"Niña, tanto tiempo. ¿Que éstas haciendo? ¿Que es de tu vida?Escribe Zabdiel en una hoja. Deja de escribir por un momento. Apoya la cabeza en el muro frío, la luz del sol no entra mucho de esa pequeña ventana. Pero ya se acostumbró.
Ya son 10 meses que está encerrado en la cárcel.
"Dicen que estás sufriendo, creo que tengo una salida"
Se cansa de escribir, avienta el lápiz y rompe a pedazos la hoja de papel en donde estaba escribiendo para después lanzarlo con fuerza. Se agarra el cabello y grita con desesperación.
Siente que se está enloqueciendo, pero ¿que más puede hacer? Estas son las consecuencias de sus errores. Hizo del mal a su novia por al menos 10 veces. Tu sabias que no tenias que enamorarte de un chico así de "malo", pero te enamoraste lo mismo, viste algo en él que quizás las demás personas no lo veían.
Tu eres la jefa de la policía. Resuelves los casos y decides que hacer con los prisioneros. Cuando viste que habían de nuevo agarrado a Zabdiel, tenias un nudo en el pecho, su caso era siempre el mismo: matar a la gente.
Ese día, pusiste fin a tu relación con él. Zabdiel se enojó demasiado que colocó su mano en tu cuello presionando con fuerza intentando asfixiarte. Los policías vieron lo que estaba sucediendo y lo alejaron de ti.
Lo tienen en la cárcel más de cuanto debería estar. Aunque si están en el mismo sitio, no quieres por nada en la vida verlo de nuevo.
Hoy es el día decisivo. Estás en tu oficina mientras controlas las investigaciones de los detenidos cuando un policía te trae los documentos de Zabdiel.
- Recuerda que hoy tenemos que decidir que hacer con De Jesús- te dice, mientras que tu no logras a captar bien sus palabras - sentencia de muerte o cadena perpetua-
Tragas con fuerza. Abres los documentos con las manos que te tiemblan, agarras la foto suya que le hicieron apenas vino aquí. Detrás de esa mirada fría y de todos esos tatuajes, se esconde un Zabdiel dulce que te hace enamorar más.
- Tráelo aquí- dices con la mirada en la foto.
- Claro jefa-
No pasan muchos segundos y ves los policías entrar con él, te das la vuelta para verlo pero luego te arrepientes, tiene las manos esposadas y las grandes orejeras debajo de sus ojos, no verlo por 10 meses tiene cierto efecto.
Él nunca quita la mirada de la tuya y eso hace que te pongas más nerviosa.
- TN...- susurra.
Decides ignorarlo, tienes que hacer tu trabajo aunque si por dentro quieres solo liberarlo.
- De Jesús Zabdiel, no es la primera vez que usted se encuentra en esta situación. Ya sabe como funciona-
- TN, ¿porqué me tratas como un desconocido?- pregunta él.
Te haces la fuerte. - No sé que hacia usted esa noche a matar a alguien de nuevo sabiendo ya las consecuencias, no habían motivos para hacerlo-
- Escuchame, TN-
- Tenemos que decidir que hacer con usted, lo que hizo es algo muy serio-
- TN...- gruñe
- Entonces iniciamos de...-
Zabdiel se levanta bruscamente y golpea sus manos en el escritorio con fuerza.
Das un brinco por el susto. Tienes miedo de que pase lo mismo de la otra vez.
- Joder, ¿me dejas hablar?!-
Asientes lentamente.
- No me trates como un desconocido, ¡soy siempre ese idiota llamado Zabdiel que ama a la chica que está enfrente de él!- grita.
- No comienzes Zabdiel...-
- ¡No me interrumpas cuando te hablo!-
- Te pido perdón... Continúa- le dices.
- TN, no sabes cuanto lo siento ¿está bien? No puedo controlarme, sé que no soy lo suficiente para ti, sé que un chico malo no puede estar con una chica dulce y cariñosa como tú. Estuve encerrado por 10 malditos meses en esa cárcel sin poder verte. Eres demasiado hermosa...- susurra la última frase.
- Zabdiel...- pruebas a decir pero él te interrumpe de nuevo.
- Mi vida es como esa cárcel TN, es oscura si tu no éstas. Perdoname-
Las lágrimas te resbalan por las mejillas sin poder contenerte, le agarras las manos y tus ojos caen en el brazalete que los dos tienen. Aún no se lo ha quitado y eso significa mucho para ti. Te acercas lentamente a él, sus labios se juntan en un beso que esperaban de mucho tiempo.
Sonríen.
- No eres un chico malo. Te amo. Quiero ser tu luz en tu vida- admites.
Zabdiel sonríe con los labios que le tiemblan.
Le quitas las esposas de sus manos, él de inmediato te abraza y te hace sentar en el escritorio para iniciar de nuevo a besarte.
- Zabdiel, no podemos hacerlo aquí- susurras cuando vez lo que está por hacer.
Él se ríe.
- Así tienen una buena excusa para mandarme en prisión de nuevo-
- Pero eso quiere decir que te van a encerrar de nuevo- dices mirándolo a los ojos.
- Al menos es otra excusa para tenerte cerca-
Haces una sonrisa.
- Además, ¡que se vallan todos para el diablo!-
Te ríes junto a él y comienzan a besarse como solo ustedes dos saben hacer.
Ya quisiera estar así con el De Jesús. Ash.
Ya casi sale Honey Boo!!😍
ESTÁS LEYENDO
Imagina CNCO
Fiksi Penggemar¿ Y si soñamos un poco con CNCO? • Imaginas • Mundo paralelo • Si estuvieras en CNCO