El italiano despiadado (Completa)✔️

Capítulo 15

Editado 2023

Tengo hambre
Tengo hambre
Quiero Lombardi a la plancha.

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Lorenzo Lombardi

Entro a la habitación y las luces están apagadas. Veo que la puerta del balcón están abierta y una luz encendida.

Me acerco lento y la escucho hablar por voz.

—Estoy más cerca de ti, de lo que te imaginas —dice ella.

Cierro mis puños.

—Si, estoy en Italia, quisiera verte.

Me acerco más para escuchar la voz, pero no puedo.

—Ok, hablamos mañana. También te amo —dice y cuelga.

Voy a la habitación sin que me vea. Y la escucho cerrar las puertas corredizas.

Estoy en la esquina de la habitación y ella no me ha visto.

¿Será que habla con el tal Marcos?
No es un buen tipo para ella,  yo si.

—Estúpido Lombardi. Estúpido... ojalá y no se te pare —la escucho decir.

—Se me paró y lo usé —digo y ella se sobresalta.

Ella agranda los ojos y da un paso hacia atrás.

—¿Cuándo llegaste?

—No tienes que saber. ¿Por qué soy un estupido? —pregunto acercándome a ella.

—Déjame en paz, Lorenzo —dice caminando al closet. Saca una almohada.

—¿Tienes miedo? —pregunto mirándola de pies a cabeza.

—No tienes que saber —repite metiéndose a la cama.

Tan bien deleitado que estaba viéndola de pies con esa pijama.

Me desnudo quedando solo en boxer y me meto a la cama. Nos damos la espalda.

Lucía Navarro

Me despierto y estoy sola en la cama. Me levanto y voy hasta la ducha. Me doy un baño y me pongo una ropa cómoda para bajar a desayunar.

De seguro el imbécil ya bajó.

Voy al balcón para ver el mar.

El paraíso.

En una esquina está Lorenzo con su portátil y unos lentes.

¡Demonios que sexy!

Tiene unos jeans y un polo ajustado.

¡Ay virgen de los pectorales!
No me desampares.

—Vamos a desayunar y cuando subamos, debes llenar unos informe que te envié por correo, por favor—dice sin mirarme.

—Ok —digo y busco mi celular.

Bajamos y nos sentamos en una mesa. Me coloco la servilleta en las piernas. Y veo el menú.

—Quiero dos croissant de jamón y queso, un jugo de naranja y un poco de frutas, por favor —digo y él anota todo en la libreta.

-Lo mismo, y un café con leche, sin azúcar —dice sacando su celular.

—Por favor —le digo al chico y él sonríe —¿tienes problemas con los modales?

—Soy poco educado, mi miembro tiene más educación; se levanta para que las chicas se sienten.

—Eres un perro, Lombardi —digo sintiéndo mis mejillas arder.

-Con título.

Nuestro desayuno llegó y empezamos a comer en silencio. Disfruto de mi delicioso desayuno y veo nuestro al rededor, es muy acogedor y hermoso.

Lo miro.

Hasta masticando se ve sexy.

—Deja de verme y come —se acerca con su servilleta y limpia la comisura de mis labios —.Estás babeando.

—Ni que fueras lo mas delicioso del mundo.

—Sabes que soy un dios griego digno de admirar —dice masticando con sensualidad.

—Egocéntrico.

—Gracias.

Me acuesto con el ipad y me pongo a llenar todo lo que me envió.

Pasé dos horas durmiendo y más de 3 llenando todo los formularios. Siento que me duelen los ojos.

Lorenzo se está bañando para la reunión. Yo aún me estoy pensando si ponerme ese vestido.

Él sale con la toalla en su cintura, el agua recorre de su pelo a su abdomen.

—¿Me quieres secar con la lengua?

—Con mis bragas —digo y voy hasta el baño rápido.

Salgo en toalla y busco toda la ropa, el pequeño estuche del maquillaje, la plancha del pelo y los accesorios.

Después de maquillarme, ondularme el pelo, me visto y salgo.

—¿Con ese vestidos no vas a ningún lado? —dice mirándome de pies a cabeza.

—Voy a salir tal y como estoy —digo dejando las cosas en su lugar.

—Te recuerdo que eres mía —dice tomándome del brazo.

—¿Como anoche, que te fuiste con esa y me dejaste con un extraño? -pregunto soltándome.

—¿Celos? —ríe de medio lado.

—Ya quisieras —digo tomando mi bolso.

—Nada de conversaciones o risitas con mis amigos.

—¿Y si no obedezco? —pregunto desafiante.

—Lucía,  Lucía   Lucía. Comportate.

—Dios Lombardi, no soy tu hija, ni tu esposa, soy tu secretaria por unos días, déjame en paz.

—¿Es lo que quieres? —pregunta acercándose a mi.

—Es lo que te estoy pidiendo.

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Vamos a una pausa...
Tomen agua, respiren, coman y prepárense para lo que viene.