un papel y un lápiz, donde yo transcribí los códigos que anoté en mi teléfono. Ella los vió y los ingresó en su computadora.

"Bien, por lo que me muestra la computadora, la niña Janice ya fue solicitada por alguien más, solo que no han venido a recogerla aún. En cambio, Louis está disponible, pero tiene un pequeño problema." Ella hizo una leve mueca al decir la última frase respecto a Louis.

"¿Cuál es el problema?" Pregunté.

"El sufre de una grave alergia alimentaria, es decir, son muy pocos alimentos los que él puede ingerir y puede llegar a ser mortal si come algo que no debe por accidente, por lo que debe ser llevado a un hospital de inmediato." Suspiré.

"¿Y qué cosas puede comer?"

"Oh, eso será detallado en una lista que se le entregará a usted en el momento de hacer la solicitud de entrega."

"Okay ¿Hay algún otro problema?" Dije, ya un poco cabreado. No fue buena idea salir del trabajo y venir inmediatamente, debí haber descansado o acudir el sábado.

"No, señor. Solo ese. Es por eso que nadie ha querido llevarse a Louis, ya que debe seguir una dieta muy estricta y no todos los dominantes se dan el trabajo de seguirla." Oh, pobre bebé.

"Está bien. Me lo llevo."

"¡Grandioso! Iré a imprimir los papeles con la ficha del pequeño y el contrato que debe firmar." Asentí. Ella se puso de pie y se alejó. Me recosté sobre el respaldo de la silla suspirando pesadamente. Quería mi cama.

La chica volvió unos minutos después con papeles en sus manos y se sentó frente a mi otra vez.

"Aquí están los papeles. Debe firmar aquí." Ella dibujó equis en cada espacio donde debía ir mi firma y así lo hice varias veces en distintos papeles. "Aquí está la ficha de Louis con todos sus datos." Me entregó dos hojas. "Mañana debe venir a retirar al muchacho a las 10:00 am."

"¿Disculpe? ¿Mañana?"

"Sí. Debemos alistar al pequeño para que pueda ser llevado." Explicó.

"No, lo quiero ahora." Sentencié.

"Pero Señor, no podemos..."

"No me interesa." Le interrumpí. "Lo quiero ahora. No quiero tener que volver aquí mañana."

"Sí, señor." Y se retiró a buscar al muchacho.








Bueno, aquí el primer capítulo.

La verdad es que hace mucho tiempo no escribía una historia y si se pasan por mi perfil hay solo mierdas de como el 2015 con una horrible ortografía. No las borré solo porque me traen lindos recuerdos.

Espero que les guste este nuevo proyecto y que lo disfruten.

Decidí publicar la historia cuando termine de escribirla, así no corro riesgo de que me aburra de escribir y jamás termine las obras, como sucedió con todas las otras historias. Así que, si pongo cosas aquí que pasaron hace mucho tiempo, es por eso. No sé cuanto tardaré en escribir esto.

Igual subiré este capítulo para captar lectores desde antes.

Si ven algún error, háganmelo saber de todas formas, para así corregir.

En estos momentos hay una pandemia mundial so... en mi tiempo libre fuera de la escuela, escribiré. Bueno, no tan libres porque decidieron mandar más tarea que cuando estamos en clases. Estoy disfrutando y odiando esta cuarentena.

Eso es todo. Gracias por leer. <3

Sweet baby, ls.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora