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Los gritos de mi hermana resonaron en toda la bendita casa

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Los gritos de mi hermana resonaron en toda la bendita casa. Comenzaron a escucharse cada vez más cerca, hasta que golpeó fuertemente la puerta de mi habitación.
Con desgano, me levanté de mi inmensa cama, dirigiéndome a la puerta hacia el infierno, en el que el mismísimo demonio tomaba forma en mi hermana mayor, Yongsun.

La puerta se abrió dejando ver a una furiosa rubia platinada con un celular en su mano.—Al fin te levantas, ¿Sabes que hora es? Debes llegar temprano.—Aún estaba medio dormida, no se que obsesión tienen con que llegue primera a la universidad. Abren las puertas a las 6:15 y yo tengo que estar ahí a las 6:00 ¿Por que? No lo sé.—Toma tu celular, trata de no usarlo mucho y recuerda que mamá instaló un medidor de tiempo, lo usas más de una hora y se apaga, ¿Entendido?

Tomé el aparato que tantos problemas me causaba y refunfuñé un poco.—Si, gracias Yongsun.

—Vístete, nos vamos en 5 minutos.

5 minutos era demasiado tiempo, como no tenía tanto tiempo para meterme a las redes sociales, ni amigos con los que hablar de maquillaje y vestimenta de moda, lo único "Fancy" que sabía hacer era colocar una diadema en mi cabeza.
Así que rápidamente me bañé, me vestí y me peiné. Simple y aburrido como todos los días.

Bajé las infinitas escaleras y caí en cuenta de que ya todos estaban sentados desayunando. Todos excepto mis padres, quienes se iban incluso más temprano que nosotros.

—Buen día Jichu.—ahí estaba Seokjin, desayunando 3 veces lo que una persona comía.—¿Dormiste bien?

Sinceramente, Seokjin era el único hermano con el que era medianamente cercana. Taehyung se la pasa lejos de los demás, haciendo travesuras con sus amigos, Yeri vive encerrada en su habitación y Yongsun trabaja como una desquiciada.

—Si, por suerte.—de repente recordé absolutamente todo lo sucedido la noche anterior.

No pude evitar comenzar a sudar frío al recordar como permití ingenuamente que un completo extraño que podía llegar a ser un ladrón, un secuestrador o quien sabe que otra cosa entrara a mi habitación. Definitivamente me estoy volviendo loca. Debería haber gritado o pedido ayuda, ¡No abrirle la ventana!

—Jisoo...¿Piensas sentarte o te tenemos que invitar?

Tontamente reaccioné ante las palabras del menor, rápidamente me acomodé en la mesa con los demás para desayunar.

—Bien, me voy, me encontraré con unos chicos así que debo partir, querida familia.—Habló Taehyung, recogiendo su mochila y saliendo disparado por la puerta, sin permitir que nadie le dijera nada. Cada día esta más travieso, pareciera que en lugar de crecer solo se vuelve más pequeño, mentalmente hablando.

De hecho, me gustaría poder ser el.

—Este chico... solo espero que no se junte con gente extraña.—Soltó Yongsun con seriedad.

Trust me [YoonSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora