Capítulo 5

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Will
Joder … escuchar eso de ella si que me dolió, ya comprendo a la gente cuando dicen que sienten como si un cuchillo les atravesara el corazón y lo cierto es que es jodidamente doloroso. ¿Acaso puedo estar enamorado de una chica a la que conozco solo hace unos días? La respuesta es no. Estoy seguro de dos cosas en este momento. La primera, no estoy enamorado de Kate y la segunda, ella me atrae demasiado y si continuamos así … no tardare en estarlo.
Al terminar los entrenamientos camino hasta las gradas y escucho a Alex lanzándole improperios a Lía, lo observo con curiosidad. De los tres él es el más mujeriego, por tanto, sabe como tratar a las mujeres para que caigan en sus redes. Observo que cerca de la discusión esta la platinada que me mira, sin embargo, desvío la mirada de ella.
- Eres un jodido obtuso
- ¿Ah sí? Pues tu eres una puta cabeza cuadriculada.
- ¡Que te den!
Es lo último que dice Lía antes de tomar a Kate del brazo y jalarla en dirección a la salida del estadio
- Lisa, ¡nos vamos! – Lisa se despide de Ash y corre tras una muy enojada Lía.
- ¿Pero qué demonios hiciste para despertar a la fiera? – le pregunto a Alex. Él me lanza una mirada enojada.
- Quien puñetas se cree ella para criticar la manera en la que juego – me grita – dice que juego mal. ¿Lo puedes creer?
- Sabes que eso no es cierto, así que no se para que te insultas.
- ¿Que para que me insulto? Que sabrá esa niñata insulsa de futbol. Seguro que no ha tenido ni un novio, total, le doy un premio a quien la aguante. – dicho eso se marchó hacia las duchas aun lanzando improperios.

Kate
- ¿Ya estas mejor? – pregunte con un poco de miedo, temía volver hacerla explotar
- Estoy perfecta – soltó con los dientes apretados.
- Si, ya vemos lo relajada que estas – bromeó Lisa.
- La próxima vez que le vea conocerá a Sea y Taylor.
- ¿A quiénes?
- A Sea – levantó su puño izquierdo – y a Taylor – enseñó su puño derecho.
- No quisiera estar en su lugar. – murmuro Lisa y de repente el ambiente se suavizo y reímos – Kate, vi que Nadia y tu hablaron y luego vi a Will tratando de ignorarte. ¿Pasó algo?
Les cuento lo sucedido y ellas asienten para no interrumpir.
- Sabes que esa chica no te quitará los ojos de encima, te tendrá vigilada, pero tranquila amiga, yo te cubro – dijo chocando uno de sus puños con la palma de la mano restante.
- No creo que haya que llegar a esos extremos Lía … de todas formas no creo que Will me vuelva a hablar.
- Y sus razones tiene … lo rechazaste antes de que él pudiera si acaso sentir algo por ti, eso daño su orgullo … pero tranquila, no creo que te deje de hablar, no somos críos – pensaran que eso lo dijo Lía, pero no, Lisa en los momentos mas importantes saca una madurez increíble que esconde aun no sabemos bien en dónde.
A la mañana siguiente mientras caminaba con las chicas por el estacionamiento nos topamos con los chicos. Le sonreí sin pensarlo, pero él solo se dio la vuelta y se marchó, me quedé descolocada. Podía escuchar las conversaciones a mi alrededor, pero se escuchaban lejanas.
- ¿Quieres pelear? – decía Lía.
- Jamás golpearía a una indefensa chica.
- Perfecto, compitamos. Tres deportes. Cuando pierdas tendrás que reconocer que soy infinitamente superior a ti.
- Bien, pero no perderé.
- Pruébalo
- Dylan, Lisa y Kate seleccionaran los deportes. ¿Quién comenzara?
- Una competición … que interesante … hagámoslo mas emocionante, el que pierda – Alex mira a Lisa con reproche en la mirada – vale, el o la que pierda tendrá que invitar a un bar al ganador o ganadora junto con todos sus amigos, ósea seriamos nosotros seis, contando a Will claro, pero solo uno de ustedes dos pagará.
Los involucrados empezaron a aceptar en el momento que Lisa agregó de sopetón:
- El ganador tendrá que besar en los labios al perdedor.
- ¡Que! – gritaron Lía y Alex al unisonó
- Lo siento, ya habéis aceptado. Todos merecen una recompensa por participar ¿no? Por eso se besarán gane el gane – sonrió inocentemente. – la primera competición la decidiré yo si a ninguno le molesta – todos negaron – Bien nos vemos mañana a las cinco de la mañana en la piscina de la universidad. Primera competición, natación. – Lisa se enganchó de los brazos de sus amigas y caminó emocionada hasta el conglomerado de edificios.

Will
- Me carcajeaba con lo que me contaban mis amigos.
- En serio Will, esa tía está completamente loca si cree que tiene oportunidad de ganar.
- ¿Dices que está loca la pelirroja? Loca está la rubia, con sus apuestas endemoniadas. – dio su opinión Dylan.
- Veo que ya eligieron a su favorita, me alegro.
- ¿Y tú no? Porque sabemos que regalar un pan no es algo común … - empezó Dylan
- A menos … de que quieras llamar su atención. – terminó Alex.
- Boberías. Mi interés es de una amistad solamente.
- Si, claro. Interés de amistad es el que siento yo por la pelirroja. Pero tú, tienes un interés más parecido al de Dylan por la rubia. Casaros y vivir felices por siempre – se burló, por lo que no tardó en llegar el golpe por parte de Dylan – ¿qué? ¿Acaso me equivoco?
A la mañana siguiente nos encontramos todos a la hora acordada en la piscina. Lía sonreía. No sé porque, pero sentía que mi amigo no tendría oportunidad en este deporte. La mirada victoriosa de las chicas me lo confirmaban.
- Soy yo el único que cree que vamos a perder en este deporte – les susurré a mis amigos. Alex me dirigió una amenazadora mirada, la cual no le importo a Dylan que no tardó en secundarme en el comentario. Alex refunfuño molesto, y yo miré a la platinada. Aunque nos habíamos saludado, no había vuelto a compartir palabra con ella desde la plática que tuvo con Nadia.
- ¿Comenzamos? – Lía y Alex se posicionaron en el borde de la piscina, preparados para saltar en cualquier momento. – dos vueltas a la piscina. Gana el primero que los complete. Dicho esto … ¡a nadar!
Saltaron a la vez hasta que por fin tocaron el agua. Las chicas comenzaron a gritar animando a su amiga. Me relajé al ver que Alex se adelantaba a Lía, se mantuvo así durante la primera vuelta, pero en la segunda comenzó a pasar algo que no esperábamos, Alex disminuyó la velocidad y Lía le adelantó y llego primera. Las chicas saltaron enloquecidas y ayudaron a su amiga a salir del agua, luego se abrazaron las tres sin importar que una chorreara agua a montones. Observe con Alex se acercaba al borde y Dylan lo ayudaba a salir. Se quitó el gorro de natación con rabia y lo tiró al suelo.
- Eso no fue justo – gritó con la respiración acelerada
- Mal perdedor – canturreó Lía.
- Jamás hubieras ganado si no hubiese bajado la velocidad.
- ¿Perdón? Tú no bajaste la velocidad. Te cansaste y adivina la natación es un deporte de resistencia.
- ¿Qué demonios sabrás tu? – le discutió.
- Por si no lo sabes estoy en esta universidad por una beca deportiva – le gritó y ante lo que dijo Alex ya no tuvo respuesta.
- ¿Beca deportiva? ¿Eso quiere decir que jamás mi amigo tuvo oportunidad de ganar en esta competición? – preguntó Dylan
- Si que puede ganar. Obviamente Lisa eligió natación para beneficiarme, soy lo suficientemente buena en ese deporte como para tener una beca en esta universidad gracias a el, pero los otros deportes no han sido seleccionados, y aunque me defiendo, no me destaco como en este.
- Vale, si es así en ese caso, elegiré uno con el que logremos empatar y el tercer deporte será seleccionado al azar, para que sea justo. Equitación, será el próximo encuentro. Mañana después de clases en mi casa, mas tarde les enviaré la dirección. – al terminar de hablar Dylan, Alex observó la mirada de Lía que mostraba impotencia.
- ¿Algún problema con ese deporte? – le preguntó, era la primera vez que esa chica mostraba debilidad y eso le preocupó de cierta manera, a mi igual al ver los rostros asustados de sus amigas y sobre todo el de la platinada.
- No, ninguno. Solo que esos bichos me odian. – las chicas se giraron y fueron hacia el campus de la facultad a continuar con un largo día de clases.

Kate
- Puedes negarte. No es necesario que lo hagas.
- Tal vez una de nosotras pueda remplazarte … - comentó Lisa
- No, esto es algo que yo debo hacer.
- Lía, solo es una competición absurda. No tienes que revivir lo que pasó si no quieres.
- Debo hacerlo.
Al finalizar las clases y regresar a mi casa me encontré con mis padres sentados a la mesa, mi padre sostenía algo en las manos que trató de ocultar al verme, aunque las caras de preocupación de ambos me decían que algo no andaba bien.
- ¿Ocurre algo? – negaron y trataron de sonreír.
- Sube a tu cuarto hijita, te llamaremos para cenar. – habló mamá, mientras me empujaba hacia las escaleras, subí, aunque me quedé parada en el último escalón de arriba y lo único que alcance a escuchar fue un < ¿Como crees que se lo tomarán? > de parte de mi padre

Nuevo capítulo ... (redoble de tambores) Jjj. No se olvides de votar y comentar si les gustó. Recuenden que acepto sugerencias, soy una persona abierta a cualguien crítica. Los quiero Sunshine
PD: dentro de poco estaré subiendo otra historia, solo se los comento por si quieren pasarse por ahí (es una orden). No la he publicado todavía porque no encuentro un nombre que me convenza ... En fin ... ¡Nos leemos!

Mecánica del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora