Mafia Girl

Dmitry Volkov

Lo que para muchos puede ser tan extraño, para mi es algo muy normal. Padre me entreno toda la vida para ser parte de los pocos miembros de Dark. Soy una de las mejores mujeres en combate cuerpo a cuerpo, no fallo ningún tiro ya sea de un arco o de un arma, soy sigilosa y estoy muy orgullosa de esto. Me he esforzado tanto para estar hoy aquí, es mi ceremonia final, lo cual significa que hoy me escogerán. Me preparo poniéndome el traje de cuero negro, pegado al cuerpo y lo que mas me gusta es la R y una daga cruzándola bordada con hilo de oro en mi brazo derecho. Alguien toca la puerta.

-Pase. – vi a mi padre entrar con una sonrisa

- ¿Estas listas, princesa? – pregunto. Yo seguí poniendo las armas en el cinturón que llevaba en mi cadera con las fundas debidas para cada arma, el cuchillo en el muslo de mi pierna derecha, coloco las flechas negras en el aljaba del mismo color y por último mi arco negro con mis iniciales en oro R. D. el cual llevo con mucho orgullo en mi mano.

-Si, padre. Estoy mas que lista, me prepare toda la vida para este momento. Gracias por todo. -

-Tú sabes que haría más que esto por ti y no hay nada que agradecer. Tu sabes que te amo como si fueras mi hija y siempre te protegeré con mi vida. - dijo poniendo su mano en mi mejía. Me abrace a él, sé que no es mi padre verdadero pero padre no es quien engendra, es quien cría y Adriano D'angelo me salvo de la mierda de vida que llevaba a los seis años y me dio su apellido, para el mundo el y yo no existimos, pero aquí estamos. Me separé de el cuándo vi la chica abrir la puerta.

-Señorita D'angelo, es hora. - dijo la chica entrando a la habitación. -Suerte. -

-Gracias, en un momento salgo. - le dije para que saliera del lugar.

-Suerte princesa. -

-Gracias, padre. –

-Recuerda que hoy alguien te elegirá, y será el mas fuerte. El más fuerte para la mas fuerte. Además, hoy estarán todos los lideres de las mafias más fuerte. Recuerda siempre pensar con la cabeza fría. No dudes. No muestres tus debilidades porque eso le da ventaja al enemigo. Te estaré observando. –

Salimos de la habitación y nos separamos. Camino hasta llegar a al pasillo que me llevara hasta la arena. La arena es un tipo de coliseo, por así decirlo, estaremos veinte personas, diez mujeres y diez hombres, en la arena y pelearemos para ver quiénes son los más fuerte, primero empezara el combate de mujeres y luego el de los hombres y al final solo quedara uno de cada sexo, se volverán pareja de luchas, lo cual significa que trabajaran juntos, serán amigos, hermanos y confidentes. Entro a la arena y miro a mi alrededor puedo ver a mis contrincantes y puedo ver que muchas tienen miedo, pero yo no, yo estoy más que preparada.

Escucho el disparo y empezó a correr tomo mi arco y una flecha, va justo al pecho de una joven a la cual venia dispuesta a matarme con un cuchillo, ya solo quedamos cuatro chicas, quedan las más fuertes, pero yo planeo salir de esto con vida. Empieza el combate una chica alta y de pelo negro viene hacia mí, aunque casi no logro acercase tanto ya que le arroje una flecha. Estoy esperando que las otras una de las dos chicas salga vencedora para poder empezar a combatir con ella. Toco mi aljaba y resulta que ya no tengo mas flechas, que momento tan oportuno. Dejo el arco en el suelo cuando miro que la chica viene hacia mí, ella quiere lo mismo que yo, mostrar sus habilidades en el combate cuerpo a cuerpo.

Ella lanzo el primer golpe, el cual logre esquivar fácilmente, la tipa seguía lanzando golpes hacia mí, parecía muy concentrada y dispuesta a ganar, solo que a mi nadie me gana. Lance un golpe justo en su nariz lo cual hizo que se debilitara, seguía golpeándola. Era una lucha muy fuerte, jamás había competido con alguien como ella, estábamos en el suelo peleando. Ella saco un arma dispuesta a matarme, forcejee con ella hasta que se escucho un disparo. Todo, absolutamente todo estaba en suspenso. Ella cayo sobre mi cuerpo la arroje a un lado mío y me pare. Levante mis brazos, sabía que había ganado