𝑰'𝒎 𝒂 𝒇𝒐𝒐𝒍 𝒕𝒐 𝒘𝒂𝒏𝒕 𝒚𝒐𝒖 [ markhyuck ]

chapter 1.

Jeno y Yang Yang siguen discutiendo sobre alguna trivialidad mientras yo sorbo tranquilamente de mi zumo. A pesar de los gritos del segundo frente a mí, mi vista no se ha despegado del guapo pelinegro sentado a un par de mesas de nosotros. Esa espalda ancha y ese pelo negro azabache me parecen demasiado atractivos como para apartar mi mirada de él.

—Lee Mark —susurro. Su nombre sonando tan bien en mis labios que no puedo evitar entrecerrar mis ojos y lamer mis labios con diversión. —Bonito nombre...

Apoyo mi barbilla sobre la palma de mi mano y sigo sorbiendo de mi zumo hasta que la voz de Jeno me saca de mis ensoñaciones.

—Le vas a agujerear la espalda al pobre chico como no dejes de mirarlo —dice sin prestarme realmente atención.

—No lo puedo evitar, me pone demasiado —encojo mis hombros a modo de respuesta.

—¿Nueva víctima? —pregunta.

A lo que yo afirmo con un guiño y un asentimiento.

—Así es.

Yangyang, que hasta ese momento solo había estado escuchando, se une a la conversación.

—Haechan, ya te lo he dicho, ¡pero Lee Mark es prácticamente inalcanzable! —me grita entre susurros. —Ya no es solo el hecho de que ni siquiera sabes si es gay, ¡por dios! ¡Es el hijo del hombre al que tu padre odia!

—Justamente por eso lo quiero más... —respondo mordiendo mi labio inferior, mi mirada en su espalda.

—Si te pillan, la reprimenda será monumental... —añade Jeno.

—Además ¡A que clase de estúpido se le ocurriría tal cosa! Deja de jugártela Haechan... No te insisto tanto cuando te encaprichas con el hijo rico de algún empresario, ¡pero esto es completamente diferente! ¡Podrías joderte la vida!

—Oh vamos YangYang, deja de exagerar... ¡Solo será una follada y ya está! No es como si fuera a acabar casándome con él... —respondo completamente convencido.

—Ya veremos... Primero de todo, veamos si consigues siquiera acercarte a él...

—¿Qué quieres decir con eso? —pregunto con mi ceja levantada.

Jeno también parece empezar a interesarse por la conversación, pues deja su teléfono a un lado y pone toda su atención en Yangyang.

—Bueno... no es ningún misterio en la escuela, pero el perfecto Mark Lee es bastante selecto con su grupo de amigos.

—Pues yo siempre lo veo rodeado de gente —digo cruzando mis brazos.

—El hecho de que sea social o les hable bien no significa que los vea como amigos —responde levantando su dedo índice. —Nadie, nunca, ha conseguido profundizar con él. Solo el par de amigos con los que va siempre.

Lo observo hablar con sus amigos con aún más curiosidad. Veo su pose despreocupada, pero recta. Ni una arruga, ni un pelo fuera de sitio. Su persona grita perfección por todas partes, la clase de perfección que mi viejo siempre ha intentado imponerme.

—Nadie sabe más de él de lo que todo el mundo sabemos. Notas perfectas, delegado de su clase, bueno en los deportes, educado y bla, bla, bla... y que, bueno, es el único hijo del presidente del partido Bareun.

—¿Nada? ¿Absolutamente nada? —pregunto con incredulidad.

Yangyang niega con su cabeza y mi confianza flaquea por unos instantes. Me recuerdo que nadie nunca ha conseguido resistirse a mis encantos y cubro la inseguridad creciente en mi pecho con pensamientos alentadores.