¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
─ No tengo todo el día, ¿Sabes? ─
Momo se encontraba en una crisis. Una crisis total. Más antes de que dijera algo Izuku la interrumpió.
─ ¡E-Ella va a hacerlo, no se preocupe, señorita Nemuri! ─El chico de cabello le cubrió la boca a la menor de los Midoriya antes de que dijera algo indecente.
─ Más les vale que sí, y más les vale que cante bien. ─amenazó ella antes de darle una cachetada a Izuku con su cabello e irse.
Pasaron unos segundos de silencio que parecieron horas y al fin Momo habló.
─ No voy a cantar.
─ ¡Tienes qué! Vamos, Momo. Si no tendremos que limpiar todo el restaurante de la señorita Nemuri. Y me da tanto miedo que no quiero pasar mucho tiempo aquí.
─ ¡Pero ve en que lío me metiste! ¡Y en primer lugar fue no fue MÍ culpa que olvidarás tu billetera y en medio de tu desesperación rompieras tu plato!
En seguida, el hermano de Momo se sonrojó de la vergüenza.
─ Vamos, Momo, no hagas tanto drama, es sólo cantar en frente de un restaurante el cuál es tan viejo que su aforo es de 9 personas, ¡O menos!
Y tenía razón. Ese lugar era muy viejo, según la señorita Nemura. Un Resto-bar que está desde los años 60's llamado Midnight. Era muy visitado en esos tiempos, más con el pasar de los años las personas ya no frecuentan tanto.
De alguna manera, esto ya no le sorprendía a azabache, casi siempre terminaba en líos ridículos como éste. Así que no había de otra, tenía que hacerlo. tenía que cantar una canción en frente esas 9 personas.
Ahora el problema era qué canción. Bueno, eso no. Ahora todo dependía de cuántas personas estuvieran allí para ver a Momo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La señorita Nemuri le había dado una hoja con la letra., la estaba aprendiendo un poco. Y cuando ya se sintió lista se acercó a la señorita.
