No puede ser, ese pelo... Esa voz y su ropa. Nathaniel!
-Ya sabes hijo de puta! No te quiero ver cerca de ella. - Dice Nathaniel con voz agresiva. Nunca lo había visto en esta faceta, no es el chico bueno que yo conocí en el instituto... Es un milagro que lo reconocí pero Jolines! Si que está cambiado.
- Hola? Akira responde. - Dice chasqueando los dedos enfrente de mis ojos.
- N-nathaniel...? Eres tú? - Digo, tratando de procesar la información y tratar de distinguir al ser que tengo en frente mio.
- Valla... Si que tienes buena memoria Akira, después de irte por 6 años sigue igualmente recordando a los viejos amigos.-
Dice con un tono burlón, valla ya no es tan tierno ahora es más sarcástico de lo que parece.
- Obvio. Me habré ido pero no olvidó a los amigos, no como otros que ni siquiera se les ocurrió por lo menos llamar o preguntar cómo estaba. - Le digo, mientras el traga saliva nerviosamente. Me fui y nadie se acordó de mí, solo Naih que me llamaba seguido y preguntaba si disfrutaba estar en New York.
- Siempre tan rencorosa, Akira. Sabes que eso hará que tengas arrugas más rápido. - Dice con una sonrisa arrogante. Sinceramente si sigue por ese lado, que se valla a tomar por culo.
- Si, si... Ya gracias por salvarme la vida, pero yo me voy. - Digo mientras paso por al lado de él para dirigirme a mí apartamento.
- Hey! Tranquila yo te acompaño, con lo que te ha pasado hoy, prefiero prevenir y hacerte de guardaespaldas. - Siento como agarra mi muñeca y hace que me de vuelta para quedar cara a cara con el.
- Bueno si quieres, pero antes de que abras la boca y dices cualquier cosa sin sentido, te juro que vas a terminar al igual que el tipo que has pegado. - Digo mientras el esta al lado mío haciendome guardia.
- Y bien ¿Cuando has vuelto? - Dice para no tener este silencio mientras nos dirigimos a mí apartamento.
- Pues hoy, me he venido con una amiga desde New York. - Digo y veo la reacción de Nath.
- Verdad que te habías ido New York y ¿Como fue vivir en tremenda ciudad? - Dice mientras me mira.
- Me ha encantado vivir allá es tan diferente a París, pero de igual forma ya extrañaba. - Digo con una sonrisa mirando al cielo.
- No será que extrañabas a tu pelirrojo? - Dice con una sonrisa que insinúa muchas cosas. Yo me paro en seco.
- Nathaniel, ten algo en claro yo y Castiel no somos nada. - Le digo mientras lo miro con ceño fruncido.
- Valla... Eso explicaba por Castiel ahora sale con tantas chicas entrando a su departamento en el periódico. - Mi cuerpo se paraliza y me pongo helada. ¿Que me pasa? ¿Por qué me ha dolido tanto que digiera eso? Le dijo lo primero que se me pasa por la mente.
- Pues... no me sorprende, total siempre ha tenido a muchas chicas comiendo de la Palma de su mano y ahora que es famoso con mayor razón debe tener ahi a un montón de grupies dispuesta a complacerlo. - Digo como si no me hubieran afectado sus palabras porque no siquiera deberían tener ese efecto.
- Pues claro siempre ha tenido a varias comiendo de su palma porque incluso consiguió a la chica más guapa del instituto.- Dice con tratando de fingir una sonrisa, pero le sale una mueca de desagrado. Genial! He llegado por fin a mí apartamento.
- Bueno... Muchas gracias por dejarme en mi hogar guardaespaldas. - Le digo mientras me contengo una carcajada.
- Oh! Y yo pensé que por hacerte el favor de protegerte me ibas a invitar a entrar. - Dice mientras pone una cara de tristeza.
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Del odio al amor solo hay un paso, ¿No?
Romance"Volver a mis raíces, donde he vivido todo tipo de emociones, el lugar en el que aprendí a amar. ¿Volverá a ser todo como antes?." ~Akira.♡ Akira de 25 años, vuelve a su ciudad natal, Paris. La ciudad más conocida como "La ciudad del amor." Después...
