FINAL

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Pasó un mes, y a pesar que debimos volver hace una semana, nos decidimos en alargar las vacaciones, ya que durante este mes, planeamos todo...
¿Todo qué?
Estaban todos, YoungJo, GeonHak, SeoHo, DongJu, KeonHee... ¿Hwanwoong? Pues esperándome, ¡obvio!.
Hace dos días habíamos tenido nuestra ceremonia civil, donde si, se firma ese papel al final dónde te casa el juez. ¿Ahora?
Pues dos días después decidimos hacer la fiesta.
Estaban los padres y algunos abuelos de los chicos afuera en el patio, repartidos en sillas y mesas, lo más familiar y privado posible. Y aunque no éramos muy devotos de la iglesia, decidimos hacer una pequeña ceremonia invitando a un pastor (o sacerdote) a que nos diera su bendición.
Yo estaba adentro de la casa con mi mamá.

Tu: ¿No estás nerviosa? (dije nerviosa)
T/m: ¿Pero por qué me preguntas eso a mí?
Tu: No sé, soy yo la que está nerviosa, es que... bueno tu hija se casa, debes estar ...algo... no sé.
T/m: Ya te casaste hija, aunque si estaba más nerviosa en la mañana, pero por los preparativos finales. Estoy feliz de estar contigo en esta etapa de tu vida, orgullosa de que encontraste el amor, y que espero dure muchísimo tiempo.
Tu: Te amo ma
T/m: Te amo pequeña Chucky (me abrazó)

Ella salió primero luego de abrazarnos, esperé tras la puerta para salir después de unos golpecitos.
Papá estaba fuera de la puerta, esperándome. Me ofreció su brazo y comenzamos a caminar hacia un pequeño altar en donde estaba el pastor.
Hwanwoong en traje era la cosita tierna más hermosa y elegante que había visto en la vida, los chicos no se quedaban atrás, se veían muy guapos, y mientras avanzaba por la pequeña alfombra, saludaba a los familiares que hoy nos acompañaban.
Llegué al altar, Hwanwoong me recibió y tomados de las manos escuchamos (lo siento, tengo que decirlo) el latoso discurso del sacerdote, sobre el matrimonio, el amor, etc etc. Hasta que pasamos a la parte del "si, acepto".
Donde dimos pequeños votos de amor, comprensión y demás cosas, finalizando con la postura del anillo el uno al otro.
Y aunque ya Hwanwoong me había besado una y mil veces, esperó hasta que el sacerdote le permitiera besar a la novia. Y nos besamos.
Al fondo podía ver a mis papás llorando, a Keonhee aplaudiendo y saltando como si hubiera ganado un premio, a Leedo sonriendo leve, Ravn aplaudiendo mucho, y Xion y Seoho abrazados levantando el brazo libre, echando porras.
Bailamos, comimos y bebimos (sin alcohol) por algunas horas, me había hecho un cambio de vestido y zapatos por unos más cómodos para poder bailar. Bailé con todos, con papá, mamá, los chicos, los padres de los chicos, abuelos, tíos etc., todos bailamos juntos, en parejas, solos...
La fiesta aún no acababa pero Hwanwoong y yo teníamos preparado un escape. Luego de planear la huida, tomamos el auto que habíamos comprado y nos fuimos de viaje, dos horas de viaje, donde comencé manejando yo, y Hwanwoong finalizó ya que quise descansar un poco y además porque me perdí.
Llegamos a un hotel más o menos lujoso, registramos nuestra llegada, subimos y dejamos las maletas tiradas.
Tu: Me daré una pequeña ducha.

La necesitaba así que agarré la primera toalla de la maleta y me metí a bañar, algo rápido, digamos que me tomé el cabello en una moña y lavé mi cuerpo desde el cuello para abajo y sería. Salí en toalla hasta la sala. Las maletas no estaban así que supuse que Hwanwoong las llevó a la habitación y fui hasta allá...
Ya había visto a Hwanwoong desnudo una vez, lo recuerdo bien, pero verlo ahora, casados, sin camisa ni saco, sin zapatos ni calcetas, sólo en pantalón de traje, con su cabello negro semi despeinado y de espaldas, fue algo caluroso.
Me acerqué a él mientras se volteaba y al mirarme sonrió. Es primera vez que lo veo reaccionar así.
Me besó. Me besó y acercó mi cuerpo contra el suyo, haciendo el beso aún más profundo de lo que se pudiese. Hacía calor, y en ese momento me pregunté para que carajos me metí a bañar...
Sentía las manos de Woongie acariciando cada centímetro de mi espalda, hombros, brazos sin intenciones de quitarme la toalla, mientras yo bajaba las manos para desabotonar el pantalón.
Con el pantalón en el suelo, entre beso y beso Hwanwoong bajó las luces para tener la visión justa y necesaria, y me acomodó en la cama, de espaldas y de rodillas, sobre mi se separó y habló.

Hwanwoong: Me estaba preguntando para que entraste a la ducha.
Tu: Me estaba preguntando lo mismo...

Quitó lentamente mi toalla, comenzando a  repartir besos por todas partes, para iniciar una nueva noche inolvidable.

FIN

¿Qué me hiciste, Hwanwoong? FINAL Donde viven las historias. Descúbrelo ahora