Sweet Revenge ¦ Descendientes

OO8

Ben camina entre los pasillos del palacio de Mulan, en estos momentos se dirige a la sala de reuniones para hablar con la madre de Loonie y los demás miembros del consejo, respira profundo en cuanto está enfrente de la puerta, accediendo a la sala después de tal acción.

Los miembros del consejo se levantan de sus sillas en cuanto lo ven, hacen reverencia en señal de respetó, Ben imita su acción.

—Majestad— La primera en hablar es Blanca Nieves —¿Es verdad que sus tropas atacaron el bardo de la hija de Úrsula?

—Efectivamente— Ben asiente —¿Acaso hay algún problema?

—Debe saber que esa decisión fue muy precipitada— Elsa es quien habla ahora —¿Que habría hecho si su plan no hubiese funcionado?

Ben suelta una risilla estrepitosa, observando a los adultos que tiene enfrente suyo con un dejé de burla.

—No había márgen de error, no había posibilidad de equivocarse.

—¡¿Por qué no lo consultaste con nosotros?!— Grumpy estalla en irá —¡Somos el Consejo Real! ¡Y lo peor de todo es que somos un Consejo que tiene que seguir las órdenes de un niñito...!

—¡ESTE NIÑITO ES SU REY!

Ben se levanta abruptamente, su celo se comprime, sus ojos irradian pura irá y el detalle más escalofriante, sus no tan grandes colmillos —por lo menos no ahora— hacen acto de presencia.

El Consejo guarda silencio después de aquel gritó, Grumpy observa anonadado a Ben, casi como si estuviese esperando que el menor le golpease. Aunque eso nunca sucede.

Ben se acomoda en su asiento nuevamente, aclarando su garganta antes de ver a los demás gobernantes con una seriedad que llegaba a ser atemorizante en cierto punto.

—Yo soy su Rey— Habla cuando finalmente logra calmarse —Y yo soy quien toma las decisiones en este lugar, ustedes solo son mis consejeros, la palabra final la tengo yo.— Observa a Grumpy con una sonrisa lasciva —Y si no les gusta, adelante, la puerta está abierta.

Nadie dice nada, no era necesario hacerlo en realidad.

. . .

Doug observa la fogata que está enfrente suyo, siendo acompañado por Raven, ambos simplemente extienden las manos para recibir el calor que consideraban necesario. Raven fija su vista en su amigo, sonriendole con levedad.

—¿Sucede algo, Hood?— Sonríe en cuanto se percata de aquel escrutinio.

—Nada importante, Dwarfson.

Ambos terminan por soltar carcajadas. Raven se levanta y camina lo suficiente como para sentarse a un lado de Doug, su cabeza reposa en el hombro del hijo de Dopey. Después de tanto tiempo por fin tiene un momento de tranquilidad.

—¿Has sabido algo de Robin? ¿De...Tus padres?— Doug termina con aquel cómodo silencio para preguntarle a su amiga aquello que ha estado rondando por su cabeza.

—Junior parece haberse esfumado— Su sonrisa ahora se convierte en una mueca de dolor —Y tampoco tengo noticias de mamá y papá.

—...¿Que hay de Bianca?

—Oh, Bianca. Mí princesita— La joven Hood suelta una risa amarga —Tampoco hay rastro de ella.

—La extrañó— Confiesa Doug, observando a la arquera

—Yo igual.

Raven oculta su cara que queda entre el espacio del cuello de Doug, ahogando sutiles sollozos

.  .  .

En un lugar no muy lejano camina entre la espesa malesa un joven de cabellos blancos, arrastrando consigo un cuerpo casi inerte, el cuerpo de Celia Facilier.

Al llegar a una cueva amarra a la niña de pies a cabeza, amordazandola para que en cuanto despierte no empiece a gritar. Sonríe satisfecho, puesto que su trabajo ha sido más que excelente.

Lleva una mano a su bolsillo y de este saca un teléfono celular, marca varios números con velocidad, a los tres pitidos le contestan.

—Ben— Saluda efusivamente —Mi trabajo ya está hecho, tengo a la hija del Doctor Facilier escondida en el lugar que me indicaste.

—Perfeccto— Se puede escuchar la risa de Ben atraves de la línea —¿Fue fácil?

—Como quitarle un dulce a un bebé.

—Excelente, porque ahora tienes que hacer otro encargó

—Lo que su majestad deseé— Suelta una risa maliciosa —¿De que se trata esta vez? ¿A qué hijo de villano tengo que hacer pagar?

—Es un bebé, será fácil hacerlo, se encuentra en la casa de Madam Mim. Traelo, pero no lo mates. Confío en ti, Blake

—No te decepcionare

El Dios cuelga el teléfono en cuanto se percata que la niña despierta, se acerca a ella, sonriendo de manera cálida antes de secar las lágrimas que bajaron por sus mejillas.

—Sh...tranquila— Musita —No te haré nada, no por ahora..

Soltó otra sonora carcajada

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Tiempo sin vernos, ¿No?
Me disculpó si el capitulo quedó muy corto, estoy escribiendo uno más largo, tal vez lo publique en unos días

Allison Argent como Raven

Lith Killa como Blake

Ahí les dejo a los fc's.
Sin más que decir, me despido