Una historia de un encuentro mutuo entre Peter y Melanie.
Un amor que llevara a este chico a componer poemas y hacer todo lo posible por conquistarla.
Mientras pasa todo esto podemos ver las cosas buenas y problemáticas dentro de su vida.
Aunque el...
El siguiente día estábamos en la escuela, un Martes que iba a quedar marcado por lo que sucedió.
Me dirigí junto a Alison a la biblioteca donde Melanie me tenía que decir algo importante.
Llegamos y me miro con ojos a punto de llorar. Me miro y me dijo:
- Peter, mi familia se va cambiar de ciudad, voy a dejar de estudiar y vivir aquí.
- Pero porque, no puede ser posible.
- Lo siento, mi padre encontró mejores condiciones de trabajo, son de esas oportunidades difíciles de conseguir.
- Te entiendo, no sé qué decir.
- Te voy a extrañar mucho. Hoy en día pocos hombres valoren a las mujeres como lo haces tú, nunca cambies, sé que vas a encontrar el éxito.
- ¿Nos volveremos a encontrar alguna vez?
- El destino va decidir.
La abrace entre lágrimas y le di el último beso.
- Hoy mismo parte el camión con nuestras cosas y nosotros tendremos que estar en el aeropuerto a las 6.
- La última vez que te veré en persona. Quién lo diría, lo único que te quiero aconsejar es que nunca dejes de ser esa mujer fuerte e inteligente, siempre estaré esperándote.
- Gracias, yo igual.
Alison y yo vimos como ella se alejaba en el bus que tomó.
- Peter, lo lamento mucho es duro pero sé que la vas a superar.
- Haré lo que me dijo.
Esa tarde me quede en casa de Alison, preguntándome ¿Por qué el destino me jugaba esta mala pasada alejándola de mí?
Lo último que pensé ese día, fue una reflexión la cual anoté en mi libreta.
"Valora a la gente que tienes, no sabes cuándo se alejaran de ti o cuando estarán contigo, simplemente comparte cada momento como si fuera el ultimo."
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