Es viernes, y no se a donde puedo ir el fin de semana, digo, no se ni dónde estoy.
Todavía me duele lo de la silla pero que le vamos a hacer, estuve pensando en eso, se estaban peleando y según yo me dieron por accidente, aunque por lo poco que vi, la silla iba en dirección contraria de los sujetos peleándose; no le di mucha importancia.
Llegando pasa lo habitual, pero luego de saludar a Tomoko, escuchó algo, se escuchaba bajo pero claro
-No te acerques a ella
Un poco confundido me dirijo a clase y espero a que llegue el profe.
Estás últimas horas han sido muy incómodas, un sujeto que se sienta al otro lado me ha mirado fijamente por bastante tiempo, aunque intenta disimular, es algo aterrador pensar en el... ¿Quién es? ¿Qué es? ¿Sabrá que soy? ¿Estará relacionado con lo de esta mañana?
El resto del día ha transcurrido con normalidad, exceptuando el sujeto que me observaba y otros cuantos de diferentes salones que pasaban enfrente del mío.
Ya acabando las clases el sujeto que me miraba y otros más se me acercaron de una manera un tanto amenazante.
Suelo salir al último para evitar problemas con los demás pero ahora parece que evitando problemas tienes aún más.
Uno de ellos se dirigió a mi diciéndome
-No deberías acercarte a ella
Y otro continúa
-Alguien como tú no puede estar con ella
Se imaginan lo aburrido, tedioso y aterrador que es que te amenacen como por 30 minutos diciendo lo mismo, terminaron por decirme lo mismo
-¡No vuelvas a acércate a ella, o lo lamentarás!
Sentí algo de miedo pero en mi interior surgió un pensamiento... No se les pudo ocurrir una frase mejor, se escuchaba como cliché de película pero, la amenaza fue clara.
Saliendo me encontré con Tomoko y me pidió que la acompañara, acepté a pesar de las amenazas de antes, pero ella se dio cuenta de que estaba preocupado, me preguntó
-¿Estas bien?
-¿Porque preguntas?
-Te noto distante y angustiado
-Pues me dijeron que no me juntara contigo
-¡¿Quién?! ¡¿Porque?!
-Por que según alguien como yo no puede estar con alguien como tú (que en parte es cierto), y no se quiénes fueron.
-Voy a intentar ver quiénes fueron y hablar con ellos
-No te preocupes
-Como no... Más aparte de que te amenazaron les vale madres con quienes hablo no
-E-Eso sí
Luego de eso estuvimos hablando un rato de otras cosas irrelevantes como ¿Cuánto mides en tu forma real? Cosa la cuál no supo responder.
Ya para cuándo nos íbamos a los dormitorios me dijo
-Y no te preocupes por mí, puedo defenderme.
Me sonrió y seguidamente se despidió de mi.
Ya regresando a mi dormitorio me puse a pensar en que podría pasar.
El sábado solo salí de mi dormitorio a comprar 5 aguas y 3 maruchanes, porque es lo más "normal" que venden aquí.
Cuando salí me di cuenta de que no me dijeron nada los chicos de ayer incluso cuando pase a lado de ellos, solo que ellos y otros más me miraban con aún más odio que antes, y esas miradas me dijeron más que 1000 amenazas.
Regrese y así estuvo mi sabado, hablando mínimamente con alguien y comiendo maruchanes.
Nota de autor: Espero que les haya gustado está parte.
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Nunca Supe Cómo Ponerle...
FantasyHe aquí otra historia, esta vez sobre mounstros y humanos, sólo que coexsistiendo, los humanos no saben de los mounstros, son "mitos" La historia es sobre un chico que entra en una prepa exclusiva de mounstros, sin saber que era de mounstros.